El 22 de septiembre, Trump emitió una orden ejecutiva titulada “La designación de Antifa como una organización terrorista interna“. El 25 de septiembre, firmó el “Memorando Presidencial de Seguridad Nacional/NSPM-7: En contra del terrorismo y la violencia política organizada“.
Juntos, estos dos documentos constituyen un plano y un acto de lanzamiento para enfocar el vasto poder represivo del gobierno estadounidense en desbaratar, desmantelar o destruir a toda oposición al régimen fascista.
Las autoridades afirman que ambos documentos oficialmente van tras la “violencia política”. En realidad, la orden ejecutiva y el memorando de seguridad nacional constituyen el marco para un ataque frontal contra disidentes de todo tipo, y contra la propia Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos (la que supuestamente garantiza la libertad de expresión y el derecho a protestar). Comenzaron singularizando a las personas de ideas radicales atraídas por la orientación antifa, pero el ataque se intensificó rápidamente. Ahora, una gran variedad de otros grupos antifascistas están en la mira (incluido, según se informa, Rechazar el Fascismo, que tiene nueve años de trayectoria de adhesión constante a la resistencia no violenta al fascismo). Y fuerzas liberales y progresistas aún más amplias están en la mira.
Como lo expresó el propio Stephen Miller, alto funcionario de Trump: “Esta es la primera vez en la historia de Estados Unidos que hay un esfuerzo en todo el gobierno por desmantelar el terrorismo de izquierda”. En otras palabras: “Vamos a perseguir a cualquiera que no se sume a nuestra reconfiguración fascista total de cada sector de la sociedad estadounidense”.
La orden ejecutiva sobre antifa: ¡Mentira tras mentira!
La orden de Trump “designa” a antifa “como una organización terrorista interna”. También la caracteriza como una “empresa anarquista militarista” que “llama explícitamente al derrocamiento del Gobierno de Estados Unidos”.
De hecho, “antifa” no es una “organización” ni una “empresa” en absoluto — es una orientación hacia la lucha contra fascistas, racistas y diversas formas de injusticia que atraen a muchas personas, en particular a los jóvenes. Es esencialmente una idea, cuyo núcleo es la oposición al fascismo1. No tiene listas de miembros, ni estructura de liderazgo, ni tesorería. No tiene una estrategia “terrorista” ni un conjunto unificado de tácticas de ningún tipo. Tampoco existen posiciones políticas unificadas de antifa sobre ningún tema.
NSPM-7: Plano para la represión total
De las flagrantes mentiras y la satanización de antifa en la orden ejecutiva, Trump pasa a una arremetida mucho más enrevesada y “legaloide” contra “la izquierda” en su conjunto. El NSPM-7 comienza citando el asesinato de Charlie Kirk, los intentos de asesinato contra el propio Trump y otros incidentes de violencia contra líderes fascistas en los últimos años2. Luego, sin ninguna evidencia, declara que estos incidentes son la “culminación de sofisticadas campañas organizadas de intimidación selectiva, radicalización, amenazas y violencia” llevadas a cabo por izquierdistas radicales.
Pero Trump no permitirá que los hechos lo detengan — está dirigiendo una investigación contra “todos los participantes en estas conspiraciones criminales y terroristas — lo que incluye las estructuras organizadas, redes, entidades, organizaciones, fuentes de financiación y pregonadas acciones subyacentes”. Y a estas “investigaciones” las seguirá toda una serie de acciones con el objetivo de desbaratar, disolver o aplastar a toda la oposición, y asfixiar a la sociedad en su conjunto a un grado verdaderamente aterrador.
El NSPM-7 declara que “Estados Unidos requiere una estrategia nacional para investigar y desbaratar las redes, entidades y organizaciones que fomentan la violencia política, de modo que las fuerzas del orden puedan intervenir en las conspiraciones criminales antes de que resulten en actos políticos violentos”. (énfasis añadido.) Presten atención a esas tres palabras: “desbaratar”, “fomentar” y, especialmente, “antes”. Lo que estas palabras indican es que hay que “desbaratar” a las organizaciones y las personas antes de que hayan hecho algo malo, según la creencia del gobierno de que están fomentando cosas malas.
Persecución de crímenes de pensamiento
¿Cómo sabrá el régimen que las personas están “fomentando” la delincuencia? El NSPM-7 advierte que “Estas campañas [de violencia] a menudo comienzan aislando y deshumanizando a objetivos específicos”. “Aislar” a un objetivo específico —diciendo, por ejemplo, que nadie debería estar de acuerdo con alguna u otra declaración escandalosa de uno que otro fascista— podría hacer que alguien se sienta “aislado”, pero en realidad es una crítica política legítima.
Fíjense en lo que dice el NSPM-7: el “aislamiento y la deshumanización” que supuestamente impulsa la (inexistente) campaña de asesinato de fascistas se lleva a cabo en “foros de chateo, reuniones presenciales, redes sociales e incluso instituciones educativas”. En otras palabras, los lugares en los que las personas habitualmente se sienten libres de intercambiar sus opiniones sinceras deberían ser objeto de “investigación” o esas conversaciones conducirán al “asesinato”.
¿Y qué tipo de discurso privado activará las alarmas de los “investigadores”? El NSPM-7 dice: “Existen motivaciones e indicios recurrentes comunes que unen este patrón de actividades violentas y terroristas bajo el paraguas del autodenominado ‘antifascismo’”. Y proporciona una lista de estas ideas peligrosas que impulsan el “terrorismo”: “antiamericanismo, anticapitalismo y anticristianismo; apoyo al derrocamiento del gobierno de Estados Unidos; extremismo en materia de migración, raza y género; y hostilidad hacia los que mantienen opiniones tradicionales estadounidenses sobre la familia, la religión y la moral”.
Examine esa lista con detenimiento, debido a que si usted no es un acólito de MAGA, fascista-cristiano, supremacista blanco, defensor de Estados Unidos ante todo y odia-LGBT, ¡probablemente comparta algunas de las ideas que son “indicios” (indicadores) de que está planeando ataques terroristas!
“Implacable presión (fascista)” de parte de Stephen Miller
¿A qué se refiere Stephen Miller cuando habla de “un esfuerzo en todo el gobierno por desmantelar el terrorismo de izquierda”? Quiere decir que los aproximadamente 4.000 miembros de las 200 Fuerzas de Tarea Conjuntas contra el Terrorismo (JTTF) del FBI se centrarán ahora en “investigar” y en “desbaratar” a las fuerzas antifascistas. (Estas fuerzas de tarea reúnen al FBI con la policía estatal y local). Quiere decir que el IRS examinará minuciosamente las declaraciones de impuestos de las personas que muestren ideas disidentes. Quiere decir que los que donen a causas de izquierda serán sospechosos de “terrorismo”.
El NSPM-7 también dicta que las personas arrestadas en protestas estarán sometidas a interrogatorios “sobre la entidad o individuo que organiza dichas acciones y cualquier patrocinio financiero relacionado con dichas acciones antes de la adjudicación o la iniciación de un acuerdo de culpabilidad”. (énfasis añadido). En otras palabras: se puede delatar (y hacer algo peor) y recibir una condena leve, o negarse a hablar y recibir una condena severa.
Las investigaciones importantes que ya se han iniciado…
BOB AVAKIAN
REVOLUCIÓN #133
Sí, este fascismo de Trump y MAGA realmente es así de malo. Y, si no se expulsa pronto del poder, esto se pondrá mucho peor.
Lea en español, o escuche en inglés, este e-mensaje de @BobAvakianOfficial.
El 16 de octubre, el periodista independiente Ken Klippenstein informó que dos fuentes involucradas en las investigaciones a grupos o individuos presuntamente pertenecientes a antifa afirmaron que “las investigaciones probablemente rivalizarán en alcance con las realizadas bajo la administración Biden sobre los perpetradores del 6 de enero” y que “nadie debería dudar de las órdenes recibidas desde arriba para destruir a Antifa”. La procuradora general Pam Bondi declaró: “Se está desmantelando la organización ladrillo a ladrillo, tal como lo hicimos con los cárteles”.
Como parte de esto, funcionarios de seguridad nacional se están reuniendo con personas influyentes de derecha como Glen Beck y Andy Ngo. Se apoya en estos fascistas, que odian virulentamente a “la izquierda”, como fuentes de información confiable.
Ya están investigando a los que contribuyen a causas liberales y progresistas…
Klippenstein también informa que el Departamento de Hacienda está investigando a organizaciones sin fines de lucro que financian causas liberales y progresistas. Están investigando a The Tides Foundation, un grupo de 49 años de antigüedad que fundó People for the American Way con Norman Lear, y que financia a grupos que van desde Pew Internet hasta Voz Judía por la Paz, y Código Rosa. Podrían estar sometidos a un proceso penal en el caso de que se descubra que donaron dinero que, incluso indirectamente, apoyó a antifa (por ejemplo, si apoyaron a algún grupo que, según el régimen, colabora con antifa).
Klippenstein también informa que importantes bufetes de abogados en Washington, D.C. están advirtiendo a sus defendidos acerca de los posibles riesgos en su contra en el caso de que hagan donativos de dinero a filantropías que donan dinero a grupos que en algún sentido tenga “vínculos” al movimiento antifa amorfo. Es probable que todo esto paralice o corte seriamente los donativos de manera muy amplia, lo que incluye a grupos que aún no están bajo investigación pero que adoptan posiciones “peligrosas” como el “extremismo de género” (que en el lenguaje fascista significa apoyar a las personas transgénero).
Rechazar el Fascismo-Chicago en la concentración del Día Sin Reyes, 14 de junio de 2025.
No hay tiempo que perder
Como dice la Convocatoria a protestas en Washington, D.C. a partir del 5 de noviembre, iniciada por Rechazar el Fascismo: “El fascismo no es una amenaza que se avecina. Lo tenemos encima pero ya”.
Los fascistas de MAGA están actuando ahora para utilizar su vasto poder para aplastar a toda oposición a su consolidación a martillazos en todos los sectores de la sociedad.
En este sentido, cabe reflexionar, y es importante difundir, el siguiente señalamiento crucial de Bob Avakian (BA):
Si se permite que este régimen fascista permanezca en el poder, todas cosas en las que la gente decente ha sentido que podía confiar para buscar justicia serán brutalmente eclipsadas… todo valor moral edificante será vilipendiado y reprimido... cada esfera de la sociedad será reconfigurada, de formas terribles, en consonancia con la crueldad supremacista masculina, anti-LGBT, supremacista blanca y antiinmigrante y la demencia anticientífica, destructora de la salud y del clima del régimen fascista de Trump y los desvaríos sedientos de sangre y la violencia depravada de los fanáticos que encabezan “el departamento de guerra”, en que el maníaco trastornado Trump tiene el dedo en el botón nuclear.
Cada visión, y cada esfuerzo activo, por un mundo mejor, más justo, por un futuro digno en el que vivir, será violentamente suprimido y efectivamente truncado, al menos en el futuro previsible.
Esto no es hipérbole — es la amarga realidad que se está imponiendo velozmente. (Del e-mensaje de Bob Avakian: REVOLUCIÓN #133 — Sí, este fascismo de Trump y MAGA realmente es así de malo. Y, si no se expulsa pronto del poder, esto se pondrá mucho peor.)
En adelante BA dice:
Pero aquí va otra realidad profunda: La movilización masiva convocada por Rechazar el Fascismo, y abierta a todos, representa la posibilidad real —la ÚNICA posibilidad real— de realmente expulsar a este régimen fascista, y de poner fin a los interminables horrores que está decidido a perpetrar.
Profesor de la Universidad de Rutgers abandona Estados Unidos en respuesta a amenazas fascistas
Mark Bray es profesor de historia en la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, tiene una extensa obra sobre los movimientos antifascistas. Su obra incluye el libro de 2017 Antifa: The Anti-Fascist Handbook [Antifa: El manual antifascista], descrito por la editorial como “un estudio detallado de la historia completa del antifascismo desde sus orígenes en la lucha contra Hitler y Mussolini hasta la actualidad — la primera historia transnacional del antifascismo de la posguerra en inglés”. Poco después de que Trump emitiera su orden ejecutiva contra antifa, influenciadores fascistas comenzaron a atacar a Bray como “profesor terrorista interno” y “Dr. Antifa”. Los medios de comunicación fascistas decían que él era “un financista de antifa”.
La sección de la Universidad de Rutgers de Turning Point USA (un grupo estudiantil fascista fundado por Charlie Kirk) lanzó una petición en línea para que Bray fuera despedido. Según la American History Association (Asociación de Historia Americana), las amenazas contra Bray se han ampliado a su pareja, Yesenia Barragán, también profesora del Departamento de Historia de Rutgers.
Bray declaró en una entrevista con Democracy Now! que, tras la orden ejecutiva de Trump, “una serie de troles de extrema derecha e influenciadores en línea comenzaron a atacarme. Recibí varias amenazas de muerte. Alguien publicó mi domicilio en X. Así que empecé a temer por la seguridad de mi familia que se quedaba en casa. Recibimos cada vez más amenazas de muerte, y supe que tenía que irme”.
Bray ha dejado claro que se opone fuertemente al fascismo, pero no forma parte de ningún grupo “antifa” (y, como él mismo señala, “antifa” no es una organización): “Es un coco útil para satanizar la protesta, satanizar la resistencia, equipararla con el terrorismo. Y, en realidad, es un capítulo obvio de los libros de texto sobre los líderes fascistas y autoritarios”. Bray dice: “Lo que estamos presenciando hoy en Estados Unidos es cada vez más fascista. MAGA, a mi parecer —y yo estudio el fascismo, no lo digo a la ligera— es un movimiento fascista. Y si no nos organizamos, si no actuamos en las calles, acabaremos en un lugar realmente malo”.
El 9 de octubre, presa del miedo por las amenazas de los fascistas, Bray y su familia decidieron abandonar Estados Unidos temporalmente e ir a España, donde impartirá sus clases en Rutgers a distancia con el apoyo de la universidad.
La Universidad Rutgers declaró que no hará comentarios sobre asuntos específicos de personal, pero puso en claro: “La Universidad de Rutgers está comprometida a proporcionar un entorno seguro —para aprender, enseñar, trabajar e investigar— donde todos los miembros de nuestra comunidad puedan compartir sus opiniones sin temor a intimidación ni hostigamiento”. La American Association of University Professors/American Federation of Teachers (Asociación Estadounidense de Profesores Universitarios/Federación Estadounidense de Profesores) en Rutgers emitió un comunicado en defensa de Bray y Barragán, que dice en parte: “El silencio ante estos ataques solo envalentonará a la extrema derecha. Con eso en mente, los sindicatos del profesorado de Rutgers rechazan las campañas de desprestigio de Turning Point USA y se enorgullecen de apoyar a nuestros colegas”.
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