El Dr. Adam Hamawy cumplió servicios en Gaza durante mayo de 2024. Es uno de los 99 médicos que firmaron una carta abierta a Biden y Harris tras un año del genocidio israelí en Gaza, titulada, “Pongan fin a esta locura ahora”. Esa carta concluyó: “Cada día que continuamos suministrando armas y municiones a Israel es otro día más que nuestras bombas trituran a mujeres y nuestras balas asesinan a niños”.
El 3 de diciembre, el Dr. Hamawy presentó un impactante y conmovedor pase de diapositivas a un público que llenó Libros Revolución en la Ciudad de Nueva York. Libros Revolución y revcom.us coauspiciaron la función, y el corresponsal de revcom.us, Alan Goodman, sirvió de anfitrión y moderador. Se transmitió en vivo, y la función entera, incluida la sesión de preguntas y respuestas, está disponible en inglés en línea para compartirla. ¡Y puedes verlo aquí también!
Informe desde Gaza
Los siguientes pasajes breves de la presentación del Dr. Adam Hamawy han estado redactados ligeramente para la claridad. Durante la presentación, el Dr. Hamawy mostró fotos detalladas de niños heridos y muertos por bombas, proyectiles de artillería y balas israelíes. Por respeto a la dignidad de las víctimas, se le pidió al público no sacar fotos de esta parte de la presentación, pero las descripciones que dio el Dr. Hamawy (que siguen abajo) pintan un retrato vivo de lo que presentó, la realidad para los palestinos en Gaza que sobreviven a duras penas, y los muchos que ni siquiera sobreviven.
Dentro del Hospital Europeo de Gaza: Todos estos son niños
Hice mi servicio en el Hospital Europeo de Gaza. Está ubicado en Jan Yunis, en el sur de Gaza. Se encuentra justo en la frontera con la ciudad de Rafah, así que cuando empezaron a bombardear a Rafah estábamos en el mero borde. Toda la zona de evacuación se colindó con nuestra ubicación, y estábamos en la primera zona declarada “libre”, aunque bombardearon justo en las afueras del propio hospital.
Pues, bombardearon algunos edificios justo en las afueras de nuestro portón cuando estábamos ahí. También algunas casas; fueron muertos un doctor y una enfermera que vivían apenas un par de cuadras de distancia del hospital, cuando su casa fue bombardeada durante nuestra estancia ahí.
Así se veía antes. Descargué estas fotos del internet, de cómo se veía antes de nuestra llegada. No se podía ver esto cuando estábamos ahí porque sólo se veían las tiendas de campaña y las personas que vivían ahí. Unos 15 mil a 20 mil refugiados vivían dentro del recinto del hospital. El recinto contenía el hospital, tenían un pequeño almacén ahí, y también un colegio de enfermería. Esta es la sala de emergencia.
Esta foto es del interior del hospital, para darles una idea de cómo se ve con las personas que vivían ahí. Las familias, en los dos lados, pueden verlo, ni siquiera tenían tiendas de campaña, tenían lonas de plástico. Cocinaban, los niños corrían por los corredores. Dormían. También las escaleras estaban llenas de gente. El hospital albergaba a tantas familias. Y estas eran las “condiciones de cinco estrellas” porque la mayoría de las personas no tenían techo. La mayoría estaba fuera. Incluso fuera del recinto, en la playa y simplemente a la intemperie.
Eso pasó en mayo. Ahora las personas están viviendo a la intemperie en el invierno cuando está lloviendo, cuando hace frío. Hace dos semanas los que estaban viviendo en la orilla del mar, unas 40 tiendas de campaña fueron inundadas y arrasadas. Una familia que vive cerca de nosotros en Nueva Jersey tiene parientes que perdieron a dos hijas por esa inundación; dos hijas desaparecieron y después las encontraron ahogadas.
[El Dr. Hamawy hace este aviso antes de mostrar una serie de imágenes de niños heridos, agonizantes y muertos bajo el cuidado de él y sus colegas:] Si están sacando fotos, por favor no las sacan, desde ahora. Y son perturbadoras. Pero esto es lo que uno ve todos los días en Gaza.
Pues, las personas traídas al hospital por amigos, familiares, usualmente llegan en grupos, porque usualmente están durmiendo en su casa o en su tienda de campaña o en un lugar juntas donde están reunidas y usualmente una bomba les cae encima. Quizá sea un ataque aéreo, quizá la lance la armada israelí que ha salido de los barcos o quizá la lance la artillería que está estacionada fuera de las paredes en todo Gaza.
El Hospital Europeo de Gaza por lo normal cuenta con 200 camas. Tenía 1.500 pacientes al interior, además de las 15 o 20 mil personas [albergadas ahí]. Pues son más de siete veces más que su capacidad normal.
Muchas veces tratamos a los pacientes en el piso. No todos sobreviven estos ataques, obviamente. Muchos mueren en la escena. Una tercera parte de ellos mueren en la sala de emergencia mientras los estamos tratando. Y solamente una tercera parte alcanza a llegar al piso de arriba para la cirugía o los Cuidados Intensivos. Y de aquellos que llegan a Cuidados Intensivos, solamente el 20 por ciento sobreviven.
Miran aquí mortajas de diferentes tamaños, niños, adultos, pues familias básicamente. Estos no son soldados, no son tropas, no son combatientes, no son Hamas.
“Este niño, yo diría, tenía unos 10 años”.
Me llamaron para que yo le revisara la cara. Todos los miembros de su familia fueron muertos, sus dos padres y sus hermanos. Se podían ver las heridas de fragmentos de metralla salpicadas por todo su cuerpecito. Lo miré, y se podía ver las obvias heridas en la cara, pero él dijo que también fue herido de los ojos. Uno de los ojos lo tenía derretido por completo. El otro traía fragmentitos incrustados, por lo que perdió la vista por completo. Estaba bien despierto y alerto cuando hablé con él, pero no podía ver nada y no tenía a ningún conocido que haya sobrevivido. Ya que vi ese ojo derretido, le sacamos una tomografía computarizada (TAC).
Trae un fragmento ahí dentro. Estaba con nosotros un neurocirujano. Le pregunté al respecto, y él dijo que, ya que el fragmento está en un lugar tan sensible, y él sigue despierto y hablando, tenemos que dejarlo así porque tratar de sacárselo podría hacerle más daño. Por tanto, lo vigilamos. Le dimos los antibióticos que pudiéramos porque no quería que se le infectara, pero, repito, cosas así son lo que estamos viendo todos los días.
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Miren la función entera en inglés en línea, incluida una sesión dinámica y reflexiva de preguntas y respuestas. Encuentren más información sobre el Dr. Hamawy, cómo hacer contacto y apoyar su obra en https://www.globalsurgeryfoundation.org/.