15 de junio de 2025. La semana pasada se dieron una serie de ataques contra líderes demócratas, ataques cuyo objetivo es establecer cada vez más abiertamente la autoridad incuestionable del gobierno fascista de Trump y MAGA, mientras que la indignación “sin precedentes” de ayer se convierte en la “nueva normalidad” de hoy.
Veamos…
Domingo 8 de junio: En una entrevista con el Noticiero NBC, el “Zar Fronterizo”, Tom Homan, dijo que no descartaría arrestar al gobernador de California (Gavin Newsom) y a la alcaldesa de Los Ángeles (Karen Bass) si “impiden que las fuerzas del orden hagan su trabajo”. Homan es un hampón ex policía y ex agente del ICE que ahora ocupa el cargo de “zar fronterizo”, no electo ni confirmado por el Senado, creado exclusivamente para él. Aparentemente, esto conlleva amplios poderes que únicamente él y Trump conocen. Pero no está claro cómo ni por qué tiene la autoridad para arrestar a nadie, y mucho menos a los líderes electos del estado más poblado y de la segunda ciudad más grande de Estados Unidos.
Homan dejó abierto el significado específico de “obstaculizar la aplicación de la ley”. Pero claramente incluía la oposición de Newsom y Bass a enviar tropas a ocupar Los Ángeles. Y para fines de la semana, los fascistas habían dejado claro que “hacer preguntas” también está en la lista de delitos.
Lunes 9 de junio: A medida que crecía la indignación legítima por las amenazas de Homan, este afirmó que habían sacado de contexto sus comentarios; que estaba tratando de decir que si un individuo actúa de tal manera que “Yo diría que obstaculiza la aplicación de la ley... Eso es un delito, y que la administración Trump no lo va a tolerar”. [énfasis nuestro]. En otra entrevista el lunes, agregó que Bass aún no se había “pasado de la raya”. (¡Aún no!).
Lejos de retractarse de su amenaza, la intensificó; básicamente, dijo: “Los estamos vigilando, y si hacen algo que no es de nuestro agrado, les daremos una paliza”. E insinuó firmemente que es su responsabilidad, y también del ICE, decidir si la alcaldesa y el gobernador están “obstaculizando la aplicación de la ley” y, por lo tanto, si deberían estar en el cargo… o en la cárcel.
Ese mismo día, le preguntaron a Trump si Homan debería arrestar a Newsom; respondió: “Yo lo haría si fuera Tom. Me parece genial”. Pero la razón que dio Trump no fue ningún delito en sí, sino el supuesto delito de que Newsom se postulara a gobernador. En otras palabras, ¡el gobernador de California debería ser arrestado porque Trump no está de acuerdo con él!
Martes 10 de junio: Mike Johnson, el presidente fascista cristiano fanático de la Cámara de Representantes, opinó sobre el destino apropiado de estos funcionarios demócratas. Johnson dijo: “No voy a darles un análisis jurídico sobre si Gavin Newsom debería ser arrestado. Pero sí debería ser cubierto de brea y plumas, eso sí”.
Johnson no sabe —ni le importa— si esos políticos han infringido alguna ley, pero de todas formas está a favor de castigarlos. Y no simplemente un castigo cualquiera. Johnson mencionaba una forma de tortura-humillación pública que se infligía comúnmente en Estados Unidos en los siglos 18 y 19: básicamente, una forma de justicia similar a un linchamiento en que se desnuda a la víctima, le vierte brea (a veces caliente) sobre el cuerpo y luego la cubre de plumas. Newsom señaló que esto era apropiado, ya que MAGA, en general, está tratando de arrastrar a la sociedad de vuelta al siglo 17.
Miércoles 11 de junio: Un gran jurado federal acusó a la representante demócrata por Nueva Jersey, LaMonica McIver, de tres cargos penales de “agredir, resistir, obstaculizar e interferir” con un agente federal —.¡unos cargos que potencialmente conllevan una pena de 17 años de prisión!
La Procuraduría General de los Estados Unidos dice que “McIver obstaculizó e interfirió por la fuerza a los oficiales federales cuando intentaban arrestar” al alcalde de Newark, Ras Baraka, afuera del Centro Federal de Inmigración Delaney Hall en Newark, Nueva Jersey, el 9 de mayo. McIver se declaró inocente, afirmando con razón que los cargos son “un intento flagrante de intimidación política”.
¿Qué pasó en realidad?
El 9 de mayo, McIver y otros dos congresistas intentaban inspeccionar las condiciones en una prisión para inmigrantes en Newark; este tipo de inspección forma parte de sus deberes bajo la ley. El alcalde de Newark, Ras Baraka, también estuvo presente para inspeccionar en su calidad de alcalde con jurisdicción sobre la zona1.
Agentes federales, muchos de ellos enmascarados o sin identificación visible de ninguna agencia, empujaron a Baraka fuera de los portones del centro y rápidamente procedieron a detenerlo. Los congresistas, como cualquier persona decente, de manera no violenta intentaron proteger a Baraka contra este ataque. Baraka fue arrestado por “allanamiento de morada”, a pesar de encontrarse en propiedad pública. Esto fue una farsa tan descaradamente flagrante que los federales retiraron los cargos 13 días después, y el juez que conoció su moción de desestimación los reprendió severamente por haberlo arrestado. Los federales, únicamente después, iniciaron acciones jurídicas contra McIver por esta nueva serie de cargos falsos.
En resumen, los fascistas tomaron medidas ilegales para impedir una inspección legal del centro donde mantienen encarcelados a los inmigrantes secuestrados en las calles. Luego arrestaron ilegalmente al alcalde de una gran ciudad. Y ahora intentan encarcelar a una congresista por “obstaculizarlos”.
Video en inglés: El senador por California, Alex Padilla, fue sacado a la fuerza de la conferencia de prensa de Kristi Noem en Los Ángeles.
Agentes federales arrojaron forzosamente al suelo al senador Padilla y lo esposaron. Screenshot of tweet by @GavinNewsom
Jueves 12 de junio: Alex Padilla es un senador federal por California, el demócrata de mayor rango en el subcomité judicial del Senado sobre inmigración, y en sí hijo de inmigrantes. También representa a un estado con millones de inmigrantes que actualmente se encuentran bajo asedio de parte del régimen de Trump, y parte del cual se encuentra bajo ocupación militar por la Guardia Nacional y la Infantería de Marina.
Kristi Noem es la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, que incluye al ICE así como al Servicio Secreto) y es una de los tres fascistas que Trump tiene asignados para liderar la guerra contra los inmigrantes.
Padilla dice que ha venido “solicitando al Departamento de Seguridad Nacional mayor información y respuestas sobre sus acciones de aplicar las leyes en materia migratoria cada vez más extremas”, pero había recibido “poca o ninguna información”. Al enterarse de que Noem estaba en Los Ángeles para dar una conferencia de prensa en el mismo edificio que en que se encontraba Padilla, éste decidió asistir, escuchar lo que ella decía y hacerle preguntas. Escoltado por agentes del FBI y del Servicio Secreto, acudió a la conferencia de prensa y se situó al fondo de la sala. En un momento dado, dijo: “Soy el senador Alex Padilla. Tengo una pregunta para la secretaria”.
Casi de inmediato, agentes federales (al parecer del FBI) lo agredieron, a pesar de haberse identificado claramente —dos veces— como senador federal, y a pesar de que simplemente estaba haciendo una pregunta. Padilla fue sacado a rastras de la sala, tirado al suelo y esposado. (Posteriormente fue puesto en libertad sin cargos).
A pesar de la evidencia en video, Noem inicialmente afirmó que Padilla “se abalanzó” sobre ella y que nunca se identificó. El DHS calificó el comportamiento de Padilla de “teatro político irrespetuoso”. El representante Mike Johnson sugirió que Padilla debería ser censurado (oficialmente castigado) por el Senado por su comportamiento “extremadamente inapropiado”.
El mensaje fascista de Kristi Noem
El hilo conductor de todos estos incidentes es que los fascistas no tolerarán ninguna interferencia, de ningún tipo ni de nadie, en el cumplimiento de su agenda. Como lo expresó Bob Avakian en su e-mensaje REVOLUCIÓN #113: “Insisten en que están por encima de la ley y, al mismo tiempo, en que Trump es ley”.
Y muy conscientemente están subrayando su objetivo mediante ataques a demócratas de alto nivel, tanto debido a que en realidad quieren separar la oposición, del sector más “convencional” de la clase dominante que representan los demócratas, como debido a que esto —según esperan— propagará el miedo y la desmoralización entre las personas comunes.
El líder revolucionario Bob Avakian abordó las dinámicas de esto en un breve artículo titulado “Trump toma acciones para establecer una dictadura, no de la clase dominante en su conjunto, sino de cierto sector —fascista— de la clase dominante…”:
Lo que está ocurriendo ahora es que Trump toma acciones para establecer una dictadura, no de la clase dominante en su conjunto, sino de cierto sector —fascista— de la clase dominante, excluyendo al otro sector (“democrático-burgués”) de la clase dominante y aferrado a una vendetta en su contra. Al mismo tiempo, esto puede tener consecuencias enormemente negativas para las masas de personas — debido a que, para decirlo en términos básicos: Si los fascistas pueden hacer esto a las personas que han sido parte de la clase dominante, pues imagínense las implicaciones para lo que pueden hacer a la “gente común”.
Como lo expresó el senador Padilla: “Si así es la forma en que esta administración responde a un senador con una pregunta, si así es la forma en que el Departamento de Seguridad Nacional responde a un senador con una pregunta, solo se puede imaginar lo que están haciendo a los trabajadores agrícolas, a los cocineros, a los jornaleros en la comunidad de Los Ángeles y en toda California y en todo el país”.
Este mensaje también se remachó en otro sentido mediante los comentarios de Noem durante su conferencia de prensa. Al referirse a las redadas del ICE en curso en Los Ángeles, con el respaldo de fuerzas militares federales, Noem declaró: “No nos iremos. Nos quedaremos aquí para liberar a esta ciudad de los socialistas y del liderazgo oneroso que este gobernador y esta alcaldesa han impuesto a este país y lo que han intentado insertar en la ciudad”.
Como señala la historiadora Heather Cox Richardson: “En otras palabras, la administración Trump promete deshacerse del gobierno democráticamente electo de California mediante el uso de la fuerza militar. Esa amenaza es la definición misma de un golpe de estado. Da a entender que MAGA considera que es ilegítima cualquier victoria política que no sea la suya y se considera que tienen justificación para sacar a esos funcionarios gubernamentales por la violencia: una continuación de la intentona del 6 de enero de 2021 de anular los resultados de unas elecciones presidenciales”.
Todo esto subraya la urgencia de lanzar la demanda, y convertirla en realidad: ¡Que se largue YA el régimen fascista de Trump!