
Protesta contra la propuesta de la Junta de Educación de Oklahoma de que los padres de familia que matriculen a sus hijos en escuelas públicas deban presentar prueba de la ciudadanía estadounidense o el estatus migratorio legal de sus hijos, 28 de enero de 2025. Foto: AP
El superintendente fascista cristiano y MAGA [Hacer que Estados Unidos vuelva a tener grandeza] de las escuelas públicas de Oklahoma, Ryan Walters, se topó con 150 o más manifestantes justos cuando visitó la Escuela Primaria Carnegie en un vecindario acomodado de Tulsa el jueves 30 de enero. Los manifestantes, que incluían a padres de familia de estudiantes de la escuela, maestros jubilados y otros, estaban indignados por la medida de Walters, como jefe de la Junta de Educación del estado, de exigir que los padres de familia que matriculen a sus hijos en la escuela presenten prueba de la ciudadanía estadounidense de sus hijos.
Uno de los manifestantes le dijo a un canal de noticias local: “Todos estamos presentes para decir que nuestros hijos no deben ser peones políticos, y todos debemos unirnos contra el fascismo, y eso es lo que esto es en nuestro estado”. Los manifestantes sostenían carteles que decían: “Ningún ser humano es ilegal”; “Si no estás enojado, no estás prestando atención”; “Educación, NO deportación”; “Silencio blanco, violencia blanca”.
Como informó la emisora radiofónica pública KWGS de Tulsa, la norma aprobada por unanimidad por la Junta de Educación de Oklahoma, encabezada por Walters, para requerir una prueba de ciudadanía estadounidense para inscribir a los estudiantes, tenía como objetivo “ayudar a las políticas migratorias del presidente Donald Trump”. Walters dice que la norma no impedirá que los niños sin documentos de ciudadanía estudien en la escuela. Pero obviamente, tener información sobre el estatus migratorio de los niños en los registros significa que la gestapo migratoria de Trump puede acudir en cualquier momento a arrestar a los niños acusados de ser “ilegales”. El propio Walters dijo sobre la cooperación del estado con las redadas de La Migra en las escuelas: “Si un funcionario de las fuerzas del orden acude y solicita información, por ley estamos obligados a dar esa información. Si acuden y nos solicitan cierta información, se la daremos con gusto”.
Los manifestantes en la escuela Carnegie en Tulsa también criticaron las medidas fascistas cristianas de Walters al mandatar que la Biblia esté presente en todas las aulas de Oklahoma y que los maestros incluyan el rol de la Biblia en la enseñanza de la historia estadounidense.
Como dijo el citado manifestante en Carnegie, esto es fascismo. Es muy bueno que los padres de familia, maestros y otras personas en Tulsa se enfrenten a los fascistas que llevan a cabo los ataques terroristas contra inmigrantes y otras personas, y esto necesita ocurrir cada vez más, en todo Estados Unidos, de una manera aún más masiva y decidida.