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Un preso revolucionario responde a la polémica de BA sobre la abolición

¿Somos abolicionistas de las prisiones? (Una respuesta a “La abolición — real e ilusoria” de Bob Avakian) (2021)

Nota de la redacción: En revcom.us publicamos periódicamente cartas de presos sobre la teoría y la lucha revolucionaria, así como otros aspectos de la experiencia y el pensamiento humanos, incluidas las condiciones y la lucha dentro de las propias cárceles. A veces revisamos estas cartas. Agradecemos y aprendemos de toda la correspondencia procedente de las prisiones. Las opiniones de las cartas que publicamos son las de los autores y no necesariamente las de revcom.us.

Kevin “Rashid” Johnson, al escribir por el Revolutionary Intercommunal Black Panther Party

 

ABOLIR LA ESCLAVITUD CONTRA ABOLIR LAS PRISIONES

BA comienza su artículo señalando una diferencia entre la abolición en relación con la esclavitud literal que todavía existe hoy día, y la “abolición” como un movimiento cuyo objetivo es poner fin al racismo institucionalizado en Estados Unidos, que se vincula con la encarcelación en masa y la sociedad de clases que engendra estas condiciones opresivas.

Sostiene que esta última forma de abolición no puede lograrse salvo por medio de una lucha revolucionaria con el objetivo de derrocar este sistema capitalista-imperialista, y reemplazarlo por un sistema socialista con el objetivo final de realizar el comunismo mundial (un mundo sin estado-naciones, clases, etc.). Estoy completamente de acuerdo con esta posición. Como he expresado antes, haciéndome eco a camaradas como Kwame Nkrumah y Fred Hampton, Sr., el racismo y el capitalismo van de la mano.

LAS CÁRCELES ESTABAN EN EL PODER DEL ESTADO

Además, no es posible abolir las prisiones sin abolir el propio estado. Como explicó acertadamente V.I. Lenin en “El estado y la revolución”, el estado es un instrumento de dominio de clase, que impone ese dominio mediante organismos especiales de personas armadas, a saber, las fuerzas armadas, la policía y las prisiones. Abolir las fuerzas armadas, la policía o las prisiones significa abolir el estado, lo cual es imposible si no se realiza el comunismo mundial.

Arrancar el poder a la clase capitalista explotadora y asesina exigirá una lucha armada, y exigirá el mantenimiento de organismos especializados del pueblo para defenderse y rechazar el implacable impulso de los capitalistas por recuperar el poder.

Los revolucionarios entienden que incluso bajo el socialismo, donde la clase capitalista ha sido derrocada, tiene que haber un estado socialista armado para llevar adelante y defender los logros e intereses de la clase obrera. Los maoístas, en particular, entienden que bajo el socialismo la lucha de clases continúa e incluso se agudiza.

La diferencia es que bajo el socialismo, el organismo de gente armada que hace cumplir el gobierno de la clase obrera (es decir, las nuevas fuerzas armadas, policía y prisiones), estará formado por los propios trabajadores junto con otros que fueron previamente oprimidos y explotados bajo el gobierno del poder del estado capitalista; con la diferencia de que las prisiones, y las fuerzas armadas y la policía en este sentido, tendrán un aspecto muy distinto y funcionarán de manera muy distinto bajo el control de los trabajadores a lo que tienen y hacen bajo el gobierno capitalista-imperialista.

¿ES LA ABOLICIÓN DE LAS PRISIONES UNA PROPUESTA REALISTA?

Creo que la mayoría de los presos están de acuerdo en que hay algunas personas que representan un verdadero peligro para la sociedad y que la sociedad los necesita mantener bajo cierto control. ¿Quién de entre la gente en la sociedad no está de acuerdo con esto? Durante una lucha revolucionaria, hay algunas personas en la calle a las que los revolucionarios deberían detener y recluir por el bien de la sociedad. Estas cuestiones no son nuevas. En 2007 comenté:

“La esclavitud no enseña cómo ser libre. El abuso no promueve la buena ciudadanía ni la estabilidad emocional. En el socialismo seguirá siendo necesario un sistema de justicia penal — para hacer frente al comportamiento criminal antisocial. Pero nuestro modelo debe ser una ‘escuela de liberación’. Es necesario articular los principios de un auténtico sistema penitenciario y luchar por éstos, como parte de la lucha revolucionaria general. La cuestión es cómo habrá de gestionarse estas prisiones y cuáles derechos habrán de tener los presos que sean inalienables y promuevan la rehabilitación y la buena ciudadanía”1.

Así que, en un sentido muy real, los revolucionarios entienden que la abolición de las prisiones no es en absoluto una propuesta realista en esta etapa de la sociedad humana, o en cualquier etapa de la sociedad de clases que no sea el comunismo mundial.

TRANSFORMAR LAS CÁRCELES EN ESCUELAS DE LIBERACIÓN

La revolución es un proceso de parto, la vieja sociedad está preñada de la nueva. La lucha habrá de servir para crear condiciones más favorables, para la lucha, que se desarrolla de un nivel inferior a un nivel superior.

Como revolucionarios, queremos transformar las cárceles en “Escuelas de Liberación” para formar cuadros y luchadores para la revolución. Pero en un nivel más profundo, nuestro objetivo es revolucionar las relaciones sociales bajo el capitalismo para darnos mejores posibilidades de revolucionar las relaciones sociales bajo el socialismo y en el avance hacia el comunismo.

Desde que comenzamos en 2005 como el New Afrikan Black Panther Party (NABPP), y nos reconstituimos en 2020 como el RIBPP, hemos mantenido la línea de abolir la esclavitud en las cárceles de Estados Unidos modificando la XIII Enmienda para eliminar la cláusula que permite la esclavización de los condenados por delitos. Promovimos esta consigna en las prisiones de todo Estados Unidos, lo que cobró impulso y condujo a numerosas huelgas de trabajo en las prisiones y a un amplio movimiento para enmendar la XIII Enmienda que recorrió las prisiones en Estados Unidos y obtuvo un amplio apoyo público, especialmente entre 2014 y 2018.

Con el aumento de la participación de los “izquierdistas” antiestatistas del exterior en esta lucha basada en las prisiones, el movimiento para abolir la esclavitud en las prisiones (enmendar la XIII Enmienda) y transformar las prisiones en escuelas de liberación se ha convertido cada vez más en un movimiento para abolir las prisiones (sin la necesaria lucha prolongada para abolir el capitalismo-imperialismo y la necesidad de tener un poder estatal).

Aunque estamos de acuerdo con el objetivo de abolir las condiciones carcelarias tal y como existen y operan bajo el sistema capitalista-imperialista existente, nos oponemos a la noción de que las prisiones pueden o deben abolirse sin la realización del comunismo global.

Atrévase a luchar. ¡Atrévase a ganar!

¡Todo el poder para el pueblo!

Constitution for the New Socialist Republic in North America cover

 

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NOTAS:

1. Kevin “Rashid” Johnson, “Promoting Proletarian Consciousness as Prisoner Rehabilitation” (2007). [volver]