Yo quisiera decir que me equivoqué, pero el genocidio sólo ha cambiado a una nueva fase. Es más lento y más callado pero no es menos constante ni menos mortal. En tan sólo los últimos dos días, más de 100 personas fueron asesinadas en Gaza, entre ellas docenas de niños. La sangre no ha dejado de correr; sólo que los noticieros nocturnos dejaron de reportar al respecto — aunque en Israel, los medios de comunicación nunca lo hicieron.
— Hanin Majadli en Ha’aretz, 30 de octubre de 2025“Cada vez que despertemos en esta pesadilla — ellos nos sorprenden con la pesadilla de volver a la guerra”.
— Dr. Sami Jabr, Campamento de Refugiados de Nuseirat, Gaza
Palestinos revisan los escombros de una casa particular tras el ataque israelí contra el campamento de refugiados de Nuseirat, 29 de octubre de 2025. Foto: AP
A eso de las 4 de la mañana el martes 28 de octubre, Israel desencadenó una masiva cortina de fuego desde aviones y tanques que azotó edificios residenciales, campamentos de tiendas de campaña y escuelas en Gaza. Lanzaron bombas contra lugares donde se albergaban civiles desplazados por el genocidio israelí con apoyo estadounidense.
Estaba en vigor el cese el fuego de Trump, pero más temprano ese día, según se informó, militantes palestinos habían atacado y matado a un soldado israelí en Rafah. Es una zona bajo el control israelí, y Hamas dijo que “no tenía conexión” con el ataque (lo cual lo comprueba la inteligencia israelí, según se reporta)1.
A pesar de eso el primer ministro israelí Netanyahu ordenó “ataques contundentes”, al afirmar (sin evidencia) que Hamas también estaba dando largas sobre el regreso de los restos de rehenes israelíes fallecidos. Netanyahu consultó con oficiales del régimen de Trump, que le dieron luz verde.
Doce horas después, Israel había lanzado bombas y proyectiles contra otros 26 lugares, así matando a por lo menos 104 palestinos, entre ellos 46 niños e hiriendo a más de 250, entre ellos 78 niños. Uno de los asesinados fue el periodista Mohammed al-Munirawi; con eso Israel ya ha matado a 256 periodistas desde el 7 de octubre del 2023. El ataque también mató a su esposa.
Ninguna de las víctimas tenía conexión cualquiera con el ataque en Rafah ni con el regreso de restos a Israel. Eran personas que desesperadamente trataban de sobrevivir —entre la muerte, el hambre y los escombros— pero Israel los masacró de todos modos.
“Yo apenas entraba en el sueño cuando ¡Pum! Una serie de bombas cayó sobre la casa de nuestros vecinos, la familia Abu Dalal — nuestros amigos y seres queridos”, dijo el Dr. Sami Jabr a Drop Site News desde el campamento de refugiados de Nuseirat. “Era una masacre. Una masacre. Una masacre. Salimos y no encontramos a nadie. Sólo rebanadas de cuerpos y cadáveres desmembrados. Nadie quedó vivo… un niño descabezado. Escenas que te parten el corazón… No tuvimos nada que ver con todo eso. ¿Qué es la causa de todo eso?”
Unos 11 miembros de la familia Abu Dalal, incluidos cuatro niños, fueron masacrados.
Video en inglés: Trump defiende los ataques israelíes en Gaza.
Trump defendió el ataque israelí masivo del 28 de octubre diciendo: “Tengo entendido que aquellos mataron a un soldado israelí... Por lo que los israelíes devolvieron el golpe y deberían devolver el golpe”. Al igual que un gánster despiadado, dijo: “Si ellos (Hamas) se portan bien, van a quedar contentos y si no se portan bien, van a quedar eliminados — se les va a eliminar la vida”. Declaró que “Nada va a poner en peligro” el alto el fuego.
Al día siguiente, el vicepresidente J.D. Vance declaró que el alto el fuego “se mantiene” y desestimó la masacre de 46 niños como “una que otra escaramuza”. Mientras tanto, Israel anunció que había “regresado al acuerdo” pero advirtió que tenía el derecho de “responder contundentemente a cualquier violación”.
¿Qué nos dice la matanza israelí del 28 de octubre sobre el plan de “paz” de Trump?
Video en inglés: Israel continúa sus ataques contra Gaza, mientras Hamas, Cruz Roja siguen buscando los cadáveres de los cautivos.
Desde el 7 de octubre de 2023, Israel ha lanzado sobre Gaza tanto terror, muerte y destrucción que equivaldrían a 13 bombardeos sobre Hiroshima. (Hiroshima es una de las ciudades japonesas sobre las cuales Estados Unidos lanzó bombas nucleares que incineraron a decenas de miles de personas en un instante). La devastación en Gaza es total — financiada y avalada por Estados Unidos. La cifra oficial de muertos es 68.865, de los cuales más de 20 mil son niños. Pero esa cifra no cuenta a los muchos miles de muertos bajo los escombros. Fueron heridos 170.670, miles de ellos permanentemente. Israel ha destruido más de 90 por ciento de la vivienda en Gaza y muy gran parte de sus escuelas, edificios comerciales, caminos, instalaciones médicas, tierras de cultivo, alcantarillado, panaderías — toda la infraestructura, hecha añicos. Son incalculables el terror, sufrimientos, traumas y angustias que se han infligido a los dos millones de palestinos en Gaza.
Según un informe clasificado de Departamento de Estado revelado por el Washington Post, es probable que Israel haya cometido “muchos cientos” de violaciones de los derechos humanos, tantos que tardaría muchos años para revisarlos todos.
Funeral para algunas de las personas asesinadas a causa de un ataque israelí contra Nuseirat, 29 de octubre de 2025. Foto: AP
Con este telón de fondo, tenemos que preguntar: ¿Qué tipo de alto el fuego permite la masacre de 104 personas, entre ellas 46 niños?
Un alto el fuego y plan de “paz” imperialistas que no guardan ninguna relación con proteger al pueblo palestino, asegurarles sus derechos básicos, ni de darles una “vida mejor” como pavonea Trump.
Como hemos escrito, es un alto el fuego que favorece al estado de apartheid de Israel, presidido por el Trump fascista e impulsado por los intereses imperialistas estadounidenses: de profundizar la dominación estadounidense general sobre el Medio Oriente, elevar el prestigio de Trump en Estados Unidos y en el resto del mundo, fortalecer a Israel y reforzar la subyugación del pueblo palestino.
Para ampliar la dominación estadounidense de la región —en particular profundizar los lazos entre Estados Unidos, sus aliados árabes e Israel—, se requiere que se aplaque en cierta medida la erradicación genocida israelí de Gaza y sus amenazas de anexionarse de plano a Cisjordania. Tal como analizamos la semana pasada, existen tensiones y contradicciones entre Estados Unidos e Israel sobre qué tan abierta y gratuitamente vaya a continuar Israel con su matanza y devastación de Gaza. Esas diferencias son muy reales y al mismo tiempo existen dentro del contexto de la dependencia estadounidense de Israel por ser su máquina de muerte más necesaria y confiable en la región, la dependencia israelí de Estados Unidos, y su objetivo compartido de mantener un control férreo sobre el Medio Oriente y más allá2.
Digámoslo bien claro: El “plan de paz” de Trump no repudia para nada el genocidio israelí en Gaza con el aval estadounidense. Lo impulsa más, en una forma nueva.
Por eso, bajo este “alto el fuego”, Israel puede seguir asesinando, matando de hambre y amenazando
Bajo este “alto el fuego” sionista-imperialista, Israel aún puede amenazar, asesinar, matar de hambre y ocupar más de la mitad de Gaza, al mismo tiempo que viola constantemente los acuerdos en el plan de Trump, y al mismo tiempo que aprovecha cualquier pretexto para infligir aún más terror.
Matan a 226: El 29 de octubre, el día que el ejército israelí anunció que había “vuelto al acuerdo [del alto el fuego]”, sus ataques aéreos mataron a por lo menos dos palestinos. Al día siguiente lanzó unos 10 ataques aéreos en Jan Yunis. El 31 de octubre, mató al menos a un gazatí.
Con estos asesinatos, a partir de la entrada en vigor del alto el fuego el 11 de octubre, la cifra total de muertos es de 226 y de lesionados es de 594.
Destrucción a causa de un ataque israelí contra un campamento de tiendas de campaña en Deir al-Balah, Franja de Gaza, 29 de octubre de 2025. Foto: AP
Continúan el hambre y la hambruna: Después de bloquear, con fines asesinos, la entrada de comida, agua, medicina y otros suministros básicos durante más de dos años, Israel ahora permite la entrada de un poco más de ayuda humanitaria a Gaza. Pero no es más que una gota en un balde de agua en comparación de lo que se necesita. Israel continúa su genocidio, aunque a paso más lento, al imponer varias restricciones sobre los envíos:
* Bajo el alto el fuego, 600 camiones supuestamente deben llevar suministros a Gaza a diario, pero el número de camiones con la asistencia más urgente nunca ha pasado de 200 al día.
* Mientras tanto, la mayoría de los camiones que entran son comerciales, que llevan comida y bienes para vender — y no suministran ayuda humanitaria. A menudo esas comidas no son nutritivas, por ejemplo galletas, chocolate y refrescos, o son tan caras que la mayoría de las personas no pueden comprarlas. “Tratándose de personas desnutridas, necesitan proteína y frutas y vegetales frescos, y no chocolate”, dijo un trabajador humanitario palestino.
* Se necesita desesperadamente reparar los sistemas devastados de agua potable y alcantarillado en Gaza, pero Israel ha prohibido la entrada de las piezas y materiales de construcción que hacen falta.
* Unas 41 organizaciones internacionales reportan que las autoridades israelíes han negado en 99 ocasiones, sus solicitudes de llevar ayuda a Gaza desde el inicio del alto el fuego.
* Israel continúa bloqueando la entrada del equipo necesario para desenterrar y devolver los restos de los 10 mil palestinos los que se estima que están enterrados bajo los escombros debido a la embestida devastadora israelí. (A la fecha se han recuperado los restos de 499 palestinos enterrados bajo los escombros.)
* A los restos de 120 palestinos devueltos por Israel le faltan ojos, córneas y/o órganos — lo que indica el robo sistemático de órganos. Devolvió otros restos sin identificación, pero con señas claras de abuso, tortura o ejecución.
Las 125 violaciones israelíes del alto el fuego. El futuro del alto el fuego todavía es incierto, pero no eliminará el abuso ni la opresión del pueblo palestino a manos de Israel.
Ya para el 28 de octubre, la oficina mediática del gobierno de Gaza ya había contado 125 —sí, ciento veinticinco— violaciones israelíes desde el inicio del alto el fuego el 11 de octubre.
Incluyen 52 tiroteos y 55 incidentes de fuego de artillería, nueve incursiones en zonas en las que se prohibía la entrada de fuerzas israelíes, y la toma de al menos 21 personas. También, Israel se negó a abrir el cruce de Rafah entre Gaza y Egipto, lo cual acordó el alto el fuego. Este cruce es vital para la entrada de ayuda y para permitir a palestinos salir de Gaza para su atención médica urgente. El Departamento de Salud Palestino informa que, debido a eso, 983 pacientes han muerto a la espera de cruzar a Egipto para atención médica de emergencia.
El destino del depredador e imperialista “plan de paz” de Trump sigue siendo incierto. Pero siguen sueltos los monstruos genocidas —en Estados Unidos e Israel— y sus planes y maniobras no ofrecen ningún futuro para el pueblo palestino, ni para la gente del Medio Oriente, el futuro que merecen y necesitan tan urgentemente.
El asesinato, la opresión y el genocidio del pueblo palestino en Gaza, Cisjordania y dentro de Israel deben terminar. Los millones de personas que se han puesto en pie por todo el mundo deben seguir exigiendo que termine esta dominación y opresión imperialista, y que luchemos ¡por un mundo completamente diferente y mucho mejor!
¡Alto al genocidio israelí-estadounidense del pueblo palestino!
¡Alto al asedio a Gaza!
¡Todo este sistema está podrido e ilegítimo! ¡Necesitamos y exigimos: una forma completamente nueva de vivir, un sistema fundamentalmente diferente!