El régimen de Trump, incluyendo las fuerzas MAGA que controlan docenas de estados, se apresura temerariamente a imponer a martillazos una sociedad repugnantemente fascista y altamente represiva.

En los ámbitos del arte y la cultura, la educación y la ideología, en las escuelas, universidades, museos y en todas partes, se esfuerzan agresivamente para hacer que el fascismo MAGA y su visión distorsionada de la historia sea el estándar nacional obligatorio.

En el ámbito político, es “sin cuartel”. Empuñan el masivo poder policial y fiscal del gobierno para atacar a sus enemigos dentro de la clase dominante y entre el pueblo, utilizando los pretextos más endebles de “investigar la corrupción” o “parar la delincuencia callejera”. Y se esfuerzan aún más abiertamente para amañar las elecciones.

Todo esto puede y debe servir como una llamada de atención que alerte a la gente sobre la naturaleza verdaderamente existencial e inmediata de la amenaza. Como dice el Llamamiento del 15 de agosto de Rechazar el Fascismo (traducción al español aquí):

El fascismo no es una amenaza que se avecina. Lo tenemos encima pero ya.

La única esperanza para la humanidad es que se pongan de pie millones de las personas decentes de Estados Unidos. No podemos esperar para unas elecciones amañadas en el futuro. Tenemos que expulsar del poder al Régimen Fascista de Trump.

** MAGA persigue a los opositores de Trump en la clase dominante

El viernes 22 de agosto por la mañana, agentes del FBI allanaron la casa de John Bolton, exasesor de seguridad nacional de Trump, alegando que buscaban documentos clasificados que sospechaban que Bolton poseía indebidamente. Se llevaron muchas cajas de documentos que ahora pueden examinarse minuciosamente en busca de algún tipo de prueba de irregularidades. Posteriormente, también allanaron la oficina de Bolton.

Todo esto huele a venganza fascista de Trump contra uno de sus críticos de la clase dominante, y el régimen hace poco esfuerzo por ocultarlo. Hasta el momento, no se ha presentado ninguna prueba real de que Bolton haya infringido ninguna ley. El vicepresidente Vance incluso afirmó que “estamos en las primeras etapas de una investigación en curso”, lo que subraya el carácter vengativo de un allanamiento masivo y muy público.

Y los funcionarios de Trump se han jactado públicamente de su poder sobre Bolton. El jefe del FBI, Kash Patel, tuiteó: “NADIE está por encima de la ley. Agentes del @FBI en una misión”. Su asistente, Dan Bongino, intervino: “No se tolerará la corrupción pública”. Y la fiscal general federal, Pam Bondi, añadió: “La seguridad de Estados Unidos no es negociable. Se buscará justicia. Siempre”. Estos tuits también buscan desprestigiar a Bolton, presentándolo como un criminal y posiblemente como un “traidor” (una amenaza para la “seguridad de Estados Unidos”), ante la opinión pública, a pesar de que Vance ya admitió que saben muy poco (“Estamos en las primeras etapas” de la investigación). Por tanto, también constituye un ataque al principio básico de “inocente hasta que se demuestre lo contrario”, en favor del “principio legal” de Alicia en el País de las Maravillas de “primero la sentencia, luego el juicio”.

Trump afirmó ridículamente no tener nada que ver con el allanamiento, que ni siquiera sabía que iba a ocurrir. Pero no solo lleva años alardeando de “retribución” contra sus enemigos, sino que ha atacado específicamente a Bolton en numerosas ocasiones, llamándolo “un canalla”. Con el estilo mafioso de liderazgo de Trump, eso fue más que suficiente para que sus secuaces comprendieran que debían perseguir a Bolton.

Bolton es él mismo un agente de alto nivel de la clase dominante que desempeñó un papel importante en las invasiones de Afganistán e Irak de 2002, crímenes de guerra que causaron millones de muertes. Y bajo el liderazgo de Trump, Bolton ayudó a dirigir el asesinato de un líder militar iraní (y otras cuatro personas) mientras estaba en Irak, lo cual también constituye un crimen de guerra. Pero, obviamente, esa no es la razón por la que Trump lo persigue, y el historial de Bolton como agente imperialista tampoco hace que este allanamiento sea menos ominoso. De hecho, en cierto sentido, lo hace más ominoso.

Desde que dejó su puesto en el régimen en 2019, Bolton se ha burlado de Trump sin descanso, tildándolo de un tonto manipulado por otros líderes mundiales como Putin, y de ser incapaz de ser presidente. Estas críticas se basaban en gran medida en diferencias reales sobre cómo Estados Unidos podría mantener su dominio mundial, pero también contenían un elemento de desprecio personal. Estas diferencias van más allá de Bolton y refuerzan el significado de esta acción en su contra.

En cualquier caso, una característica distintiva de la forma fascista de gobierno capitalista es que nada de eso es tolerable: ni las diferencias políticas reales, ni la falta de respeto personal, ni la burla; no de las masas, pero tampoco de los rivales en la clase dominante, ni siquiera de  ídolos de la clase dominante. El fascismo, en general, es un sistema basado en la obediencia total, y el líder fascista puede empuñar los instrumentos de violencia y represión del gobierno para aplastar a cualquiera que se desvíe de ella.

Pero lo que está particularmente en juego aquí —lo que hace que “muchísimo esté en juego”— es que Bolton y las fuerzas de la clase dominante a las que está vinculado representan verdaderos obstáculos para la masiva reestructuración MAGA de como el sistema sea gobernado, la cual es un objetivo central del fascismo. En pocas palabras, los fascistas se ven obligados a perseguir a sus rivales para implementar su proyecto.

Y Bolton ciertamente no es el único blanco. El Departamento de “Justicia” de Trump ya había iniciado investigaciones contra otros críticos en la clase dominante más alineados con el Partido Demócrata: el exjefe de la CIA John Brennan, el exjefe del FBI James Comey, entre otros. El régimen también ha solicitado el procesamiento del senador demócrata Adam Schiff, la miembro de la Junta de la Reserva Federal Lisa Cook y la fiscal general de Nueva York Letitia James, todos por “fraude hipotecario”. Antes de ser director del FBI, Kash Patel escribió un libro titulado Government Gangsters [Gánsteres del gobierno] que terminaba enumerando a 60 personas prominentes y luego decía: “Vamos a perseguirlos, ya sea por la vía penal o civil”.

** Los fascistas de Texas avanzan a toda velocidad con amañar las elecciones, encarcelando a una oponente

Anteriormente escribimos sobre la “toma de poder fascista sin precedentes en el estado de Texas”: las maniobras de la mayoría fascista en la legislatura estatal, bajo las órdenes de Trump, para rediseñar los mapas electorales para crear cinco distritos adicionales de mayoría republicana. También escribimos sobre la resistencia de los legisladores demócratas, quienes se enfrentaron a fuertes multas y amenazas de prisión al abandonar el estado para bloquear temporalmente el cambio en los mapas.

La semana pasada, los demócratas regresaron a Texas y el plan fascista de redistribución de distritos se puso en marcha a todo vapor. Tras la primera sesión de la legislatura a la que asistieron los demócratas, la mayoría fascista exigió que cada demócrata firmara un “permiso” para ser “escoltado” por un policía estatal las 24 horas del día, hasta que se aprobara la redistribución de distritos. Cuando se les dijo que si no lo firmaran, no se les permitiría salir del Capitolio, la mayoría se sometió a esta condición intencionalmente humillante y lo firmó.

Solo uno de los demócratas no lo hizo. La representante Nicole Collier, una mujer negra, declaró: “Me niego a firmar para renunciar a mi dignidad… No voy a aceptar en silencio su intimidación o discriminación”.

Los fascistas cumplieron. A Collier le impidieron salir del Capitolio durante dos días, y finalmente la liberaron después de que los republicanos aprobaran su proyecto de ley de redistribución de distritos.

La postura solitaria de Collier inspiró a multitudes de manifestantes a acudir al edificio en su apoyo, y cuatro de ellos fueron arrestados al negarse a obedecer las órdenes policiales de marcharse. Varios otros demócratas rompieron públicamente sus “permisos” y algunos se unieron a Collier en el piso de la legislatura durante la noche. Una de las mujeres arrestadas publicó en Instagram: “Estamos mirando directamente a la cara del fascismo y no podemos retroceder”.

La batalla en Texas también impulsó las acciones de unos principales demócratas en California para “contrarrestar” a Texas con su propia redistribución de distritos, que creen que añadirá cinco escaños demócratas, así “neutralizando”, en teoría (suponiendo que puedan lograrlo), el fraude electoral en Texas.

Lo que revelan las maniobras fascistas de los republicanos de Texas (de nuevo, instigadas por Trump) es que no van a ceder el poder mediante el “funcionamiento normal” del sistema. Es una lucha “sin cuartel” en el mundo MAGA. No lo apuestan todo a la redistribución de distritos. Ya se barajan planes para saturar las zonas demócratas con matones de ICE y la Guardia Nacional el día de las elecciones como una forma de disminuir el voto demócrata.

Y si, por alguna razón, aun así pierden las elecciones, ¿de verdad crees que aceptarán pacíficamente el resultado y se irán a casa?

** El secretario de Adoctrinamiento de Oklahoma evalúa a nuevos maestros en función de los valores MAGA

El Departamento de Educación del estado de Oklahoma está implementando un nuevo examen de certificación para maestros provenientes de Nueva York y California¹. El superintendente Ryan Walters dice que su objetivo es evitar que los nuevos maestros “adoctrinen” a los muchachos con una “ideología woke” e ideas que son “antitéticas a los valores políticos conservadores del estado”. Pero en realidad, es Walters él que quiere que los maestros adoctrinen a los estudiantes en la locura de MAGA. El propio Walters le dijo a USA TODAY que el examen es una certificación de “América Ante Todo”, en referencia a una consigna central de MAGA.

¿Qué quiere decir esto? Bueno, para empezar, Oklahoma modificó recientemente su currículo para obligar a enseñar la mentira infundada de que el Partido Demócrata le robó las elecciones presidenciales de 2020 a Trump. Esto es una forma de locura, totalmente desconectada de la realidad, y sirvió para impulsar y justificar el sangriento intento de golpe de estado del 6 de enero de 2021. Ahora es “lectura obligatoria” para los jóvenes de Oklahoma.

La educación “América Ante Todo” también implica encubrir y/o “embellecer” la verdadera historia de Estados Unidos: su fundación mediante el genocidio de los pueblos indígenas, la esclavitud de millones de africanos y la conquista y el robo del suroeste estadounidense a México. Estos hechos, que formaron la base histórica de la riqueza y el poder actuales de Estados Unidos, se niegan o se tratan como un “detalle” histórico insignificante que no tiene nada que ver con el presente… lo cual también es una forma de negar la brutal opresión que continúa bajo nuevas formas. O como lo expresó el director de PragerU (que colabora con Oklahoma para la remodelación de las escuelas): “Es el enfoque de larga data de: no vamos a criar niños enojados. No enseñamos ingratitud. Creemos que tienes suerte de ser estadounidense”. (Para más información sobre esto, consulte la sección sobre PragerU más abajo).

Además, la promoción de los “valores de Oklahoma” por parte de Walters también implica impulsar el cristianismo fundamentalista en las aulas, en un desafío directo y radical a la Constitución de Estados Unidos². El año pasado, emitió un memorando que establecía que “todos los docentes y todas las aulas del estado tendrán una Biblia en el aula. Y enseñarán en base a la Biblia en el aula”. Los Diez Mandamientos de la Biblia también se incorporaron al nuevo currículo.

Ambas medidas se encuentran actualmente en litigio en los tribunales y en la legislatura estatal, y no han entrado en vigor en su totalidad. La financiación para el proyecto de “La Biblia en cada aula” fue rechazada en la legislatura, pero muchas escuelas están utilizando Biblias donadas. Además, se ha presentado un nuevo proyecto de ley para exhibir los Diez Mandamientos, bajo la “lógica” de que “Los Diez Mandamientos son uno de nuestros documentos fundacionales”. (¡No lo es!) El patrocinador del proyecto de ley cree que los recientes fallos de la Corte Suprema de Estados Unidos que socavan la separación entre la Iglesia y el Estado han creado una mejor base para que su proyecto de ley tenga éxito.

PragerU y la dimensión nacional

Lo que ocurre en Oklahoma no es un caso aislado, sino más bien un programa piloto para docenas de estados de Estados Unidos dominados por MAGA.

Esta prueba fue desarrollada por PragerU (fundada por David Prager). PragerU no es una universidad; es una fuente nacional para difundir MAGA y la ideología fascista cristiana, mediante videos cortos narrados por influencers pro-MAGA. El canal de YouTube PragerU for Kids (PragerU para niños) incluye un video que muestra una caricatura de Cristóbal Colón que dice “la esclavitud es tan antigua como el tiempo” y “ser un esclavo era mejor que ser asesinado”. Otro describe a George Floyd como un “hombre negro que se resistió al arresto”. 

Ya hay al menos nueve estados que tienen acuerdos para trabajar con PragerU (incluidos Luisiana, Nueva Hampshire, Montana, Arizona, Oklahoma, Florida, Texas, Idaho y Alaska). De modo que lo que está sucediendo en Oklahoma no es sólo una tragedia en lugares atrasados, es la forma de lo que está por venir si estos fascistas no son expulsados ​​del poder.

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¡Hay que DETENER a este coloso implacable a través del levantamiento histórico, no violento pero decidido, de millones de personas en Washington D.C., que comenzará el 5 de noviembre (el primer aniversario de la elección de Trump), con el objetivo de expulsar del poder al régimen fascista de Trump!