Durante los últimos dos años, Israel —con el pleno respaldo y apoyo de Estados Unidos— ha llevado a cabo una matanza genocida contra los 2,2 millones de palestinos en Gaza. Casi 70.000 personas han sido asesinadas, incluyendo al menos 20.000 niños. Miles más permanecen sin contar bajo los escombros creados por bombas y misiles sin parar. Toda la infraestructura de Gaza ha sido destruida: complejos de apartamentos, escuelas, hospitales, granjas, panaderías, sistemas de desalinización de agua y de alcantarillado... Nada quedó intacto por la implacable campaña de bombardeos que convirtió a Gaza en un paisaje lunar desolado de devastación y cenizas.

Este otoño, el régimen fascista de Trump decidió que, para promover su propia agenda imperialista depredadora, se debía disminuir el sangriento asalto de Israel a Gaza, al menos por el momento. El 10 de octubre, Estados Unidos, Israel y Hamás acordaron un cese el fuego. El futuro del plan de Trump sigue siendo incierto, pero las atrocidades de Israel contra el pueblo de Gaza no se han detenido.

Pero debido a que a todos se les ha dicho que existe un cese al fuego, y porque Israel libró una campaña sistemática para matar a periodistas palestinos, y todavía no permitirá que los periodistas extranjeros entren en Gaza, son pocas las noticias de este horror o no se informan en absoluto.

* Israel sigue bombardeando y matando: Israel continúa violando desenfrenadamente el “cese el fuego” negociado por Estados Unidos, bombardeando y matando a palestinos casi todos los días. Durante la semana pasada, Israel lanzó bombas o proyectiles contra Deir al-Balah, el campo de refugiados de Nuseirat y la ciudad de Gaza en el norte, y contra Jan Yunis en el centro de Gaza. Estos ataques elevan el número de palestinos muertos a más de 241 y de heridos a 609 desde el 10 de octubre, cuando entró en vigor el cese el fuego mediado por Estados Unidos.

* Israel ha convertido a Gaza en la fosa común más grande del mundo, sembrada de cadáveres y de municiones mortales sin explotar. Las bombas, proyectiles y misiles de Israel, la mayoría hecha en Estados Unidos, han convertido a Gaza en la “fosa común más grande del mundo”, como afirma el Comité Nacional para las Personas Desaparecidas. Como si esto no fuera suficiente horror, también hay al menos 3.000 bombas sin explotar en medio de la devastación, constituyendo unas 71.000 toneladas de explosivos, que recientemente mataron a cinco niños y amenazan con matar a muchos más a medida que comiencen los esfuerzos de recuperación y reconstrucción.

* Israel sigue demoliendo las casas y estructuras de Gaza. Israel ya ha destruido más del 80 por ciento de las viviendas y otras estructuras de Gaza, y su programa genocida de hacer que Gaza sea inhabitable sigue vigente: las Naciones Unidas advierten que Israel sigue demoliendo edificios residenciales todos los días en las áreas donde están desplegadas sus tropas, en particular, Jan Yunis, la ciudad de Gaza y Rafah.

* También está impidiendo que las tiendas de campaña entren aunque se acerca el invierno. Mientras tanto, Israel ha rechazado 107 solicitudes de llevar a Gaza la ayuda crucial, como “mantas, ropa de invierno y herramientas y materiales para mantener y operar los servicios de agua, saneamiento e higiene”, y también está bloqueando tiendas de campaña, casas móviles y otros materiales para refugios — mientras el invierno se acerca rápidamente y cientos de miles de habitantes de Gaza viven en refugios improvisados o edificios bombardeados. “Odiamos el invierno” dijo un palestino. “Después de cada aguacero, el campo de desplazados donde se aloja Hamza al-Mutawwaq se convierte en un pantano. ‘Es como si la gente estuviera durmiendo en un río de agua de lluvia’”, dijo desde el campo de refugiados de Nuseirat en el centro de Gaza.

* Israel continúa bloqueando la ayuda de vida o muerte. Según la Oficina de Medios de Gaza, solo 4.453 camiones de los 15.600 requeridos por el cese el fuego habían ingresado a Gaza. En otras palabras, Israel ha bloqueado la entrada a Gaza de más del 70 por ciento de los alimentos, medicinas, refugio y otra ayuda que se necesita desesperadamente. “El número promedio de camiones que ingresan diariamente a Gaza desde que comenzó el cese el fuego es de solo 171, de los 600 camiones que se supone que ingresen diariamente de acuerdo con el protocolo humanitario”, informó la Oficina. Israel está bloqueando a propósito los alimentos nutritivos, como los huevos, la carne, el pescado, las verduras y los productos lácteos, mientras que permite la entrada de artículos “nutricionalmente inútiles” como barras de chocolate, papas fritas, refrescos y otros alimentos similares.

* El régimen fascista de Trump maniobra para imponer su plan de “paz” depredador e imperialista. El embajador de Trump ante la ONU ha exigido que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas apruebe formalmente el plan del régimen de Trump para Gaza, advirtiendo que si no lo hace, el cese el fuego podría “dar paso a un regreso a la guerra”, informa el New York Times. Esta resolución patrocinada por Estados Unidos “consagraría el plan de paz de Gaza del presidente Trump en el derecho internacional con poco espacio para la negociación”. Esto es nefasto porque el plan de Trump no incluye ninguna responsabilidad ante la ONU, ninguna responsabilidad por el genocidio depravado de Israel, ningún papel de gobierno para los palestinos en Gaza y ningún reconocimiento de los derechos palestinos. “Hay mucho en juego para los palestinos”. informa el New York Times. “Si se aprueba, el proyecto de resolución del Consejo de Seguridad... convertiría efectivamente el plan de paz del Sr. Trump en derecho internacional vinculante”.

En otro frente, Estados Unidos también maniobra para tomar el control de la entrega de ayuda humanitaria, y relegar a “Israel a un papel secundario”, informa el Washington Post. Lo hace para evitar el colapso del cese el fuego y garantizar la implementación del plan de Trump para Gaza. Sin embargo, la última vez que una entidad estadounidense asumió la responsabilidad de la “ayuda humanitaria”, la convirtió en un campo de exterminio estilo Los juegos del hambre, con más de 3.000 palestinos muertos peleándose desesperadamente para conseguir la ayuda. (Vea: “Israel y Estados Unidos convierten los centros de distribución de alimentos en campos de muerte — más de 500 palestinos hambrientos fueron abatidos a tiros mientras buscaban comida para sus familias”).

Como escribimos la semana pasada,

El destino del depredador e imperialista “plan de paz” de Trump sigue siendo incierto. Pero siguen sueltos los monstruos genocidas —en Estados Unidos e Israel— y sus planes y maniobras no ofrecen ningún futuro para el pueblo palestino, ni para la gente del Medio Oriente, el futuro que merecen y necesitan tan urgentemente.

El asesinato, la opresión y el genocidio del pueblo palestino en Gaza, Cisjordania y dentro de Israel deben terminar. Los millones de personas que se han puesto en pie por todo el mundo deben seguir exigiendo que termine esta dominación y opresión imperialista, y que luchemos ¡por un mundo completamente diferente y mucho mejor!

¡Alto al genocidio del pueblo palestino a manos de Estados Unidos e Israel!

¡Fin al asedio a Gaza!

¡Todo este sistema está podrido e ilegítimo! ¡Necesitamos y exigimos: una forma de vida completamente nueva, un sistema fundamentalmente diferente!

Para más información, véase “El genocidio israelí-estadounidense de palestinos en Gaza continúa bajo el ‘alto el fuego’ y ‘plan de paz’ de Trump”, revcom.us, 4 de noviembre de 2025.