Los gritos justos de las mujeres que se elevan en erupciones espectaculares de rebelión están rebotando en todo el mundo. Contra la constante degradación, abuso y trato como seres menores, porque nacieron femeninos en un mundo de dominación masculina, las mujeres en todas partes se están poniendo de pie y exigiendo un fin a su opresión. Bob Avakian, arquitecto de un nuevo marco radical para la emancipación humana, enfatiza agudamente que “si se quiere hablar de un grupo en la sociedad del que no es posible satisfacer su necesidad fundamental de poder respirar y vivir como seres humanos, salvo por medio de la revolución comunista, no hay un grupo para el que eso sea más cierto que las masas de mujeres”.

Lo siguiente es también una verdad científica: estamos viviendo en un momento extraordinario en la historia humana cuando es posible ir finalmente más allá de todo eso, más allá de la negación de la humanidad plena de las mujeres, y más allá de todas las formas de explotación y opresión — por medio de una revolución real. El mundo de hoy, que siempre ha sido un horror para miles de millones de los más oprimidos, atrapados en el trabajo servil y el empobrecimiento en la parte inferior de la cadena alimentaria global, está desgarrado por el rapaz funcionamiento e impulsos del sistema capitalista-imperialista global y la rivalidad intensificada entre los gángsteres imperialistas del Este y del Oeste. Los movimientos y los cambios titánicos están destrozando el funcionamiento normal y las normas aglutinadoras de las sociedades, y en todas partes fuerzas fascistas están en ascenso para volver a articular las partes fragmentadas volviendo a imponer violentamente los valores tradicionales e intentando consolidar el control estrangulador de las fuerzas gobernantes reaccionarias. Un feroz choque está que arde en todo el planeta sobre si se arrastrará la sociedad nuevamente a horrores aún más grandes, tal como se ve en la afirmación despiadada del patriarcado desenfrenado, la destrucción ambiental o incluso una guerra nuclear que conduzca a la propia extinción de la humanidad y de la vida sobre el planeta, o si será posible que la sociedad avance por medio del acto consciente de hacer que por fin se vuelva extinto este sistema capitalista-imperialista merodeador y asesino.

Y la mitad de la humanidad, o sea, las mujeres del mundo y su sed de emancipación, están en el corazón de esta batalla, y su clamor de resonancia mundial simboliza que ¡la humanidad no puede vivir así, que hay que forjar otro camino! La opresión de las mujeres ha estado entretejida a lo largo de miles de años de tradiciones patriarcales las que están profundamente arraigadas y que se han impulsado en todas las sociedades gobernadas por clases explotadoras. En las últimas décadas, la globalización imperialista ha llevado a cientos de millones de mujeres a la fuerza de trabajo mundial. El lugar de las mujeres ya no se limita tan estrictamente al hogar, ya que han obtenido una independencia y exposición limitadas pero reales al mundo más amplio, con el surgimiento de un sentido de posibilidad. Pero esto ha desafiado agudamente los roles tradicionales familiares y de género que son factores clave que cohesionan y estabilizan todas las sociedades opresivas y explotadoras. En todo el mundo hemos presenciado una despiadada reacción y violencia de parte de los gobiernos, las instituciones y todos aquellos que se sienten amenazados por las mujeres que se están volviendo aún más independientes. Van en ascenso la agresión sexual, la violación, la violencia y la hostilidad hacia las mujeres. Las fuerzas fascistas están azuzando esta reacción y están actuando para apretar una supresión vil sobre las mujeres como parte de su programa general de reacción extrema, en Hungría, Polonia, Italia, aquí en Alemania y en todo el mundo.

Bob Avakian, al analizar estas tendencias en sus etapas iniciales, escribió hace casi 40 años: “No se puede concebir la resolución de todo esto salvo de la manera más radical… La cuestión que pende es: ¿será una resolución radical reaccionaria o una resolución radical revolucionaria, implicará reforzar las cadenas de esclavitud o destruir los eslabones más decisivos de esas cadenas y abrir la posibilidad de realizar la eliminación completa de todas las formas de dicha esclavitud?”

La respuesta a la forma en que se resolverá la opresión de las mujeres está estrechamente ligada con el rumbo general de la sociedad. Y si se examina solamente la superficie de los acontecimientos, pues se augura muy claramente el espectro de un futuro terrible: parece que las fuerzas fascistas inexorablemente van en ascenso, tras Polonia, Hungría, India, Turquía y tantos otros, ahora se apoderan del poder gubernamental en la vecina Italia, ahora quitan el derecho al aborto de las mujeres que se ganó en Estados Unidos hace cinco décadas por medio de lucha de masas. El colapso ambiental se acerca más día a día. Los inmigrantes que huyen de la vida de miseria, guerras y hambrunas siguen ahogándose en las aguas heladas del Mediterráneo, mientras que los dirigentes de Europa se pelean tan solo sobre cómo mejor detenerlos. Y a solo unos cientos de kilómetros de distancia, Rusia está enfrentada con Estados Unidos y la OTAN y Ucrania en una guerra que al parecer se encamina en un solo sentido, escalamiento y mayor escalamiento.

Pero al analizar todo ello, Bob Avakian desvela la verdad de que al interior de esta situación, una fuerza de revolucionarios, que actúa en torno estos mismos acontecimientos, podría destrabar un potencial sin precedentes para barrer con el sistema capitalista-imperialista que es responsable de estos y tantos otros horrores y podría hacer avances serios hacia adelante para una revolución con el propósito de emancipar no solo a las masas de mujeres sino a toda la humanidad. Piense en la manera en que millones de mujeres se levantaron ferozmente contra la eliminación del derecho del aborto en Polonia y Estados Unidos, con una resistencia al impulso fascista de imponer la esclavización mediante la maternidad forzada y con tratar a las mujeres como nada menos que incubadoras de la siguiente generación. Este potencial también se ha palpado íntimamente durante el desenvolvimiento del levantamiento de las mujeres en Irán: la brutalidad, depravación y patriarcado bárbaro destruye-vidas y el odio a las mujeres por parte de la dictadura fascista teocrática de la clase dominante iraní y la furia de las mujeres de Irán en unión con las masas de personas que aspiran a estar libres de la opresión y explotación. Nada salvo forjar las fuerzas y la estrategia para una revolución hasta el final podría impedir la rendición de las mujeres y todas las masas una vez más ante los esquemas crueles y las manipulaciones sangrientas de estos mismos mulás y/o los poderes globales que buscan aprovechar las dificultades del régimen e imponer otra forma de control estrangulador sobre la población. Es de gran importancia que exista un partido comunista revolucionario en Irán, el PCI (mlm), que ha asumido este desafío.

Este tipo de agresión fascista junto con los demás horrores sin precedentes que se infligen bajo este sistema está agitando el pensar de las personas, obligando a más y más de ellas a salir de su sueño y obligándolas a hacer frente a la pregunta de ¿por qué está pasando todo esto? ¿Las cosas tienen que ser así? ¿El mundo podría ser otro? Y la degradación y la opresión de las mujeres y su derecho a un tratamiento como seres humanos plenos es un presagio y factor central en cuál rumbo tomará la humanidad, ya sea que se aprieten las cadenas de opresión como una soga, o por fin se rompan y desechen.

Este mismo sistema que esclaviza a las mujeres ahora está peleando por quién será el amo de esclavos más grande del mundo. En Ucrania, los gobernantes occidentales y su máquina de propaganda imperialista están movilizando a las personas para unirse a la orgía del fervor bélico patriótico imperialista, para “defender la democracia contra la autocracia”. ¡Qué mierda en boca de los titiriteros de una red global de dictadores crueles, desde juntas militares egipcias hasta jeques feudales sauditas hasta verdugos fascistas israelíes del apartheid! De manera vergonzosa, demasiadas personas han estado demasiado dispuestas a dormitar junto con este festín matadero, mientras indultan o ignoran los crímenes de guerra del pasado de Estados Unidos y de sus aliados occidentales como Alemania, desde Vietnam hasta Hiroshima, que actúan como generaciones anteriores de “buenos alemanes” hitlerianos, ¡pero una vez más!, entre ellos muchos “progresistas”, dirigidos por el Grüne verde oliva, se niegan a hacer frente a la verdad sencilla: se trata de una guerra del imperialismo ruso sediento de sangre contra el imperialismo occidental liderado por Estados Unidos sediento de sangre, dos pandillas de gángsteres impulsados por la lógica de un sistema de imperialismo capitalista a librar una guerra por la dominación mundial, al usar cínicamente como “carne de cañón” al pueblo ucraniano y al meterlo en el molino de carne de la máquina de guerra rusa al servicio del imperialismo estadounidense y occidental para debilitar a uno de sus principales rivales imperialistas. ¡Quién se atreverá a unirse a nosotros para defender los intereses de la humanidad!

Un futuro terrible, monstruosamente opresivo es el rumbo en que las cosas se encaminan hoy. A MENOS QUE se pueda forjar una fuerza, en medio de este tumulto y el desgarramiento del orden cohesionador de la sociedad, que asuma el entendimiento de por qué todo eso está pasando y aproveche el potencial para una revolución. El Día Internacional de la Mujer pone de agudo relieve esta urgente necesidad de una revolución. Existe un marco radicalmente nuevo para la emancipación humana, el nuevo comunismo, forjado por Bob Avakian, que se basa en la primera ola de revoluciones comunistas, pero también hace rupturas críticas con sus deficiencias y debilidades, no menos en el campo de la emancipación de las mujeres. Si alguna vez usted ha soñado con un mundo así, o se ha sentido anhelos de algo radicalmente mejor, ¿cómo no podría querer enterarse del nuevo comunismo y convertirse en parte de una fuerza que se proponga una revolución real, una fuerza de emancipadores de la humanidad? Únase a nosotros para poner esta Revolución liberadora en el Mapa. Junte a personas en su casa, en su vecindario, en su escuela, en su ciudad para obtener más información sobre este arquitecto del nuevo comunismo viendo el video De cerca y de forma íntima con Bob Avakian: De todo corazón y alma sin transigir, por la revolución en el sitio web RevCom.us y consulte nuestro show semanal de YouTube: El RNL — ¡Revolución, y Nada Menos!

¡Romper las cadenas! ¡Desencadenar la furia de las mujeres como una fuerza poderosa para la revolución!

Capitalismo y patriarcado — No se puede poner fin a uno sin poner fin al otro