Como destacamos en el editorial de la semana pasada , vivimos un ataque fascista a gran escala contra la libertad académica, con instituciones como la Universidad de Columbia convertidas en herramientas al servicio ce una agenda fascista. Bajo la definición de antisemitismo de la IHRA, propagada por Trump, que las universidades de todo el país se ven obligadas a adoptar, los hechos sobre la naturaleza del apartheid israelí y su historia genocida se califican de "odio", las comparaciones con la Alemania nazi se prohíben y capítulos enteros de la historia palestina se censuran. Los hechos se convierten en "expresión de odio"; la verdad y la resistencia se criminalizan.
Ante esto, algunas voces se niegan a ser silenciadas. El Dr. Adam Hamawy, cirujano plástico que formó parte de un equipo de 19 médicos que viajó a Gaza en 2024 para realizar cirugías de emergencia a civiles heridos en los bombardeos masivos israelíes surtidos por Estados Unidos, envió esta contundente declaración a Libros Revolución, describiendo lo que ha visto en Gaza, denunciando la Universidad de Columbia y retándonos a todos a actuar en este momento crucial:
He estado en Gaza. He visto los cuerpos de niños destrozados por bombas fabricadas en este país. He trabajado junto a médicos y periodistas que sabían que estaban marcados para morir y han sido asesinados para silenciar la verdad.
Ahora la Universidad de Columbia y la administración quieren criminalizar la expresión de esa verdad. No se trata de proteger a nadie del odio, sino de proteger a un Estado que comete genocidio de ser denunciado y de tener que rendir cuentas.
La historia recordará quiénes se alzaron y quiénes guardaron silencio. Este es el momento de hablar, actuar y apoyar la justicia. Cueste lo que cueste.
En el video publicado por @therevcoms la semana pasada (en inglés), Rafael Kadaris explica cómo la Universidad de Columbia usa la definición de la IHRA como herramienta de represión, disfrazada hipócritamente como "protección" del alumnado y profesorado judíos. Kadaris plantea las demandas de fijemos el límite, pongámonos de lado de la verdad y la libertad académica, alto a la censura y la represión, y pongámonos de pie ahora contra el genocidio y el silenciamiento de quienes se atreven a nombrarlo.
Vídeo en inglés