¿USTED CREE QUE LA VERDAD IMPORTA EN REALIDAD, Y QUE LA INTEGRIDAD INTELECTUAL ES IMPORTANTE — Y RECONOCE QUÉ TANTO PELIGRO CORRE HOY DÍA?
¿ENTIENDE LA URGENTE IMPORTANCIA DE AHORA DE UNIR A TODOS LOS QUE SE PUEDA UNIR CONTRA EL FASCISMO DE TRUMP Y MAGA?
Yo soy una persona que consideraba que sus escritos anteriores se caracterizaban por métodos basados en principios y contenían valiosas reflexiones, en particular al analizar los peligros que representan los fundamentalistas cristianos de derecha, por lo que me consterna especialmente ver que, en su libro Money, Lies, and God Inside the Movement to Destroy American Democracy [Dinero, mentiras y Dios al interior del movimiento para destruir la democracia estadounidense], usted recurre a métodos muy pero muy familiares y llamativamente crudos para atacar a los comunistas revolucionarios que dirijo. Entre otras calumnias irresponsables, nos acusa de ser títeres y mandaderos, conscientes o inconscientes, de la Rusia de Vladimir Putin y su invasión de Ucrania. Además de que usted ni siquiera intentó tener un intercambio con representantes de nuestras posiciones, a fin de obtener una comprensión acertada de lo que dichas posiciones son en realidad, su ataque recurre a los artilugios típicos de la feroz crítica deshonesta: citar fuera de contexto y de otras formas tergiversar las posiciones las que a usted le perturban debido a que cuestionan sus propias convicciones preciadas. ¿Qué ha pasado con el principio fundamental de que, especialmente en materia de asuntos de fondo e importancia, la manifestación de desacuerdos debería basarse en un análisis serio, y en una descripción honesta, de las posiciones de otras personas con las que hay discrepancias? Esto cobra especial importancia ahora, en vista de la necesidad de unir a todos los que se pueda unir en oposición al fascismo de Trump y MAGA — algo que deberían reconocer que tiene una necesaria urgencia todas las personas decentes (incluidas aquellas que sostienen opiniones significativamente diferentes sobre la naturaleza fundamental del sistema que gobierna en Estados Unidos).
Un mero análisis superficial de lo que he dicho y lo que han dicho los revcom (comunistas revolucionarios) deja en claro que nos oponemos firmemente a lo que representan Putin y la invasión rusa de Ucrania. Hemos analizado científicamente que lo que ha ocurrido en Rusia durante el último par de décadas es el surgimiento de un país abiertamente capitalista-imperialista, en reemplazo de la Unión Soviética, que durante varias décadas, desde mediados de los años 1950, había sido un país capitalista-imperialista “disfrazado” — un país socialimperialista: socialista de nombre, pero imperialista de hecho. (También hemos hecho un extenso análisis científico de la manera en que se revirtió el socialismo en China, tras la muerte de Mao en 1976, y de que China, al igual que Rusia, es hoy un país capitalista-imperialista que está contendiendo como tal con el imperialismo capitalista estadounidense. Al mismo tiempo, en referencia a algo que usted parece considerar una afirmación escandalosa, es innegablemente cierto —y algo que también hemos documentado extensamente— que los crímenes cometidos por Estados Unidos, tanto en este país como en todo el mundo, superan con creces los crímenes de otros países capitalista-imperialistas, entre ellos China y Rusia.)
Lo que también es muy importante es que —a diferencia del sector “tradicional” de la clase dominante de Estados Unidos, representado en general por el Partido Demócrata— nuestra oposición al imperialismo ruso no se basa en una indignación sobre el hecho de que Rusia intente desafiar el “orden” imperialista el que Estados Unidos, en particular, ha impuesto con una terrible violencia destructiva desde el fin de la Segunda Guerra Mundial — iniciada con el bombardeo atómico por parte de Estados Unidos contra dos ciudades japonesas en 1945, que causó una masiva devastación y horrorosa muerte y sufrimiento. (Que el régimen fascista de Trump actúe de maneras que amenazan a todo el “orden” internacional de la post Segunda Guerra Mundial, según su propia percepción de la manera de imponer la hegemonía estadounidense —mediante un gansterismo imperialista indisimulado y desbocado— es otra cuestión, pero no cambia el hecho de que este “orden” ha sido de dominación y saqueo imperialista, impuesto mediante una violencia masiva y que ha causado un sufrimiento terrible para las masas de la humanidad).
Nuestra oposición al imperialismo ruso forma parte de nuestra oposición a todo imperialismo, y a todas las fuerzas y relaciones de explotación y opresión de las masas de la humanidad. Y, como parte de eso, reconocemos la responsabilidad especial de oponernos particularmente a “nuestros propios” imperialistas (estadounidenses), los que cometen sus crímenes masivos y monstruosos en nombre de la gente en Estados Unidos y buscan movilizar apoyo para estos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad sobre la base de un grotesco chovinismo pro estadounidense.
Una forma común, y particularmente perversa, de apoyo para el imperialismo del “propio” país de uno es centrar la atención y poner especial énfasis en la oposición a los rivales del imperialismo del “propio” país de uno, en lugar de enfatizar correctamente la oposición precisamente al imperialismo del “propio” país de uno. Esto es aún más flagrante en lo que respecta al imperialismo estadounidense — cuando en realidad ha sido durante algún tiempo el “líder mundial” en monstruosos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. Ahora, como otra expresión extrema de estos crímenes verdaderamente monstruosos, se tiene la limpieza étnica genocida en curso contra el pueblo palestino por parte de Israel, el que desde el principio contaba con el apoyo y armamento masivo por parte de la administración Biden — aunque ahora se está llevando a extremos aún más horrorosos con el respaldo total del régimen fascista de Trump. (Lo que también llama la atención es la manera en que un análisis y desenmascaramiento científico basado en la evidencia respecto a la realidad de los crímenes del capitalismo-imperialismo estadounidense a menudo resultan ¡más perturbadores para los buenos liberales que esta terrible realidad en sí!).
El análisis de todo esto se expone con mucha claridad, y se documenta extensamente en obras mías y de otros en revcom.us — incluidas importantes obras de Raymond Lotta, quien es uno de los objetivos de las calumnias en su libro. Así que, en lugar de entrarle más a fondo a este tema aquí, volveré al reto con el que comencé, y lo haré más concreto y específico. Visite revcom.us y lea con seriedad mi artículo El descarado chovinismo pro estadounidense: “Antiautoritarismo” como “tapadera” para apoyar al imperialismo estadounidense, con una Nota adicional, actualizado el 5 de junio de 2023.
(Como usted verá, una nota a pie de página de ese artículo contiene una referencia a mi discurso de 2017 ¡EL RÉGIMEN DE TRUMP Y PENCE TIENE QUE MARCHARSE! En nombre de la humanidad, nos NEGAMOS a aceptar un Estados Unidos fascista, Un mundo mejor ES posible — el que cita en cierta extensión y toma de su libro The Good News Club, The Christian Right’s Stealth Assault on America’s Children [El Club de las Buenas Noticias, El sigiloso ataque de la derecha cristiana contra los niños de Estados Unidos]. También usted le interesaría saber que llevo varias décadas ya analizando y advirtiendo sobre el peligro del ascenso del fascismo en Estados Unidos, incluso en las más altas esferas del gobierno, con especial énfasis en el papel del fundamentalismo cristiano como fuerza impulsora en este fascismo. También he analizado la manera en que este fascismo ha surgido del suelo mismo de Estados Unidos, desde su fundación hasta la actualidad — en particular el papel de la esclavitud y el genocidio en la historia de Estados Unidos y la forma en que la continuada opresión racial, impuesta mediante una brutal violencia estatal, ha seguido caracterizando y teniendo un papel negativo especial en la sociedad estadounidense y el dominio de la clase capitalista, como parte integral e indispensable de su supuesta “gran democracia”. Suponiendo que usted esté dispuesta a examinar lo que nuestras posiciones son en realidad, también le recomiendo una entrevista reciente en dos partes conmigo, @BobAvakianOfficial, que aborda varias cuestiones importantes, incluida la situación actual y sus agudos desafíos y apuestas, así como la experiencia histórica del comunismo y el nuevo comunismo que he desarrollado. Y, al fin de este artículo, enumero varias otras obras relevantes para los temas en cuestión.
Si, de hecho, a diferencia de los fascistas a los que usted y nosotros nos oponemos firmemente y aborrecemos, usted sí cree que la verdad importa en realidad y que la integridad intelectual es crucialmente importante —en general y especialmente en estos tiempos—, pues, en vista de que usted se ha permitido hacer los ataques sin principios a los que me he referido, le incumbe aceptar el reto que le he ofrecido aquí: de abordar con seriedad y honestidad lo que en realidad los revcom decimos sobre los acontecimientos cruciales en el mundo y las cuestiones fundamentales que enfrenta la humanidad, y luego reconocer abiertamente, y rectificar, las burdas y dañinas tergiversaciones presentes en el ataque de su libro a nuestras posiciones. Como siempre, en torno a esas posiciones y en general, no solo nos mostramos receptivos, sino también con ganas de participar en un intercambio basado en principios y un debate honesto, especialmente sobre cuestiones de importancia fundamental y urgente para la humanidad y su futuro.
Un último punto: Con respecto a quemar la bandera nacional estadounidense, que usted menosprecia como un acto de provocación negativo que causa problemas para los liberales como usted, si uno comprende de manera concreta la naturaleza y el papel de Estados Unidos, a lo largo de su historia y hasta la actualidad (de nuevo, véase las obras a las que me he referido aquí), debería sentir una profunda repulsión ante la noción de “lealtad patriótica a este país” — y debería entender con claridad la quema de la bandera nacional estadounidense como un acto totalmente apropiado. De hecho, este acto es una provocación muy positiva: para usar el lenguaje de su ataque, es muy positivo que haya “quema-banderas orgullosos”. También cabe señalar que el derecho de quemar la bandera nacional estadounidense, como forma de expresión política, se codificó mediante una decisión de la Corte Suprema hace décadas en el caso de Gregory “Joey” Johnson, una persona que apoya el comunismo revolucionario. Esa decisión constituye una victoria no solo para el derecho de quemar la bandera nacional estadounidense, sino, más ampliamente, para el derecho de la expresión política en general, incluida la expresión política que es controvertida y la que desprecian las autoridades gobernantes. Por supuesto, figura muy dentro de las posibilidades de que la actual Corte Suprema dominada por los fascistas desestime tal decisión (tal como ya hizo con el derecho al aborto), pero cualquiera que valore la libertad de expresión debería reconocer la importancia de la victoria obtenida a favor de esa libertad crucial, resultado de la acción de Joey Johnson, aunque uno no está de acuerdo con el acto en sí de quemar la bandera.
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Como contexto adicional, que analiza y documenta más extensamente lo que he mencionado aquí, se tiene la serie Crimen Yanqui, en revcom.us. Los siguientes materiales, que también están disponibles en revcom.us, también son relevantes al respecto: mi artículo La Constitución de los Estados Unidos: Una visión de libertad según los explotadores — Notas adicionales (y una breve introducción); dos escritos de Raymond Lotta, que examinan a fondo la verdadera naturaleza y papel, y las consecuencias, del sistema capitalista-imperialista y su dominación en el mundo, con especial énfasis en el papel del imperialismo estadounidense: El parasitismo imperialista y la recomposición social y de clases en Estados Unidos de los años 1970 al presente: Una exploración de las tendencias y los cambios; y La “industrialización” de la explotación sexual, la globalización imperialista y el descenso al infierno. Y la entrevista con Raymond Lotta, No sabes lo que crees que “sabes” sobre… La revolución comunista y el VERDADERO camino a la emancipación: Su historia y nuestro futuro, también está disponible en revcom.us.
Mis obras escogidas están disponibles en revcom.us. Si le interesa conocer lo que tiene de nuevo el nuevo comunismo que he desarrollado, le recomiendo, entre otros materiales, Breakthroughs (Abriendo Brechas): El avance histórico hecho por Marx, y el nuevo avance histórico del nuevo comunismo, Un resumen básico, y la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, la que he escrito.