La unidad de cuidados intensivos (UCI) de un hospital es el lugar al que acuden para recibir tratamiento los enfermos y heridos más desesperadamente graves. Pero la semana pasada, Israel convirtió a la UCI del Hospital Kamal Adwan, en el norte de Gaza, en una zona de fuego libre. Las fuerzas israelíes también atacaron la guardería, la sala de maternidad y otros departamentos del hospital con “fuego de francotiradores, proyectiles de tanques y cuadricópteros [aviones no tripulados (drones)]”, dijo el director del hospital el 22 de diciembre. “Desde hace más de una hora, nos llueven proyectiles desde todos los rincones, millas y direcciones”.

El hospital Kamal Adwan ha sido uno de los pocos en el norte de Gaza que siquiera funcionaba, y apenas se ha mantenido en pie. La semana pasada, Israel ordenó a la gente que se encontraba dentro y alrededor del hospital que evacuara. Rodearon el hospital con tanques, tropas y drones, haciendo que fuera prácticamente imposible para cualquiera de los pacientes o el personal cumplir la orden de evacuación. Luego, las fuerzas israelíes lanzaron su ataque asesino contra el hospital. En los últimos días, se informó de “muchos heridos” y de “balas penetrando las paredes y dañando también el equipo”.

A pesar de las súplicas del personal del hospital y de los pacientes, ninguna de las potencias mundiales, que afirman defender el derecho humanitario, tomó ninguna medida significativa para detener este ataque depravado.

La campaña genocida se intensifica, centrada en el norte de Gaza

El ataque al Hospital Kamal Adwan es otro ejemplo más de la campaña criminal israelí para destruir totalmente todos los servicios de salud en Gaza (hospitales, clínicas, ambulancias) así como para asesinar a los trabajadores de la salud. Se trata de una parte clave de la continua campaña de genocidio de Israel contra el pueblo palestino en su conjunto. La cifra oficial de muertos después de 14 meses consecutivos de incesantes ataques israelíes (contra personas que están indefensas ante tanques, misiles y aviones de guerra) asciende ahora a más de 46.000 personas, en su gran mayoría niños y otros civiles. Según un estudio de la revista médica The Lancet, ¡la cifra real de muertes directas e indirectas causadas por Israel en Gaza puede ser de más de 186.000!

Este genocidio se centra ahora en el norte de Gaza, que Israel ha aislado del mundo exterior y del resto de Gaza.

El genocidio de Israel: imposible sin el apoyo masivo de Estados Unidos

La administración Biden-Harris ha pronunciado repetidamente palabras engañosas de “preocupación” por el horrendo sufrimiento de los palestinos en Gaza, y afirma que Estados Unidos está pidiendo a Israel que “se contenga”.

La realidad es que Estados Unidos ha respaldado, armado, financiado, defendido y facilitado plenamente el genocidio israelí contra los palestinos en Gaza, desde el día en que comenzó tras el ataque reaccionario de Hamás el 7 de octubre de 2023 hasta hoy. Esto ha incluido al menos 22.76 miles de millones de dólares para las operaciones militares de Israel y las operaciones estadounidenses relacionadas en la región. Estados Unidos ha proporcionado asesoramiento militar e inteligencia a Israel. Ha vetado repetidamente resoluciones de la ONU que piden el cese de la ofensiva israelí en Gaza. Y los órganos de propaganda de los gobernantes estadounidenses, es decir, los grandes medios de comunicación, han repetido las excusas de Israel para su genocidio.

En resumen, este genocidio masivo y bárbaro no hubiera sido posible sin el apoyo de Estados Unidos. La sangre está en las manos de Estados Unidos.