Un equipo de los revcom y miembros del Club Revolución-Nueva York marcharon hacia la pequeña multitud de unos 60 manifestantes proinmigrantes en el sector Riverdale de El Bronx en la ciudad de Nueva York, con megáfonos a todo volumen y un coro que resonaba: Sin odio, sin miedo, ¡Los inmigrantes son bienvenidos aquí! Los coros, el desafío y la presencia de los revcom sacaron a relucir una expresión más coherente y contundente de la indignación y la ira de los manifestantes ahí. Al otro lado de la calle unos 40 fascistas antiinmigrantes daban vueltas frente a una antigua residencia estudiantil universitaria que la ciudad de Nueva York se propone convertir en albergue para algunos de los más de 100.000 inmigrantes que han sido enviados a la ciudad de Nueva York desde Texas. Estos migrantes han sido utilizados como peones en las maniobras políticas cínicas y egoístas que se están produciendo entre Eric “El Giuliani negro” Adams y Biden en Washington, D.C.

Curtis Sliwa, que organizó al reaccionario grupo de justicieros Ángeles Guardianes en la década de 1980, ha resurgido como un organizador fascista contra estos inmigrantes desesperados que solicitan asilo en Estados Unidos. Ha organizado feas y odiosas manifestaciones de cientos de personas en Brooklyn y unas 1.000 en Staten Island, y ahora este pequeño mitin en El Bronx hasta ahora, y no se detendrá. Los términos que se están estableciendo son muy malos para el pueblo y los revcom acudieron a esta protesta decididos a cambiar esa dinámica y trabajar por la repolarización para la revolución.

Aunque la presencia de los revcom llevó la protesta justa contra estos fascistas a un nivel más alto, también surgió cierta controversia e incomodidad entre algunas de las fuerzas activistas ahí por la presencia de los revcom y lo que teníamos que decir. ¡Estaban presionando para mantener la protesta dentro de ciertos límites y hablar de la revolución estaba mucho más allá de esos límites!

Nuestra agitación incluyó el comentario de Bob Avakian sobre “¿Por qué viene gente de todo el mundo?” Como él dice, porque Estados Unidos ha cagado al resto del mundo aún peor que aquí. Y critica a las personas que quieren tomar parte en el “botín” del imperialismo pero luego aúllan y se quejan porque el funcionamiento de ese sistema imperialista obliga a las personas a acudir a Estados Unidos.

Leemos la declaración Necesitamos y Exigimos: Una forma completamente nueva de vivir, un sistema fundamentalmente diferente, donde se dice que en la nueva sociedad después de la revolución: “Los inmigrantes, desde todas partes del mundo, que tengan un deseo sincero de contribuir a las metas de la nueva república socialista serán bienvenidos en esta república”. E invitamos a un foro de emergencia —en Libros Revolución, el miércoles 27 de septiembre a las 7 pm— todos aquellos de “nuestro lado” de la calle a asistir y explorar las razones por las que esta situación se está dando: ¡No tenemos ningún problema con la inmigración, tenemos un problema con el imperialismo!