Pude unirme a la protesta convocada por los revcom en la misma estación de metro donde un marine blanco y otros lincharon a Jordan Neely. Comparto algunas cosas que vi y aprendí hablando con la gente ahí.
En el chorro de personas que no levantaban la vista, que iban de compras, absortas en sus auriculares, había quienes no podían seguir con lo de siempre. Aquellos que sentían que el linchamiento era intolerable. Carl Dix estaba al megáfono. Los revcom ponían en manos de la gente el desplegado SOMOS LOS REVCOM y recaudaban dinero para poner la revolución en el mapa. Les decían a todos que el mundo podría estar en OTRO CAMINO.
Hablé con una profesional de la salud mental blanca que iba de camino al trabajo pero se detuvo para unirse a la protesta. ¿Por qué? “Porque fue un linchamiento. Ocurrió en el metro de esta ciudad y nadie hizo nada. Y por el hecho de que las personas se encuentran en esa posición en primer lugar”.
Le pregunté por sus observaciones acerca de la crisis de salud mental, y si podría responder al mensaje de los revcom sobre un tipo de sociedad totalmente diferente.
“Es un sistema sanitario de dos niveles. En esta ciudad, los ricos tienen acceso a una asistencia de salud mental maravillosa, pero ver a un terapeuta en privado cuesta 250 dólares por sesión. El sector sin ánimo de lucro está hambreado y muy pero muy mal pagado. Así que las mentes mejores y más brillantes se van a menudo al sector privado, y los pobres que no pueden permitírselo se quedan con muy poco acceso a cualquier tipo de apoyo de salud mental de calidad. Y esto ni siquiera empieza a abordar la cuestión de por qué tanta gente sufre enfermedades mentales en primer lugar, debido a que esta propia sociedad está enferma”.
Hicimos una pequeña pausa para escuchar los mensajes del megáfono y ella añadió: “El apoyo a la salud mental es uno de los aspectos en los que vamos a ayudar a que las cosas avancen y hacia una sociedad mejor en la que la gente disfrute de una sensación de bienestar. No es la única respuesta, pero es parte de la solución”.
Hablé con un joven negro que sigue a los revcom en las redes sociales y acudió para ver la acción. Quería ir directo a “¿dónde están todos?”. Y tenía mucho que decir al respecto. “Muchos de los jóvenes tienen miedo, sobre todo los jóvenes de las minorías, debido a que si los detienen, los harán pasar por el sistema, y saben lo que les pasó a las generaciones anteriores: las personas fueron asesinadas y fueron encarceladas. Como los Panteras Negras, en la época de los derechos civiles”.
Abordó con especificidad y dolor la forma en que la letra de las canciones de rap está programando a la juventud, en particular a la juventud negra, al negársele una historia real de este país, y de la manera en el sistema se basa en eso. “No tienen esperanzas, no se ven a sí mismos como seres humanos, tristemente, con las drogas, el encarcelamiento en masa, y al sistema le encanta eso. Eric Adams, Obama, no hacen ni mierda al respecto... E incluso aquellos que están en la universidad, simplemente están absortos en obtener ese título, tratar de conseguir un apartamento, pero ni siquiera pueden pagar eso. Es una pesadilla cien por ciento estadounidense”.
Le animé encarecidamente a investigar la estrategia de los revcom para pasar de pocas personas a una masa crítica que pueda plantear a estos jóvenes el reto de un camino completamente distinto que podría haber para el mundo. Y sacudirlos de la vida en la que se encuentran. ¿Y qué impacto tendría eso?
Dijo: “Según esa perspectiva, yo definitivamente podría hacer más. No voy a mentir. Sigo a los revcom de la ciudad de Nueva York en las redes sociales. Creemos que lo sabemos todo, pero no es así. La gente intenta saquear pero eso no logra ni una mierda, simplemente cierran las tiendas y un montón de personas salen detenidas. La ciudad de Nueva York podría ser uno de los lugares en que la cosa se podría arrancar porque Nueva York es uno de esos lugares donde se inician las protestas y la revolución. Inclusive al remontarnos a las protestas contra la guerra de Vietnam y la guerra del Golfo”.
Poco después de hablar con él, lo vi en una profunda conversación con los revcom sobre la importancia que él podía tener en este panorama.