El 17 de julio presenció un día nacional de protesta para declarar “Que vivan los buenos problemas”. Este fue el quinto aniversario de la muerte de John Lewis, un congresista que se hizo conocido como líder de los derechos civiles en su juventud. Una amplia coalición de organizaciones convocó al día de protesta. En su sitio web, escribieron: “Nos enfrentamos al retroceso más flagrante de los derechos civiles en generaciones. Ya sea que usted esté indignado por los ataques al derecho al voto, el destripamiento de los servicios esenciales, la desaparición de nuestros vecinos o el ataque a la libertad de expresión y a nuestro derecho de protestar, este movimiento es para usted”.

Por todo Estados Unidos, se llevaron a cabo protestas en más de 1.600 ciudades con muchos miles de participantes. Estas protestas fueron importantes para mantener el impulso de indignación e ira ante las acciones del fascismo de Trump y MAGA. También se llevaron a cabo otras acciones importantes en muchas partes del país, incluidas de RefuseFascism.org.

Sin embargo, para hablar con franqueza, hay millones más que odian este fascismo que no estaban en las calles. Esto tiene que cambiar — ya. Uniéndose a lo que sí se manifestó y aprendiendo de ello, las protestas para derrotar al fascismo de Trump y MAGA necesitan crecer urgentemente. Como escribimos la semana pasada:

Nos enfrentamos a una situación de emergencia. Los tiempos que se aceleran exigen que todos los que se oponen a este fascismo cambiemos nuestra forma de pensar y de actuar — AHORA. Necesitamos conectarnos con otros, trabajar y planificar juntos para rápidamente dar pasos concretos hacia la creación de la antemencionada situación.

Es necesario desarrollar esta resistencia de tal manera que la gente la vea explícitamente vinculada y que indique el camino hacia el desarrollo del nivel de masiva inconformidad y resistencia no violenta que se necesiten para parar en seco la máquina del régimen fascista hasta que el régimen sea sacado del poder. En otras palabras, la demanda “¡Que se largue el régimen fascista de Trump — YA!” debe convertirse en una misión concreta e inmediata.

En esta página se muestran imágenes y voces de las acciones del 17 de julio en todo Estados Unidos. Cabe destacar que, en el Los Ángeles ocupado, Rechazar el Fascismo se unió a otros para presentar una instalación humana llamada “The Disappeared/Los Desaparecidos”, una recreación de la tortura que se está practicando en el campo de concentración CECOT de El Salvador contra los inmigrantes enviados allá desde Estados Unidos por Trump. Rechazar el Fascismo adoptó esta instalación por todo Estados Unidos y añadió un poderoso recordatorio de uno de los elementos contra los que estamos luchando, y de algunas de las personas por las que estamos luchando.