En noviembre de 2023, el Proyecto de Ley 4 del Senado de Texas (SB 4) fue aprobado y firmado por el gobernador republi-fascista Abbott. Este proyecto de ley descaradamente fascista debería llamarse ley “Desatar a los puercos policías racistas” o “Acta Muéstreme sus papeles”.
Se suponía que la SB 4 iba a entrar en vigor el 5 de marzo, pero el 29 de febrero, un juez del Tribunal Federal de Distrito emitió una orden temporal bloqueándola. El estado de Texas apeló esa orden ante tribunales superiores dominados por fascistas, por lo que aún está por verse qué pasará con esto. (Más sobre esto a continuación).
Estas son algunas de las principales características del SB4:
• El SB 4 es una toma de poder descaradamente inconstitucional e indignante por parte del estado de Texas manejado por los fascistas. Según decisiones de larga data y reafirmadas de la Corte Suprema de Estados Unidos, la Constitución de Estados Unidos le otorga al gobierno federal el control exclusivo de la migración y la frontera. Por ley, los estados no pueden formular sus propias políticas en materia migratoria. El hecho de que Texas lo haga —con este proyecto de ley y otras políticas agresivas a nivel de todo el estado— es parte de sus intentos de consolidar a martillazos una sociedad fascista a la vez que socava el poder de sus rivales de la clase dominante en el gobierno federal.
• El SB 4 instruye y faculta a los policías de Texas a detener a cualquier persona que “sospechen” que quizá haya entrado ilegalmente al estado en los últimos dos años. Esto significa que todos los policías del estado (más de 80.000) podrán pavonearse como la Patrulla Fronteriza federal notoriamente brutal y racista, haciendo cumplir leyes cuyo propósito es oprimir a los inmigrantes, y hacerlo en cualquier parte del estado, no sólo en la región fronteriza.
• Si los policías no están “satisfechos” de que las personas a las que han singularizado tienen un derecho de estar en Estados Unidos bajo la ley, pueden acusarlos de “entrada ilegal” a Texas, un delito menor que conlleva hasta seis meses de cárcel. Si se trata de un segundo “delito” o si la persona ha sido deportada previamente de Estados Unidos, se le puede acusar de “Re-ingreso Ilegal”, un delito grave que conlleva de 10 a 20 años de prisión.
Video en inglés: Coco Das sobre decisiones
Aquí se destacan tres cosas.
Primero, se trata de una intensa escalada de represión contra los inmigrantes. Pone gran énfasis en encerrar a personas durante meses, años o décadas por el “crimen” de huir de sus países de origen dominados por el imperialismo, de torear terribles penurias y peligros para su capacidad básica de sobrevivir. Hará que cada inmigrante, con o sin documentos, se sienta aún más satanizado y perseguido. Y está en concordancia con la “promesa” de Trump de construir enormes campos de concentración para inmigrantes si llega al poder.
Segundo, el SB 4 abre la puerta de par en par a la etiquetación racial de todos los texanos no blancos y/o de todos aquellos que hablan español u otros idiomas “extranjeros”. Especialmente debido a que, en la mente de los ejecutores fascistas, ninguna de “esas personas pertenecen aquí”, aunque hayan nacido en Estados Unidos o inmigraron legalmente. El SB 4 les da a los puercos policías la excusa y la autoridad para hostigar, humillar y detener a las personas prácticamente a su antojo. Ante esto, ¿los “inmigrantes sospechosos” tendrán que portar documentos como papeles de inmigración o certificados de nacimiento cada vez que salgan de sus hogares? ¿Repercutirá en sus comunidades la asquerosa demanda: “Muéstreme sus papeles”, haciéndolas sentirse aún más como territorio ocupado de lo que ya son?
Tercero, el hecho de que Texas haya aprobado y siga luchando por esta ley es una señal de que el “viejo orden” (las “formas habituales” y legales en que funcionó el sistema capitalista-imperialista durante décadas e incluso siglos) se está desgarrando “desde dentro” por parte de sectores rivales de la clase dominante. Y esto también crea oportunidades para que no sólo “se desgarre”, sino que millones de víctimas de este orden derroquen ese orden, y para que se cree un mundo completamente diferente y mejor… ¡no en algún momento lejano, sino en estos tiempos! Por qué esto es cierto y cómo aprovecharlo se desglosa en una poderosa serie de despachos del líder revolucionario Bob Avakian en las redes sociales, aquí.
Como dijimos antes, la legalidad de SB 4 se está disputando ahora en los tribunales, y es probable que la resuelva la Corte Suprema de Estados Unidos, dominada por los fascistas. Así que existe una verdadera posibilidad de que aún se convierta en ley en Texas, y si eso sucede, es muy probable que otros estados gobernados por fascistas aprueben leyes similares.
Pero aunque la Corte Suprema no dicte a su favor, el SB 4 es una clara “declaración de intenciones” de los fascistas de intensificar radicalmente sus ataques racistas contra los inmigrantes y además su impulso para consolidar el fascismo total a nivel nacional.