Hace un año, una mayoría fascista cristiana de la Corte Suprema anuló el caso Roe contra Wade — el derecho al aborto en vigor a nivel nacional durante casi 50 años. Cada día de este último año ha sido una pesadilla para innumerables mujeres... y ha oprimido, subordinado y degradado aún más a todas las mujeres a la condición de procreadoras e incubadoras.
Harían falta días para hacer justicia a todo el impacto de esta barbaridad, pero lo que está claro es que ha aterrorizado la vida de millones, y que los fascistas no van a parar hasta acabar con TODO acceso al aborto a nivel nacional.
Ante esto, los demócratas y el llamado movimiento “pro derecho a decidir” están desorientando y desmovilizando a las personas que no quiere ver este futuro para las mujeres, y canalizando la indignación colectiva hacia las elecciones. Además de que con las elecciones nunca se han conquistado derechos básicos, los fascistas han dicho que no aceptarán los resultados de las elecciones que pierdan.
Pero la verdad sigue siendo, como el líder revolucionario Bob Avakian dijo hace años sobre la opresión o liberación de las mujeres:
No se puede concebir la resolución de todo esto salvo de la manera más radical y mediante formas extremadamente violentas. La cuestión que pende es: ¿será una resolución radical reaccionaria o una resolución radical revolucionaria, implicará reforzar las cadenas de esclavitud o destruir los eslabones más decisivos de esas cadenas y abrir la posibilidad de realizar la eliminación completa de todas las formas de dicha esclavitud?
La maternidad forzada es esclavización femenina
Hay más de 22 millones de mujeres en edad fértil en estados con prohibición total del aborto, y millones más en estados con severas restricciones. Piense en la vida de estas mujeres y en su futuro, piense en los cientos de miles de mujeres que se embarazan y en lo que significa no tener acceso al aborto. Si sigue esta situación de cerca en las redes sociales o en las noticias, conocerá algunas historias al mes sobre embarazos ectópicos, mujeres obligadas a llevar a término fetos no viables sólo para que el bebé muera en sus brazos horas después de nacer, niñas de tan sólo 10 años de edad obligadas a cruzar fronteras entre los estados para abortar, mujeres que contraen sepsis (una infección potencialmente mortal) debido a abortos autogestionados o abortos espontáneos... pero esto ocurre principalmente a las sombras. Ahora piense en las historias que nunca escuchamos: mujeres obligadas a tener un hijo que de otro modo no tendrían, adolescentes, mujeres golpeadas o simplemente alguien con proyectos de vida, obligadas a ser madres contra su voluntad, eclipsando sus esperanzas y sueños.
Un estudio calcula que se produjeron 25.640 menos abortos entre julio de 2022 y marzo de 2023 en comparación con el promedio mensual de abortos en los dos meses anteriores a la anulación de Roe. Aunque esta cifra no toma en cuenta a las mujeres que accedieron al aborto farmacológico vía una capacidad no oficial, sí nos enseña algo sobre la magnitud de esta atrocidad1.
Además de este terror, cuando el aborto es ilegal, se mueren mujeres. Un estudio proyecta que la anulación del derecho al aborto causará entre 6 y 15 muertes al año, además de que más de 1.000 mujeres se enfrentarán a peligros mortales en sus embarazos no deseados2. Esto no cuenta lo que podría ocurrir cuando las mujeres buscan hacerse daño a sí mismas para inducirse un aborto.
La realidad distópica post-Roe
Terry tenía 21 años y acudió a tomarse la ecografía de las 15 semanas con su novio Eric, de 22 años, en Austin (Texas). Pensaban que iban a conocer el género de su bebé, pero descubrieron que el feto no se había desarrollado por encima del cuello. Se trataba de una anomalía entre un millón, sin posibilidades de supervivencia, pero con “latido de corazón”3. La prohibición total del aborto en Texas no contempla ninguna excepción para las anomalías fetales y no permite que los médicos aconsejen a sus pacientes sobre la mejor manera de proceder (según la ley, esto se considera ¡“ayudar y encubrir” un aborto!). Dado que la salud de Terry ya estaba empeorándose debido al embarazo problemático, el especialista se arriesgó mucho al sugerirle que abortara fuera del estado. Pero la ginecóloga de Terry se oponía al aborto y le aconsejó otra cosa. Aunque tenía claros los graves riesgos para la salud de Terry, la doctora siguió presionándola para que siguiera embarazada.
Terry dijo: “Sentía como, ‘¿mi vida importa en esto, o simplemente se trata de traer un bebé al mundo por un momento?’ Se sentía como si mi vida no importara, como si simplemente pudiera morir y todo fuera en vano”.
Una semana después, la pareja de jóvenes viajó a Nuevo México para abortar. Sentían que no podían contárselo a nadie ni pedir ayuda debido a las leyes en vigor que permiten que cualquiera presente una demanda por ayudar a alguien a abortar. Ella cuenta que su padre intentaba convencerla de que no lo hiciera: “Me sermoneaba sobre mi deber materno de traer a mi hijo al mundo”. Meses después, la pareja aún no se lo ha contado a ningún amigo ni familiar, lo que les cobra un saldo en su vida cotidiana4.
Prohibiciones, confusión, caos
Texas no es el único estado con una prohibición total del aborto, y Terry es una de los cientos de miles de mujeres que atraviesan este infierno post-Roe.
Desde la decisión de la Corte Suprema, se ha prohibido completamente el aborto en un total de 13 estados (Alabama, Arkansas, Idaho, Kentucky, Luisiana, Misisipí, Misuri, Dakota del Norte, Oklahoma, Dakota del Sur, Tennessee, Texas y Virginia Occidental). En Georgia está en vigor una prohibición de seis semanas, es decir, antes de que la mayoría de las mujeres sepan que están embarazadas. Hay otros 9 estados con restricciones variables que van desde las 6 semanas hasta las 15 ó 20 semanas.
Además de esto, los estados con gobiernos republi-fascistas han tomado medidas para aprobar leyes de aborto más duras que restringen el acceso al procedimiento e imponen castigos a los médicos o a las mujeres que abortan. Tan sólo en 2022, los legisladores en los estados presentaron 563 disposiciones para restringir el acceso al aborto, y 50 de esas restricciones se convirtieron en ley ese mismo año. Por nombrar algunas:
- Alabama, Arkansas, Kentucky, Carolina del Sur presentaron proyectos de ley con el objetivo de acusar de homicidio a las mujeres que abortan. El representante republicano de Alabama Ernie Yarbrough dijo: “El aborto es homicidio, y la justicia exige que nuestras leyes lo traten como tal”.
- Wyoming se convirtió en el primer estado en penalizar las píldoras abortivas. Según la ley, los proveedores de abortos con medicamentos podrían cumplir seis meses de prisión.
- Oklahoma e Idaho se sumaron a Texas con leyes de recompensas contra el aborto. Se trata de leyes que permiten a cualquier persona —vecino, compañero de trabajo, activista contra el aborto o incluso un desconocido ajeno de otro estado— demandar a alguien por proveer servicios de aborto o ayudar a una mujer a acceder a dichos servicios después de unas seis semanas de embarazo, y recibir una recompensa de 10.000 dólares o más si gana la demanda. El grupo pro derecho a decidir NARAL informa de que hay más de 15 estados que están a punto de copiar esta ley fascista, la que habría sido inconstitucional hace apenas un año, antes de que la corte fascista anulara Roe y eliminara arbitrariamente la protección constitucional de este derecho básico.
- Idaho fue a mayores extremos y aprobó en abril una ley contra el “tráfico de abortos”, la primera de este tipo. Esto hace que sea ilegal obtener píldoras abortivas para una menor de edad o ayudarla a salir del estado para abortar.
La prohibición del aborto cobra un saldo para la salud y la vida de las mujeres
Christine Zielke tenía 33 años y vivía en Washington, D.C. Tuvo un aborto espontáneo al principio de su embarazo y optó por dejar que el tejido del embarazo saliera de forma natural en lugar de extirparlo quirúrgicamente. Se trata de un proceso que puede durar semanas. Durante un viaje por carretera a Ohio, empezó a sangrar. En aquella época, en Ohio, el aborto estaba prohibido a las seis semanas. El sangrado empapó varias mudas de ropa, y cuando llegó a su destino, se sentó en la bañera, llenando el fondo de sangre. Fue a urgencias y le hicieron una ecografía, que no encontró ningún “latido” fetal. Pero el personal le dijo que no había perdido suficiente sangre como para preocuparse, aunque siguió llenando los pañales de sangre.
Le dieron de alta de urgencias en Ohio sin tratamiento para su aborto espontáneo a pesar de que había estado sangrando profusamente durante horas. El tratamiento que Christine debía haber recibido era un legrado uterino (dilatación y curetaje, extracción de tejido fetal y sangre), pero en vista de que se trata del mismo procedimiento que se utiliza para practicar un aborto, muchos médicos temen realizarlo.
Siguió sangrando en casa durante siete horas, hasta que se le pusieron los ojos en blanco y se puso flácida debido a la dramática pérdida de sangre. Su familia llamó a una ambulancia para que la llevara a urgencias, donde finalmente le practicaron el legrado5.
La historia de Christine no es infrecuente: decenas de miles de mujeres sufren abortos espontáneos cada año, y muchas de ellas necesitarán asistencia médica.
Las ruines estrategias de capitulación de los “pro derecho a decidir” ya están gastadas y trilladas
Los demócratas y líderes “pro derecho a decidir” han camuflado su capitulación ante el Estados Unidos post-Roe, antes y después de la anulación de Roe. Han insistido en que las energías de la gente se centren estrechamente en la financiación de fondos para abortos para ayudar a las mujeres a viajar para abortar o en el apoyo a redes clandestinas para acceder a píldoras abortivas. Aunque estos servicios proporcionan una atención inestimable a ALGUNAS mujeres, como estrategia ha resultado desastrosa y no puede mantenerse al ritmo de los muchos frentes del asalto fascista.
- En los 100 días posteriores a la anulación de Roe, 66 clínicas de 15 estados dejaron de ofrecer abortos. Entre las 66 clínicas, 26 han cerrado por completo, dejando a 14 estados sin ningún proveedor de abortos6.
- ¡Varios estados a los que las mujeres han viajado para acceder a abortos en el último año han tomado recientemente medidas para prohibirlos! Florida, que registró el mayor aumento de abortos en los últimos nueve meses, aprobó en abril una prohibición de seis semanas. Carolina del Norte ha presenciado mientras miles de mujeres más viajaban al estado en busca de abortos, y acaban de aprobar una prohibición de 12 semanas. Estas nuevas prohibiciones tendrán efectos devastadores para las mujeres que buscan abortar en el Sur7.
- Más de la mitad de los abortos se realizan con medicamentos (a diferencia de la cirugía). Inmediatamente después de la anulación de Roe, un grupo bien organizado de fascistas empezó a trabajar para penalizar estos medicamentos, al nivel federal. La forma en que este caso se está procesando podría sentar un peligroso precedente para “proteger a los pre-nacidos”. Este caso sigue su curso en los tribunales.
A medida que más estados aprueben prohibiciones del aborto, ayudar a las mujeres a viajar para acceder a la atención del aborto será cada vez menos una opción. Por la clausura de las clínicas, las clínicas abiertas están sobrecargadas. El dramático aumento del número de casos hace que la capacidad y el personal de las clínicas estén al límite, lo que se traduce en mayores tiempos de espera para las citas, lo que a menudo significa que cuando las mujeres consigan una cita, ya han avanzado mucho más en su embarazo.
Pero el mayor peligro es que los fascistas —dentro y fuera del gobierno— han dicho que aspiran a una prohibición federal del aborto. Estas soluciones parciales impulsadas por los demócratas y el movimiento “pro derecho a decidir” —de trabajar dentro de los márgenes de la derrota— son una estrategia mortal.
Además de pacificar cualquier resistencia real —al negarse a convocar a la gente a las calles—, algunas de estas fuerzas también han atacado a la única fuerza que se atrevió a dirigir una lucha en las calles contra este ataque fascista — De Pie Por el Derecho al Aborto (RU4AR), y los revcom. Calumniaron con saña a Sunsara Taylor, una iniciadora de RU4AR, y al líder revolucionario Bob Avakian, a quien Sunsara sigue. Esta situación contribuyó a la amplia desorientación y desmoralización tras la anulación de Roe contra Wade, ayudando en lo fundamental a este asalto fascista y contribuyendo a los escalamientos genocidas contra los derechos y la vida de las personas LGBTQ8.
Hacer de la anulación de Roe un grito de batalla para la revolución
El aborto legal y accesible es el derecho más básico de las mujeres para que se les considere seres humanos plenos, y revocar este derecho se está utilizando como ariete a favor del fascismo. Con la anulación del derecho al aborto en 2022, miles de años de cadenas patriarcales se han apretado dramáticamente. Esta es una concentración central de la forma en que toda esta sociedad está desgarrándose, en que un sector de los gobernantes se está movilizándose para instaurar un Estados Unidos fascista, y el otro sector de los gobernantes está trabajando desesperadamente para restaurar las “normas” de este sistema opresivo. Por peligroso que todo ello lo es, también significa que la revolución —una revolución real— se ha vuelto más posible.
Ahora se perfilan ante nosotros dos futuros fundamentalmente opuestos: Algo terrible, O algo verdaderamente emancipador. Y esta verdad resuena ahora con más fuerza que nunca: el futuro que obtengamos depende en gran medida de lo que hagamos.
— de la proclama SOMOS LOS REVCOM
Existe una furia latente en las mil y una formas en que las mujeres están oprimidas, degradadas, sexualizadas y explotadas, y a las que ahora se les considera nada más que una incubadora. Esta situación puede y debe ser una fuerza impulsora para hacer una revolución real en Estados Unidos.
Lo que se necesita y lo que es posible en medio de toda esta locura es que los millones de personas que se están angustiando como individuos y sufriendo en silencio, esperando contra toda esperanza que las cosas se solucionen de alguna manera, despierten y se unan a esta revolución.