Marcha en la Ciudad de Nueva York con motivo del DIM [Día Internacional de la Mujer]. Foto: Pachote
8 de abril: Exhibir y vestirse de VERDE en todas partes
9 de abril: ¡Mitin y marcha por todo el país!
Busque una protesta del 9 de abril
¡Emergencia! La Corte Suprema está en camino de destripar el derecho fundamental al aborto de las mujeres para fines de la primavera. Texas ya está bajo una prohibición casi total del aborto con el aval de esa Corte. Envalentonado por esto, cada día este asalto fascista cristiano se vuelve más descarado:
- ¡Idaho acaba de incentivar a las familias de los violadores para que actúen como justicieros contra cualquiera que ayude a conseguir un aborto a una mujer embarazada por violación!
- ¡Misuri está presionando para prohibir los abortos y castigar a cualquiera que ayude a una mujer de Misuri a abortar en otro estado!
Sin embargo, un número demasiado grande de líderes pro derecho a decidir y políticos del Partido Demócrata siguen predicando un “realismo” de aceptar que la Corte vaya a diezmar el derecho al aborto. Nos dicen que nos atrincheremos en la larga lucha del proceso electoral o que nos centremos en ayudar a las mujeres a inducir sus propios abortos.
¡Para nada! Si nos rendimos ahora, este embate inexorable fascista sólo se acelerará.
Negar el derecho al aborto les hace una grotesca violencia física, emocional, social y psíquica a las mujeres al obligarlas a tener hijos en contra de su voluntad. Maternidad obligatoria es esclavización femenina. Negar el derecho al aborto repercute especialmente duro en las mujeres negras y otras mujeres de color y está vinculado a un programa teocrático que también pone en la mira a las personas LGBTQ.
¡Es necesario que opongamos resistencia y llenemos las calles con nuestra furia! Que aumente el número de personas, en ciudades grandes y pequeñas, con la unificación de todos los que se pueda unir y que vuelvan más fuertes en protestas de masas continuas y no violentas. Que cambiemos toda la atmósfera política y hasta qué extremo los odiamujeres —desde la Corte Suprema hasta los legisladores estatales hasta las calles— piensen que pueden salirse con la suya. ¡Que DETENGAMOS este embate!
8 de abril: Sacar el Pañuelo Verde, el símbolo de la cada vez más victoriosa lucha en las calles por el derecho al aborto de la Ola Verde en toda América Latina. Los campus, los eventos culturales, las redes sociales y los lugares de trabajo deben estar inundados de VERDE (pañuelos, pancartas, tiza, pegatinas, etc.). ¡Todo el mundo debe mostrar su posición!
9 de abril: ¡Salir a la calle en protestas masas! Con una determinación seria y una alegría rebelde, despertaremos a decenas y cientos de miles de personas para reconocer la emergencia e inspiraremos a un número creciente de personas a unirse a nosotros.
A partir de ahí, movilizaremos a aún más personas en crecientes protestas no violentas y en la resistencia creativa de la OLA VERDE, con el objetivo de paralizar la sociedad y enérgicamente hacer que se tenga en cuenta nuestra demanda —de que las mujeres no sean obligadas a volver a una situación atrasada— y de que todas las instituciones en la sociedad actúen en consecuencia.
YA es hora de ponernos de pie, juntos, como si nuestra vida dependiera de ello — porque, en efecto, así es.
