
Los mortíferos incendios forestales de Maui fueron tan intensos que ha sido difícil identificar los cadáveres. Foto: AP
La destrucción de vidas y el sufrimiento de la población en los mortíferos incendios forestales de la ciudad de Lahaina en la isla de Maui en Hawai`i continúan, aunque los incendios han cesado en gran medida. Al 19 de agosto, las autoridades anunciaron que se había confirmado la muerte de más de 110 personas en los incendios, pero 1.300 seguían desaparecidas; no está claro cuántos de estos desaparecidos tal vez hayan muerto. De las personas cuyos restos se habían descubierto entre las ruinas, sólo se había identificado cinco porque los incendios fueron tan intensos y calientes que resultó difícil identificar los cadáveres. Se calcula que en Lahaina fueron incendiados o destruidos unos 2.200 edificios. Edificios históricos fueron reducidos a cenizas, y el Centro Cultural y de Investigación Nā ‘Aikāne o Maui quedó destruido y la mayor parte de su colección se ha perdido para siempre.
La gente de Maui, de Hawai`i y de todo el mundo está de luto y llena de ira, como revcom.us ha señalado en su cobertura: una carta de un lector la semana pasada y el artículo acompañante, A las personas que viven en Hawai`i y a aquellas que lo aman: NECESITAMOS UNA FORMA COMPLETAMENTE NUEVA DE VIVIR.
El nuevo informe del IPCC de la ONU sobre el cambio climático: Una imagen más precisa y alarmante del peligro que enfrenta nuestro planeta (vídeo en inglés)
Ha habido una enorme efusión de apoyo para las víctimas del incendio por parte de las masas de personas de Maui, de todo Hawai`i y de más allá de las islas. La gente ha aportado todo tipo de ayuda: comida, ropa, pañales y mucho más. Gente de todas las islas se ha ofrecido de voluntarios para ayudar en Maui en los próximos meses, muchos han tomado licencia de sus trabajos y se han ofrecido a trabajar en esto a largo plazo. Los restaurantes han suspendido sus operaciones normales a fin de preparar comida para los necesitados. La gente ha organizado convoyes de camiones con suministros. Los habitantes de la zona de Lahaina y alrededores han establecido “Costcos Kanaka” (Kanaka quiere decir hawaiano nativo) para distribuir gratuitamente mantas, alimentos, etc. donados a las personas necesitadas.
Pero el gobierno, a todos los niveles, ha fracasado en gran medida a la hora de satisfacer las necesidades urgentes de las personas desplazadas y, en muchos casos, conmocionadas por la pérdida de familiares, amigos, hogares y sustento. La CNN le entrevistó a una mujer de Lahaina que tenía a más de 20 personas de su familia alojadas en su casa tras los incendios. Calificó de “bofetada en la cara” la oferta del gobierno de Estados Unidos de 700 dólares a cada persona afectada por el incendio, muy por debajo de lo que se necesita. Para colmo, muchos de los que tienen necesidades urgentes no pueden superar los trámites burocráticos para obtener los fondos.
Las noticias de todo tipo están llenas de artículos sobre los incendios y el sufrimiento de la gente. Se analizan las causas, su relación con el cambio climático, la falta total de avisos del gobierno a la población, el tratamiento médico de los quemados gravemente, etcétera, etcétera.
Pero hay una cosa que falta en estos muchos artículos: que es el sistema del capitalismo-imperialismo el que es la causa subyacente de las condiciones que condujeron a estos incendios.

Lejos de las ciudadelas, pero completamente integrado en el sistema capitalista-imperialista
Hawai`i es un grupo de islas tropicales extremadamente alejadas de las grandes masas terrestres del planeta. Hawai`i cuenta con extraordinarias selvas tropicales, volcanes y mares repletos de todo tipo de vida, incluidos arrecifes de coral. Sin embargo, estas islas están completamente integradas en el sistema capitalista-imperialista mundial y en todas sus horribles consecuencias. Este sistema preparó el terreno para los incendios.
Como revcom.us ha escrito aquí y aquí, y como se explica en este vídeo de El Show RNL — ¡Revolución, y Nada Menos!, las exigencias de este sistema han impulsado y siguen impulsando el uso de combustibles fósiles a una escala monstruosa. La quema de estos combustibles ha calentado el planeta entero, incluido Hawai`i. La temperatura media del aire en Hawai`i es hoy casi dos grados F más alta (1.1 grados C) que en 1950. Ha habido una sequía en los alrededores de Lahaina (así como en otros lugares de Hawai`i) que también se debe, al menos en parte, al cambio climático. Los incendios de Maui se propagaron tan rápidamente debido en parte a los vientos extremadamente fuertes de un huracán a cientos de kilómetros de distancia; el cambio climático ha intensificado los huracanes y, en concreto, ha hecho que sean más intensos los vientos en los bordes exteriores de los huracanes (como los vientos de 70 millas [113 kilómetros] por hora que avivaron el incendio de Lahaina).
Estos incendios fueron un ejemplo de un nuevo tipo de incendio: incendios que comienzan en los bosques o en el campo y de ahí, debido a diferentes condiciones como los vientos y la sequedad, se vuelven extremadamente calientes y arrasan las zonas urbanas, destruyendo vidas y edificios. El incendio de Lahaina era tan caliente que derritió las tuberías de agua, lo que dificultó aún más su contención.
El cambio climático está al centro de lo que causó los incendios, y el capitalismo está al centro del cambio climático.
El capitalismo-imperialismo, la causa raíz del cambio climático
No es posible presionar o cambiar al capitalismo-imperialismo para que opere de una manera que tome en cuenta la naturaleza y el medio ambiente. Este sistema tiene una lógica y unas reglas las que no es posible dejar de lado o ignorar, o de otra manera el propio funcionamiento del sistema en sí se descompondría.
Debido a su carácter de funcionar con propiedad y control privados, y como producto de la competencia a vida o muerte entre diferentes capitales, no es posible coordinar la producción de manera consciente al nivel de toda la sociedad. No se puede hacer planes a largo plazo para tomar en cuenta los impactos ecológicos.
Bajo el capitalismo, la naturaleza misma y sus productos se convierten en algo para vender y comprar, o en algo que se da por sentado y que se puede explotar. Para el capitalismo, los tigres o los orangutanes (o el aire y el agua) son simplemente “externalidades”. Eso quiere decir que no se contabilizan los daños al medio ambiente y la limitada cantidad de recursos — estas cosas son “externas” a los libros de contabilidad del capitalismo, y no determinan lo que el sistema hace en su batalla competitiva de “comer o ser comido”. Aunque el desarrollo capitalista destruye las propias cosas que necesita —el aire, el agua, el clima, etc.—, no puede hacer otra cosa mientras exista el capitalismo.
Por eso es que no es posible cambiar este sistema por medio de cambios de políticas que dejan intacto al sistema. Únicamente una revolución que derroque este sistema y abra la posibilidad de tener un sistema radicalmente diferente y mucho mejor, realmente podría efectuar los cambios del tipo que se necesitan.
De “Según los científicos, un millón de especies corren el peligro de extinguirse, el capitalismo-imperialismo está estrangulando la vida en el planeta”
La larga y amarga historia de la conquista y dominación imperialista de las islas
El cambio climático no es la única manera en que el capitalismo-imperialismo sentó las bases para estos incendios extremadamente intensos y destructivos. Otro factor importante en estos incendios es la larga y amarga historia del capitalismo-imperialismo de conquistar, dominar y explotar las islas y de destruir el modo de vida del pueblo nativo que vivía ahí. La Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, de la autoría de Bob Avakian, dice:
El imperialismo estadounidense en expansión también arrebató Hawai`i al pueblo indígena ahí mediante la fuerza así como el engaño. Durante más de cien años de dominación, los Estados Unidos de América integraron a Hawai`i en su estado imperialista a la vez que lo mantuvieron como una importante zona de bases militares, reprimiendo continuamente al pueblo indígena y degradando elementos de su cultura, y la belleza y maravillas naturales de Hawai`i, convirtiéndolas en mercancías capitalistas.
Aquí van algunas maneras en que esta historia se relaciona con los recientes incendios de Maui:
- En la isla de Maui (y en otras islas), las selvas que antaño sustentaban todo un ecosistema tropical, con arroyos de agua para la gente que vivía ahí, fueron talados y la madera fue embarcada a todo el mundo para que los capitalistas del siglo 19 obtuvieran ganancias.
- En lugar de las selvas, las empresas capitalistas establecieron plantaciones de azúcar y piña que explotaban mano de obra importada desde Japón, China, la Filipinas, etc. Los propietarios de las plantaciones capitalistas obligaron a la gente a trabajar bajo condiciones de esclavitud. La propia producción requería cantidades masivas de agua, por lo que los arroyos de los que dependían los nativos hawaianos fueron expropiados y el agua fue desviada para las plantaciones.
- Cuando las plantaciones dejaron de ser rentables según el cálculo mundial del capital imperialista, fueron abandonadas y la maleza se apoderó de las tierras. Los pastos invasivos altamente inflamables se apoderaron de las tierras y estos pastos, marchitos debido al calor y la sequía del cambio climático, propagaron el incendio con los fuertes vientos.
¿Por qué abandonaron las plantaciones? Porque era más rentable cultivar azúcar en otro lugar. Y ¿por qué se dejaron en barbecho las tierras agrícolas cuando Hawai`i tiene que importar una gran parte de sus alimentos? Porque era más rentable impulsar la economía turística y construir hoteles de lujo y campos de golf. Y tras el reciente incendio, los buitres capitalistas están al acecho, buscando la forma de comprar o robarse tierras a personas que sufren severas presiones y dificultades.
- Y justo al centro de todo el proceso del sistema de capitalismo-imperialismo que dominaba a Hawai`i estaba la dominación de las islas por las fuerzas armadas estadounidenses. El emergente imperio capitalista-imperialista estadounidense conquistó a Hawai`i. Los invasores estadounidenses suprimieron y casi aniquilaron a su población nativa. Los imperialistas lo convirtieron en una gigantesca base militar, la que consideran crucial para mantener la dominación estadounidense sobre el océano Pacífico y gran parte del planeta.
- Tan sólo un ejemplo del impacto ambiental de las fuerzas armadas estadounidenses: según la tradición hawaiana, Maui solía ser más verde. Las selvas y la vegetación de una isla más pequeña frente a Maui, Kahoʻolawe, atrapaban la humedad y producían lluvias por la tarde que impedían que la zona fuera tan susceptible a la sequía. Pero después de que las empresas ganaderas capitalistas despojaran a Kahoʻolawe de gran parte de su vegetación, fue utilizada durante 50 años para prácticas de tiro por los enormes cañones de la Marina estadounidense, que aniquilaron casi todo el resto de sus plantas y destruyeron su suelo. La Marina limpió algunos de sus proyectiles, pero ha dejado claro que no va a terminar la tarea, y actualmente hay proyectiles sin explotar por todo Kahoʻolawe.
El imperialismo estadounidense, con sus operaciones económicas esenciales, su impacto global sobre el clima, y sus fuerzas armadas, ha causado un daño increíble a Hawai`i, así como al mundo entero. Hemos esbozado tan sólo algunas de las maneras centrales en que este sistema sentó las bases para estos terribles incendios, y creó las condiciones que hicieron que los incendios estuvieran extraordinariamente calientes. En un sentido fundamental, esto está ocurriendo en toda la Tierra, y vivimos en un nuevo mundo de clima transformado en el que las catástrofes como ésta solo van a empeorarse — hasta que este sistema deje de dominar el planeta.
De NECESITAMOS Y EXIGIMOS: UNA FORMA DE VIVIR COMPLETAMENTE NUEVA, UN SISTEMA FUNDAMENTALMENTE DIFERENTE, una declaración emitida por los revcom:
Por todo eso existe una necesidad urgente, y nos atrevemos a exigir con audacia —y llamamos a todos aquellos que odien la injusticia y anhelen una sociedad y mundo en que las personas pueden florecer a plenitud y expresarse con mayor plenitud su humanidad, a sumarse en hacer esto una exigencia de millones y decenas de millones de personas— una exigencia que por fin se puede hacer realidad por medio de la lucha decidida e intrépida de esos millones y decenas de millones de personas:
Es necesario abolir y desmantelar el sistema capitalista-imperialista y las instituciones de gobierno existentes en Estados Unidos — y reemplazarlos por un nuevo sistema socialista basado en la CONSTITUCIÓN PARA LA NUEVA REPÚBLICA SOCIALISTA EN AMÉRICA DEL NORTE.