La Convención Nacional Republicana [CNR] de la semana pasada marcó un mayor endurecimiento de la base fascista de ese partido en torno al liderazgo de Donald Trump y su supremacía blanca abiertamente violenta, su odio a las mujeres y su odio a los inmigrantes. Los delegados que acudieron a Milwaukee trataron el hecho de que Trump sobrevivió a un atentado dos días antes de la convención, como un milagro entregado por “Dios”. Como ha dicho Bob Avakian, este atentado es “una especie de ‘fenómeno sísmico’ social y político que seguramente continuará afectando profundamente la situación en Estados Unidos (y de hecho en el mundo en su conjunto) a medida que las cosas sigan desenvolviéndose”. Y algunas de esas implicaciones se evidenciaron la semana pasada.
Justo después del atentado, la gente del entorno de Trump percibió una oportunidad de propagar el movimiento fascista a millones de personas nuevas. De último momento quitaron algunos de los discursos originales más descaradamente fascistas de varios oradores a fin de restarle importancia al conflicto y enfatizar la “unidad nacional”. Su objetivo era atraer a más personas hacia el paraguas fascista con un ablandamiento muy temporal del mensaje republicano con fauces ensangrentadas.
Pero el verdadero contenido de la convención aún dejaba claro que la “unidad nacional” va a estar bajo términos fascistas.
Aquí van cinco cosas que aprender de la Convención y su verdadero contenido:
Vídeo en inglés: El Trump hijo encabeza coros fascistas MAGA de “A luchar, a luchar, a luchar” en la CNR.
1. La locura religiosa que está al centro del apoyo a Trump se volvió aún más fanática. Hubo declaraciones de que “Dios” salvó a Trump de la bala del asesino y que el propio Trump es “providencial”, es decir, enviado por Dios. Estas son las palabras de personas que están dispuestas a librar una guerra santa por su profeta... una guerra para imponer una “visión” de pesadilla de supremacía blanca, patriarcado y xenofobia (odio a los “extranjeros”). Como todos los guerreros religiosos, consideran que cualquier violencia que cometan lo hacen tal como manda “Dios”, y son demoníacos todos los intentos de obligarlos a seguir la justicia.
Vídeo en inglés: Hulk Hogan se pronuncia ante la CNR, se arranca la camisa durante el discurso.
2. Una mezcla tóxica de agresivo patriarcado y patriotismo corrió por las venas de la convención como metanfetamina política. Las principales presentaciones de Trump provinieron del luchador Hulk Hogan y del magnate de las artes marciales mixtas Dana White. Hogan dijo que “cuando Donald J. Trump llegue a la presidencia de Estados Unidos, todos los verdaderos estadounidenses serán apodados trumpistas porque todos los trumpistas van a estar desmandados por cuatro años. Con el poder de Donald J. Trump y todos los trumpistas desmandados, Estados Unidos volverá al debido carril y, como dijo Donald J. Trump, Estados Unidos va a volver a tener grandeza”. Trump incluso entró a la Convención al son del estúpido himno patriarcal de James Brown, “It’s A Man's World” [Es un mundo de hombres], y toda la convención intentó ponerlo en práctica, desde Tucker Carlson para abajo. Toda la Convención se centró en Trump como un “patriarca tierno, cariñoso pero duro que lucharía por su país como lucharía por su familia”.
Vídeo en inglés: Babosadas patriarcales sobre Trump en boca de Tucker Carlson en la Convención Nacional Republicana.
Lo único que Trump dijo que fue cierto es esto: “Hay una CRISIS INTERNACIONAL tal como el mundo rara vez ha visto. La guerra hace estragos en Europa y el Medio Oriente, un creciente fantasma de conflicto se cierne sobre Taiwán, Corea, Las Filipinas y toda Asia, y nuestro planeta se tambalea al borde de una Tercera Guerra Mundial, y ésta será una guerra como ninguna otra…” pero después de esta amenaza velada, inmediatamente alardeó de que podía evitar guerras con una simple amenaza telefónica a cualquier dirigente. Aquí Trump hace lo que parecía imposible: lleva la locura suicida del imperialismo de apoyarse en las armas nucleares que podrían aniquilar TODA la vida sobre el planeta a un nivel aún más delirante y demencial. (Véase el artículo de Bob Avakian de 2020, “El patriarcado y el patriotismo —la agresiva supremacía masculina y supremacía pro estadounidense— el peligro y el reto inmediato”.)
Vídeo en inglés: Ted Cruz y su delirio anti-inmigrante en la Convención Nacional Republicana.
3. Odiar y usar de “chivos expiatorios” a los inmigrantes descendió a nuevos abismos de vileza. Tanto Ted Cruz como el propio Trump azuzaron a la multitud contando varios casos de inmigrantes “ilegales” que supuestamente violaron y asesinaron a mujeres estadounidenses y afirmaron que esto sucedía “todos los malditos días”. Convenientemente dejaron de lado los casos de matanza en masa de inmigrantes por hombres blancos y la “verdad incómoda” de que, de hecho, los llamados inmigrantes “ilegales” cometen delitos a un ritmo mucho menor que las personas nacidas en Estados Unidos. E ignoraron conscientemente la verdadera prevalencia de violaciones y asesinatos de mujeres en las peligrosas rutas de fuga a las que la política estadounidense ha obligado a la gente a utilizar. Pero fue aún más lejos. Trump y sus secuaces pintaron a los inmigrantes como los culpables de todo lo malo, desde la adicción a los opiáceos hasta los precios de la vivienda. Esto canaliza el hecho de que Hitler culpaba al pueblo judío por todo lo malo en Alemania, lo que llevó al programa nazi de ejecuciones a escala industrial de 6 millones de judíos en unos pocos años.
Vídeo en inglés: Tras al atentado, Tim Scott le llama a Trump un ‘león americano’.
4. Las venenosas mentiras de que los negros vendidos por Trump se volvieron aún más descaradas. Durante los últimos 20 años y pico, el hiphop ha estado cada vez más dominado (se podría decir asfixiado) por lo que Bob Avakian ha llamado los 3M y P — Mío, Moneda, Misoginia y Patriarcado. Trump ha sobornado a algunos raperos con indultos legales. Más que eso, ha fomentado una identificación con él como el mayor “gangsta” de todos — que en la pútrida escena hiphopera actual ha ganado adeptos en cierta medida. Amber Rose y otros manifiestan esto.
Al mismo tiempo, los fascistas han desarrollado a un cuerpo de fascistas cristianos negros religiosamente fanáticos y violentos, que van desde la religiosidad delirante de Tim Scott hasta su candidato a gobernador (¡!) en Carolina del Norte, quien dijo en un acto de campaña: “Algunas personas tendrán que morir”, pero que para la convención suavizó el tono en concordancia con el “nuevo mensaje de unidad”.
Vídeo en inglés: ‘A excavar, maldita sea, a excavar...’Donald Trump sobre la excavación en busca de petróleo en Estados Unidos en la CNR 2024.
5. Trump prometió destruir el medio ambiente a un ritmo aún más suicida que Biden. La actitud se resume mejor en este clip, en que Trump dirige a sus fieles en un coro de “A excavar, maldita sea, a excavar” — en otras palabras, llamar a aumentar en grande la producción de petróleo en un momento en que cantidades récord de personas se están muriendo a causa del calor en todo el mundo. Para colmo, casi tenías la sensación de que la gente decía alegremente: “Saqueemos todo para nuestro beneficio ahora y que se jodan el planeta y las generaciones del futuro — ¡Dios se encargará!”
La Convención Republicana traza una imagen viva de la verdad que Bob Avakian describe en el urgente e importante conjunto de nuevos mensajes en las redes sociales que se presentan en este número:
Todo esto es una expresión del hecho de que ya no puede mantenerse la forma en que una clase dominante básicamente unificada ha gobernado el país durante generaciones. Es muy probable que el desenlace de todo eso sea un cambio radical, de un tipo u otro. La cuestión crucial, como he dicho anteriormente, es si ¿será un cambio radical reaccionario, que intensifique más la ya terrible opresión y las atrocidades horripilantes integradas en este sistema del capitalismo-imperialismo, el cual las comete continuamente — o si será un cambio radical revolucionario que abra camino hacia la abolición de la base para todas estas atrocidades?