El acontecimiento más significativo en la escalada del fascismo MAGA de Trump es el llamamiento de Rechazar el Fascismo / RefuseFascism.org:

Ha llegado la hora de… LA CAÍDA del RÉGIMEN FASCISTA DE TRUMP. A partir del miércoles 5 de noviembre de 2025, Washington, D.C. Empieza con:

El fascismo no es una amenaza que se avecina. Lo tenemos encima pero ya.

La única esperanza para la humanidad es que se pongan de pie millones de las personas decentes de Estados Unidos. No podemos esperar para unas elecciones amañadas en el futuro. Tenemos que expulsar del poder al Régimen Fascista de Trump.

A partir del 5 de noviembre, el aniversario del triunfo electoral de Trump, inundemos a Washington, D.C. con protestas no violentas. Rodeemos la Casa Blanca. Rodeemos el Capitolio. Rodeemos la ilegítima Corte Suprema llena de fascistas. Regresemos una y otra vez. Por todo el país, neguémonos a obedecer. Todas las personas de conciencia, millones de nosotros juntos, paremos en seco la máquina del régimen fascista.

No nos detengamos hasta que Trump sea sacado.

Toda persona decente debe tomar en serio este llamado, difundirlo ampliamente y actuar en consecuencia.

Este llamamiento de Rechazar el Fascismo llega en un momento en que el fascismo de Trump y MAGA, está apretando los cerrojos en todos los frentes. La semana pasada en particular, además de la toma militar de Washington D.C. y el aumento de las redadas de ICE en todo el país, cubrimos aquí cómo el régimen ha atacado la verdad científica (y a los propios científicos); la memoria histórica y la verdad, la conciencia artística, y al gobernador de California, Newsom, y a otros políticos demócratas, y ha creado una fuerza de ataque de 24 horas que puede ser desplegada en cualquier lugar del país en cualquier momento.

Disparos contra los CDC: un ataque a la verdad científica y a los científicos

El 8 de agosto, un asesino antivacunas disparó más de 180 balas contra varios edificios de la sede de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) en Atlanta, Georgia. Unas 150 ventanas quedaron destrozadas por las balas. Un policía murió y el antivacunas se suicidó. Esto fue increíblemente peligroso y podría haber sido mucho peor.

Una semana después del ataque a los CDC, Trump no ha dicho nada al respecto. Comparen esto con la indignación pública de Trump por el presunto robo de auto de un agente de DOGE a manos de varios adolescentes desarmados en Washington, D.C., y su uso de ese incidente como justificación para la represión policial-militar en la capital.

El tirador aparentemente creía que la vacuna contra la COVID-19 era la responsable de sus problemas físicos y mentales, como depresión, pérdida de peso, dificultad para tragar y trastornos estomacales. Como escribió Jeremy Faust, médico de urgencias y experto en salud pública, en Inside Medicine, esto fue una embestida violenta “alimentada por el sentimiento antivacunas”. Esas tonterías irracionales y anticientíficas sobre los “peligros” de las vacunas están siendo, a su vez, alimentadas desde las altas esferas del régimen de Trump, como parte de sus ataques extremos a la verdad científica y a los científicos.

Las vacunas contra la COVID-19, el sarampión, la viruela y otras enfermedades graves han salvado a decenas de millones de vidas de personas en todo el mundo durante décadas. Existe una montaña de evidencia científica sobre la seguridad de las vacunas. Pero el “zar de la salud” de Trump, Robert F. Kennedy Jr., ha afirmado que los CDC eran un “pozo negro de corrupción”, ha llamado a los científicos de los CDC “nazis” que deberían ser encarcelados, y ha dicho que la vacuna contra la COVID era la “vacuna más letal jamás fabricada”. Ha purgado a los verdaderos científicos de los CDC y otras agencias, y los ha reemplazado por estafadores antivacunas y anticiencia que promueven todo tipo de disparates anticientíficos y teorías conspirativas.

Aunque RFK Jr. condenó oficialmente el tiroteo, siguió atacando a los CDC. Cuando se le preguntó si “reprimiría la desinformación sobre las vacunas”, RFK respondió que “la gente no cree en las agencias de salud pública” porque “no han sido honestas”.

Esto es fundamentalmente una mentira, y su objetivo es difundir disparates anticientíficos y atacar a científicos y profesionales de la salud. Es este régimen el que ha puesto en la mira a los CDC.

La Casa Blanca ordena la censura supremacista blanca de los museos Smithsonianos

El 12 de agosto, el régimen de Trump dio un paso más en su ataque fascista contra el Instituto Smithsoniano, así como contra la memoria histórica y la verdad sobre Estados Unidos. El régimen envió al Smithsoniano una carta en la que solicita una “revisión interna exhaustiva” de ocho de sus museos¹ en Washington, D.C. La carta exige que el Smithsoniano se asegure de que las exhibiciones, las redes sociales, etc., de los museos estén “en consonancia con la directiva del presidente de celebrar el excepcionalismo estadounidense”.

Esta última orden sigue a la orden ejecutiva de Trump “Restaurar la verdad y la cordura en la historia estadounidense”, que se dirigía explícitamente al Museo Nacional de Historia y Cultura Afroamericana (MAAHC), alegando que ese museo es parte de un “esfuerzo concertado y generalizado para reescribir la historia de nuestra Nación”. De hecho, son Trump y los fascistas de MAGA quienes están tratando de reescribir de modo supremacista blanco la verdadera historia de Estados Unidos — la historia de la esclavitud, el genocidio de los pueblos nativos y las guerras coloniales e imperialistas, las invasiones y la dominación.

La realidad es que, como escribió Lenny Wolff cuando Trump emitió la orden ejecutiva, el MAAHC “es un museo asombroso y, en muchas secciones, históricamente acertado y científicamente riguroso. Pase un día ahí… y obtendrá una explicación vívida y básicamente acertada del papel que jugó la esclavitud en el ascenso del capitalismo, y viceversa. Obtendrá una buena fundamentación en qué tan central que lo fue la esclavitud para la economía y la cultura de Estados Unidos en sus primeros 90 años. También experimentará de forma visceral los verdaderos horrores del Paso Medio, en el que más de un millón de africanos murieron engrilletados en su travesía hacia la esclavitud en las Américas. Hay mucho más que explorar, pero no me cabe duda de que este elemento es una gran parte de lo que tanto ofende al supremacista blanco acérrimo Trump.”.

En julio, el Museo Nacional Smithsoniano de Historia Estadounidense se retractó de cualquier mención a los dos juicios de destitución de Trump en una exposición del museo que supuestamente trata sobre juicios de destitución. Solo dejaron menciones de Andrew Johnson y Bill Clinton como presidentes sometidos (pero no condenados) a juicios de destitución, y de Richard Nixon como presidente obligado a dimitir. Según NPR, el museo “ha restaurado esas referencias, utilizando un lenguaje revisado y colocándolas en un lugar menos destacado dentro de la exposición”.

Es urgente que haya un incumplimiento institucional masivo dentro del Smithsoniano, entre los historiadores, académicos y toda la gente decente en DC y sus alrededores: defender la verdad, negarse a distorsionar y borrar la verdad en las exhibiciones de los museos, los carteles en las paredes, los sitios web — en todas partes donde esta verdad esté bajo ataque fascista.

Convertir el Kennedy Center en un centro de cultura fascista

El Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas (conocido como el Kennedy Center) en Washington, D.C., es supuestamente el “centro cultural nacional de Estados Unidos”. Se conceden anualmente premios, Los Kennedy Center Honors, a cinco artistas por los logros de toda una vida, y están considerados entre los premios más prestigiosos de las artes escénicas estadounidenses. Entre los galardonados se incluyen destacados artistas de la música, la danza, el teatro, la ópera, el cine y la televisión, y suelen ser seleccionados por un consejo directivo.

Este año, con el fascismo MAGA de Trump apoderándose de todos los ámbitos de la sociedad, será muy diferente. El 13 de agosto, Trump anunció que él mismo había elegido a los galardonados con Kennedy Center Honors este año y que presentaría la ceremonia de entrega de premios en diciembre, no por sus contribuciones a la cultura en general, sino (sin faltarle el respeto a los artistas) porque, basándose en su idiotez estadounidense homogeneizada, le gustan a él.

Los elegidos por Trump para los premios Kennedy Center Honors son el cantante de country George Strait, el actor y comediante Michael Crawford, el actor Sylvester Stallone, la cantante Gloria Gaynor y la banda Kiss. Si estos artistas aceptan el “honor” otorgado por Trump, seguirán los pasos, completamente deshonrosos, de figuras culturales de la Alemania nazi que colaboraron activamente con Hitler.

Trump tomó el control del Kennedy Center en febrero, despidiendo a varios miembros de la junta y autoproclamando su presidente, declarando: “Acabamos con la programación política woke”. Los espacios públicos del Kennedy Center solían estar adornados únicamente por un busto de bronce de John F. Kennedy. Ahora, se han unido a él retratos gigantes de Trump y J.D. Vance, junto con los de sus esposas. Trump “bromeó” en una publicación de Truth Social sobre cambiar el nombre del centro a “TRUMP/KENNEDY CENTER”.

El intento de Trump de convertir el Kennedy Center en el centro de entretenimiento del emperador fascista es parte de la campaña MAGA para transformar la cultura estadounidense en un “entretenimiento” de pan blanco y mayonesa, con absoluto desprecio por el pensamiento crítico y la gran diversidad del arte.

Una amenaza de intimidación abierta contra Newsom y otros políticos demócratas

En medio de una ola de redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Los Ángeles, en continuo desafío a una orden judicial, el ICE se presentó fuera de una conferencia de prensa del gobernador de California, Gavin Newsom. El jueves, Newsom ofreció una conferencia de prensa en el Museo Nacional Japonés-Americano en Pequeño Tokyo en Los Ángeles. Este es un lugar simbólico que conmemora el internamiento de personas de ascendencia japonesa en la Segunda Guerra Mundial. Newsom estaba allí para anunciar un plan para contrarrestar un intento de Trump y los republicanos de amañar las elecciones de 2026. En particular, en Texas, los fascistas planean rediseñar los mapas electorales para dar a los republicanos cinco escaños más en el Congreso. Newsom anunció que, si esto sigue adelante, California someterá a votación la rediseñación de los mapas electorales de California para dar a los demócratas cinco escaños más (véase el artículo “La riña sobre la manipulación de las circunscripciones electorales en Texas revela los planes fascistas de amañar las elecciones y suprimir violentamente a la oposición” para más sobre el tema).

Esto fue claramente un intento de intimidación contra los políticos demócratas. Una parte esencial del programa fascista es la forma en que Trump, y los fascistas en general, atacan a sus homólogos entre los gobernantes. Si llevan a cabo estas amenazas abiertas contra gobernadores, alcaldes y congresistas, ¡imagínense lo que le harán a las masas!

Fuerza de choque de 600 soldados del Pentágono contra las ciudades

Cuando Trump anunció que enviaría tropas militares federales a Washington, D.C., también amenazó con hacerlo en Chicago, Nueva York, Baltimore y Oakland, todas ciudades demócratas con alcaldes negros.

Ahora, según se informa, el Pentágono está haciendo planes para establecer una “Fuerza de Reacción Rápida ante Disturbios Civiles Internos” de 600 soldados que Trump podría utilizar contra estas y otras ciudades en cualquier momento.

Según el Washington Post, la fuerza de choque se dividiría en dos grupos de 300 soldados de la Guardia Nacional cada uno. Uno estaría estacionado en una base militar en Alabama, para su despliegue al este del rio Misisipí, y el otro en una base en Arizona, para su despliegue en los estados del oeste. Estarían en alerta las 24 horas y listos para desplegarse en tan solo una hora.

En 2020, Trump quiso usar este tipo de fuerza contra las protestas que estallaron en ciudades de todo el país tras el asesinato de George Floyd a manos de la policía. La oposición dentro de su propio régimen se lo impidió. Ahora, Trump tiene como secretario de Defensa a Pete Hegseth, un fascista cristiano fanático que dejó clara su disposición a cumplir fielmente sus órdenes, por inconstitucionales que fueran, y ha destituido de los altos mandos militares a oficiales negros, mujeres y otros que pudieran obstaculizar sus acciones.

5.000 guardias nacionales e infantes de marina en Los Ángeles… 800 tropas de la Guardia Nacional en Washington, D.C. (y se unirán con ellos cientos de tropas de Virginia Occidental, Ohio y Carolina del Sur)... miles de tropas de combate desplegadas en la frontera con México... ahora una fuerza de choque lista para ser enviada a cualquier ciudad en cualquier momento. El régimen fascista se está actuando con rapidez para reprimir a todo el país.

Para terminar donde empezamos, como dice Rechazar el Fascismo / RefuseFascism.org en su nuevo llamamiento: “El fascismo no es una amenaza que se avecina. Lo tenemos encima pero ya. La única esperanza para la humanidad es que se pongan de pie millones de las personas decentes de Estados Unidos. No podemos esperar para unas elecciones amañadas en el futuro. Tenemos que expulsar del poder al Régimen Fascista de Trump”.