Recientemente, al menos dos inmigrantes más murieron en la parte tejana de la frontera entre Estados Unidos y México. Un hombre quedó enredado y su cuerpo desgarrado en la barricada flotante de alambre de navajas colocada en medio del río que separa México y Texas. ¿Cómo llegaron allí estas navajas? Fueron puestos allí como parte de la “Operación Estrella Solitaria”, bajo las órdenes de Greg Abbott, el gobernador fascista cristiano de Texas. Y estaban destinados a mutilar, herir y asesinar personas. Las autoridades mexicanas también encontraron el cuerpo de otro hombre a la deriva en el río.

Como hemos escrito antes, Cualesquiera que sean las circunstancias exactas de la muerte de estos dos hombres, el sádico fascista cristiano Abbott está empapado en su sangre. Esto eleva el total de muertes por estas trampas mortales a por lo menos seis, incluido un bebé. (Ver el artículo de Revolución “La política fronteriza texana oficial: Tortura y asesinato, un espectro de lo que está por venir… a menos que hagamos una revolución” para más información sobre la Operación Estrella Solitaria).

La administración de Biden ha demandado a Texas para que elimine las barricadas de navajas, y Abbot básicamente le dijo a Biden que se fuera a la mierda. Las trampas mortales de acero seguramente permanecerán en su lugar durante al menos otro mes. (Y en caso de que no lo supiera, Biden ha expulsado a más inmigrantes a lo largo de la frontera que todos sus predecesores. Ha desarrollado y ampliado incansablemente la militarización de la frontera, mientras llama a su enfoque “justo, ordenado y humano“).

Estas son las “alternativas” que el imperialismo ofrece para su “problema migratorio”, en pocas palabras. La sed de sangre abiertamente brutal y la crueldad sin fondo de los republicanos fascistas, o el enfoque a menudo oculto y salpicado de lenguaje como “compasión” y “humano”, pero igualmente sanguinario, de Biden y los demócratas.

Los fascistas intensifican la represión fronteriza, desafían a Biden y a los demócratas

Todas las muertes ocurrieron cerca de las “ciudades gemelas” de Eagle Pass, Texas, y Piedras Negras, Coahuila, México. Durante las últimas semanas, el área alrededor de Eagle Pass ha sido la “zona cero” de Estrella Solitaria. El “Departamento de Seguridad Pública” de Texas (DPS por sus siglas en inglés) ha ocupado un parque público en Eagle Pass y lo ha convertido en lo que el Houston Chronicle describe como “una zona militarizada con contenedores de transporte y alambre de navajas a lo largo de las orillas del Río Grande... Es la única propiedad pública en el estado donde las tropas pueden arrestar a los migrantes, y han acusado de entrada ilegal a más de 500 migrantes solo en el último mes”.

Recientemente, el DPS comenzó a implementar una forma de separación de familias en Eagle Pass. El Chronicle reportó que el DPS “rompió al menos dos docenas de familias al detener a los padres por cargos de entrada ilegal, mientras que a los otros miembros, incluidos a los niños pequeños, los entrega a los agentes de la Patrulla Fronteriza, según los cónyuges y abogados que representan a esos inmigrantes”. Esto constituye una violación de la propia política escrita de Texas sobre familias encontradas por el DPS. También es un regreso al infame y ampliamente odiado programa de separación familiar del régimen de Trump y Pence. Burla abiertamente la política federal actual.

También la semana pasada, los gobernadores republicanos fascistas de 13 estados anunciaron que enviarán 1305 tropas de la Guardia Nacional y 301 “personal de la ley y el orden” a Texas para formar parte de Estrella Solitaria. Su declaración dice: “Cada estado es un estado fronterizo y los gobernadores republicanos, juntos, están dando un paso al frente para proteger a los estadounidenses donde Biden ha fallado”.

Todo esto es una seria escalada del desafío republicano-fascista a la autoridad federal, siempre y cuando esa autoridad sea ejercida por demócratas como Biden. Abbott y los otros gobernadores republicanos fascistas se burlan de Biden y del gobierno federal, y desafían a Biden a hacer algo para evitar que implementen su propia “política fronteriza”. No importa lo que hagan los demócratas en la frontera o cualquier otra cosa, estos fascistas los consideran ilegítimos. Los fascistas se están preparando para una guerra civil, si no pueden tomar el poder “pacíficamente”.

Un conflicto que llega a un punto crítico

Cómo reprimir y mantener alejados a millones de inmigrantes es parte de un conjunto más amplio de conflictos entre y dentro de la clase dominante que están haciendo añicos las “normas” según las cuales ha funcionado este sistema. Es una expresión aguda de cómo “la clase dominante tenga cada vez menos capacidad de gobernar según la anterior manera de hacerlo” como Bob Avakian lo escribió. BA también escribió:

No es posible resolver estas divisiones entre los poderes gobernantes, y en la sociedad más amplia, en el marco que ha existido, y que ha mantenido la articulación de las cosas, durante casi 150 años, desde poco después del fin de la Guerra Civil de Estados Unidos que condujo a la abolición de la esclavitud — no es posible resolverlas sobre la base de la “democracia” capitalista que ha sido la forma “normal” de gobierno capitalista (dictadura) durante tanto tiempo.

Algo radicalmente diferente va a reemplazar el marco que ha existido durante todo este tiempo, y como “Una Declaración, un llamamiento a que se organice ahora para una revolución real“ de los revcom señala incisivamente:

sólo es posible resolver la crisis y las profundas divisiones de la sociedad con medios radicales, de un tipo u otro — ya sea medios radicalmente reaccionarios, mortíferamente opresivos y destructivos o medios revolucionarios radicalmente emancipadores

Tanto los demócratas como los republi-fascistas representan y defienden el mismo sistema. Difieren marcadamente sobre cuán abiertamente violenta y racista debería ser la represión que llueven sobre los migrantes, pero ambos están de acuerdo en que la represión debe intensificarse. Su solución al “problema de la inmigración” creado por su sistema es: más muros y látigos; más centros de detención y deportaciones; más alambre de navajas y más cuerpos flotando en el Río Grande/Río Bravo.

Nosotros, los revcom, estamos decididos a sacar de este choque un futuro fundamentalmente diferente y emancipador de la única manera posible: a través de una revolución real. Como lo declara NECESITAMOS Y EXIGIMOS: UNA FORMA COMPLETAMENTE NUEVA DE VIVIR, UN SISTEMA FUNDAMENTALMENTE DIFERENTE : esta revolución, como uno de sus principios básicos, estaría decidida a hacer esto:

Eliminar la discriminación, la desigualdad y la opresión en todas sus formas

En la nueva sociedad socialista, la eliminación de todas las divisiones opresivas que caracterizaron a la vieja sociedad —incluida la opresión por motivos de nacionalidad y raza, sexo y género— será una meta fundamental y de la más alta prioridad. Se dedicarán atención y recursos especiales a superar el terrible legado de la esclavitud y el genocidio, y la continua discriminación y degradación brutal, a las que han estado sometidos los negros, indígenas, latinos y otras personas de color a lo largo de la historia de Estados Unidos. Los inmigrantes, desde todas partes del mundo, que tengan un deseo sincero de contribuir a las metas de la nueva república socialista serán bienvenidos en esta república. Los derechos de las personas LGBT y de las mujeres, incluidos los derechos fundamentales al aborto y al control de la natalidad, están garantizados en la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte y el gobierno de esa nueva república socialista los protegerá y hará cumplir. Como se enfatiza en esta Constitución, la opresión de las mujeres surgió junto con las relaciones entre los seres humanos basadas en la explotación, y durante miles de años se ha entretejido con esas relaciones, y esta es una característica que define al Estados Unidos capitalista-imperialista. Abolir y arrancar de raíz todo esto será uno de los objetivos más importantes de la nueva sociedad revolucionaria basada en la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte.