El 18 de agosto, Laura Carleton, 66, llamada “Lauri” por sus amigos y la comunidad y conocida por su pasión fashionista de toda la vida y su generosidad y su interés por otros, fue asesinada a balazos en Lake Arrowhead, California. Aún no conocemos todos los detalles, pero desde que Lauri abrió su tienda en 2021, la bandera del orgullo que ella exhibió en frente de la tienda había sido objeto de vandalismo e insultos, ante los cuales Lauri nunca retrocedió. Los balazos que le segó la vida provinieron de un hombre que venía vilipendiando a Lauri y a la bandera LGBTQ.
¡El asesinato de Lauri es desgarrador e indignante! Es un resultado intolerable de un movimiento fascista con coordinación nacional: legislaturas republicanas aprueban cientos de leyes que atacan a la gente LGBTQ; consejos escolares presentan y aprueban políticas para vilificar a jóvenes LGBTQ; campañas hablan de “erradicar” a la gente LGBTQ de la vida pública. Todo esto viene azuzando a fascistas, fundamentalistas religiosos y lunáticos descerebrados que se sienten con todo el derecho de aterrorizar y hasta asesinar a las personas.
Ya es hora de que las personas despierten bien ante la realidad de que el Partido Republicano ya se ha convertido a un partido completamente fascista que tiene la intención de imponer sobre toda la sociedad su demencia genocida, supremacista blanca, supremacista masculina, xenófoba, teocrática, alejada de la realidad. Estados Unidos no ha estado tan profundamente dividido desde la Guerra Civil, y aquellos que lo han gobernado de manera unificada durante tanto tiempo ya no pueden continuar haciéndolo.
Se perfila un cambio radical. O será mortalmente opresivo, o arrancaremos un futuro completamente diferente y emancipador para la humanidad de las garras del dominio del capitalismo — un sistema de explotación brutal y opresión sanguinaria.
¡Es posible una forma completamente diferente de vivir! Necesitamos, exigimos, una forma completamente nueva de vivir, un sistema fundamentalmente diferente.
Esto no es simplemente un sueño. En la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, de la autoría de Bob Avakian, la eliminación de la opresión por motivos de nacionalidad y raza, sexo y género, será el propósito y objetivo fundamental de una sociedad que tiene por objeto la abolición de toda explotación y opresión.
El puente hacia ese mundo es una revolución, una revolución real para derrocar este sistema. Y la posibilidad de esta revolución es mucho más grande AHORA en este momento de crisis aguda, en que están deshilachándose el país y las formas en que se ha gobernado.
Ya es hora de empezar a trabajar con los revcom para Luchar contra el poder, y transformar al pueblo, para la revolución: activar a las masas de personas para ponerse de pie y oponer resistencia a los continuos crímenes de este sistema, y defender a las personas contra los ataques a sus derechos y su vida de parte de los golpeadores racistas, odia-mujeres y anti-LGBTQ dentro y fuera del gobierno… como parte de acumular las fuerzas y realinear la sociedad para una revolución real para poner fin a este sistema capitalista que es una amenaza no solamente a la humanidad de la gente LGBTQ sino a la humanidad por todo el mundo.
Lauri es un ejemplo de una persona que se solidarizó con la gente LGBTQ aunque no era miembro de la comunidad LGBTQ; se preocupaba por los demás, y no solamente por sí misma. Esto convoca a toda persona que se niegue a vivir en un mundo donde las personas están bajo ataque, a conectarse con esta revolución. A luchar por un mundo por la que realmente valga la pena luchar, a no permitir que las generaciones futuras sean condenadas a lo mismo o cosas peores, si de plano tengan un futuro. Ya es hora de que encuentres tu valor y tu convicción de ponerte de pie y no permitir que estos ataques fascistas acorten la vida de ninguna otra persona, como parte de crear un futuro verdaderamente emancipador.