El 24 de febrero se cumplirá un año desde que Rusia invadió ilegalmente a Ucrania, un país vecino. Casi inmediatamente después de la invasión, Estados Unidos y sus aliados de la OTAN (Alianza del Tratado del Atlántico Norte) ampliaron y elevaron considerablemente la letalidad de las cantidades masivas de equipo militar que ya habían estado enviando a Ucrania. (En este momento, las fuerzas de Estados Unidos-la OTAN han proporcionado o prometido al ejército ucraniano equipo militar por valor de más de 50.000 millones de dólares1, y les han proporcionado un amplio “asesoramiento” de inteligencia y planificación estratégica de alto nivel). Los combates en Ucrania se convirtieron rápidamente en una guerra de sustitutos entre potencias imperialistas rivales: Rusia, por un lado, y Estados Unidos y la OTAN, por el otro.
Esta guerra es un molino de carne el que se está alimentando con seres humanos. Decenas y quizás cientos de miles de personas han muerto, la guerra ha convertido a muchas más en refugiados y aún más han sido lesionadas, violadas, se han quedado sin hogar y han sido traumatizadas de otras maneras. Y por todo ello, el peligro de una guerra nuclear ha aumentado.
Escalamiento peligroso en la guerra en Ucrania — una conversación entre Andy Zee y Lenny Wolff
De El Show RNL — ¡Revolucion, y Nada Menos! (vídeo en inglés)
Importante y peligroso escalamiento a la vista
Durante varios meses a fines de 2022, la guerra estuvo trabada en un amargo estancamiento pulverizador, en el que ninguno de los dos bandos podía ganar ventaja. Pero ambos bandos han estado preparando grandes ofensivas para romper ese estancamiento. Los informes indican que Rusia está enviando cientos de miles de tropas adicionales al este de Ucrania, y que una ofensiva rusa es “inminente”. Ya se han iniciado grandes batallas en el este de Ucrania.
Ucrania ha estado recibiendo renovadas y más grandes inyecciones de tanques modernos y otro armamento de Estados Unidos y la OTAN, y ha estado preparándolos para el combate. Muchos de los soldados y oficiales ucranianos están recibiendo entrenamiento estratégico intensivo en Estados Unidos, Inglaterra y Alemania, donde están aprendiendo técnicas de recopilación y comunicación de información sobre objetivos, inteligencia, apoyo logístico y guerra de armas combinadas.
La semana pasada, altos mandos militares y políticos de Estados Unidos y otros países de la OTAN se reunieron con dirigentes ucranianos y prometieron aún más “armamento pesado y entrenamiento militar” para “inclinar la balanza de la guerra” esta primavera. La planificación de ofensivas por parte de los dirigentes de Estados Unidos y la OTAN depende de una gran apuesta: que una Ucrania apoyada por Estados Unidos y la OTAN pueda “ganar la guerra” sin impeler a Rusia a responder a su derrota con armas nucleares, lo que a su vez obligaría a Estados Unidos-la OTAN a utilizar sus armas nucleares contra Rusia.
Piensen en la lógica descabelladamente fría que hay detrás de estas “razones” para la matanza en masa. Estas monstruosas creaciones del imperialismo están dispuestas a “apostar” (¡con la vida de decenas de millones de personas!) que los escalamientos a los que están llamando no entren en el terreno de la “destrucción mutua”.
Como dijo hace poco Bob Avakian en sus entrevistas en El Show RNL — ¡Revolución, y Nada Menos!:
Ya no podemos darnos el lujo de permitir que estos imperialistas dominen al mundo y determinen el destino de la humanidad. Hay que derrocarlos cuanto antes.
— Bob Avakian, Las Entrevistas con Bob Avakian
PUNTOS BÁSICOS
Esta guerra es un enfrentamiento imperialista, NO “los buenos contra los malos”
Ucrania no es un campo de batalla entre democracia y autocracia, es una zona de conflicto de rivalidad imperialista entre el imperialismo ruso y el imperialismo estadounidense y occidental. Ambos imperialismos se rigen por la lógica fundamental del capitalismo: expandirse o morir. Ambos imperialismos combaten por imponer su voluntad al otro y por promover los intereses de su propio imperio a expensas del otro, a un costo de decenas de miles de vidas, con la amenaza inminente de aplastar e incinerar a millones más. (Vea más análisis e historia de esta situación, incluidos varios artículos críticos de Bob Avakian [BA], en La guerra en Ucrania: Una página de recursos).
Ninguno de los bandos puede darse el lujo de retroceder
Rusia está decidida a consolidar y ampliar su control sobre las partes meridional y oriental de Ucrania que Vladimir Putin, presidente de Rusia, y los dirigentes rusos en general consideran legítimamente suyas. Ucrania —una vez más, con el respaldo de los imperialistas de Estados Unidos y la OTAN y en este momento al servirles de sustituto— está decidida a impedirlo y a recuperar todos esos territorios de Rusia. Ninguno de los bandos cree que pueda darse el lujo de perder. Ambos bandos están armados hasta los dientes. Como escribió Bob Avakian en su artículo “Una tercera guerra mundial e idioteces peligrosas”, si cualquiera de los dos bandos se enfrenta a una derrota estratégica, o si la situación arrastra a Estados Unidos-la OTAN a combates abiertos con Rusia, “... las ‘dinámicas’ de una guerra directa entre Estados Unidos-la OTAN y Rusia muy probablemente conducirían a un proceso de intensificación continua, en que ninguno de los bandos esté dispuesto a retroceder —ni realmente sea capaz de retroceder— ante la perspectiva de algún tipo de derrota en esta guerra”.
La amenaza de una guerra nuclear —de una tercera guerra mundial— es real, aumentan las probabilidades cada día que pase
En octubre comentamos en Revolución: “La guerra en Ucrania ha escalado a una nueva y peligrosa fase. El peligro de un intercambio nuclear es más grande y lo han expresado más explícitamente que nunca los líderes políticos de ambos bandos de la guerra”. Desde ese entonces, este conflicto se ha vuelto significativamente más peligroso. Eso es la razón principal por la que hace poco, el Boletín de Científicos Atómicos puso su “Reloj del Juicio Final” lo más cerca de la medianoche que haya estado nunca (medianoche significa catástrofe global), y dijo que la humanidad y el planeta están en un “momento de peligro sin precedentes”. Los líderes tanto de Estados Unidos como de Rusia han hablado abiertamente de la posibilidad de utilizar armas nucleares. El uso de armas nucleares por cualquiera de los dos bandos, por la razón que sea, sería un monstruoso crimen de guerra. Infligiría un sufrimiento horrible a millones de personas en Ucrania, Rusia, probablemente los países vecinos, y posiblemente amenazaría la vida en todo el planeta.
El Partido Republicano es fascista; el Partido Demócrata también es una máquina de masivos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad
Los demócratas no son el “partido de la paz”: todo su historial está plagado de sangrientos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. Han demostrado una y otra vez que no vacilarán a la hora de matar a millones de personas al servicio de los intereses del imperio estadounidense. Los demócratas son el partido de las bombas nucleares lanzadas sobre ciudades densamente pobladas... el partido de la gasolina gelatinosa incendiaria (napalm) que quema hasta los huesos lanzada sobre niños... el partido de los ataques con aviones no tripulados sobre fiestas de bodas. Y ahora, bajo el liderazgo del Partido Demócrata, Estados Unidos está llevando al mundo al borde del precipicio de una guerra nuclear. Desde hace mucho tiempo ya es hora de que la gente deje de ser la cola del burro demócrata. Los republicanos y los demócratas son máquinas de masivos crímenes de guerra cometidos para mantener un imperio construido sobre la explotación implacable de miles de millones de personas en todo el mundo,2,3.
Hace falta cambiar esta dinámica general de manera urgente y radical, al servicio de los intereses de la humanidad, no de los imperialistas rivales y contendientes.
¡No podemos sentarnos a un lado de manera pasiva y esperar que ocurra lo mejor! Hace falta desafiar a todos con la verdad, y hace falta que todos piensen a fondo sobre la verdad, de las siguientes palabras de Bob Avakian, BA:
Todo esto pone de relieve por qué es vitalmente importante que las masas de personas, en Estados Unidos, y en otros países que se alinean con él, así como en Rusia —que las masas de personas en todas partes— se despierten ya por fin y completamente, que reconozcan la realidad y la profunda importancia de lo que está en juego, y que actúen de acuerdo con nuestros verdaderos intereses — los intereses de toda la humanidad: exigiendo que SE PONGA FIN a esta guerra en Ucrania, y a la injerencia (directa e indirecta) de los imperialistas de ambos lados en esta guerra, antes de que no sólo inflija aún más sufrimiento al pueblo de Ucrania sino que posiblemente se intensifique hasta un conflicto mucho más terrible que cause masiva destrucción y muerte, a un nivel mucho mayor, e incluso posiblemente represente una amenaza a la propia existencia de la misma humanidad.