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Sexta parte

ENTREVISTA CON BOB AVAKIAN

PERIODISMO Y LIBERTAD DE PRENSA

Las siguientes son preguntas que se hicieron para una entrevista con Bob Avakian, teórico comunista, autor del Nuevo Comunismo y Presidente del Partido Comunista Revolucionario. Para esta entrevista se hicieron seis preguntas; se indican con “Entrevistador”, y estas preguntas están en negritas, mientras que las respuestas de Bob Avakian se indican con las iniciales BA. Estas preguntas se hicieron antes de la invasión rusa a Ucrania y los acontecimientos posteriores; las respuestas de Bob Avakian se finalizaron poco después del inicio de la guerra desencadenada por esa invasión.

Al principio hay algunos comentarios introductorios del entrevistador, con una respuesta de Bob Avakian. Y luego siguen las preguntas y respuestas específicas.

Esta entrevista se postea aquí en formato “de serie”, con un segmento posteado en revcom.us cada semana (un total de siete segmentos), que se inicia con los comentarios introductorios generales del entrevistador y la respuesta de Bob Avakian, y luego las seis preguntas específicas y las respuestas de Bob Avakian.

(Los números, entre paréntesis, en las preguntas se refieren, primero, al año de publicación [2018] del libro de Bob Avakian, El Nuevo Comunismo, La ciencia, la estrategia, la dirección para una revolución real y una sociedad radicalmente nueva en el camino a la verdadera emancipación, y luego a los números de página de ese libro).

El texto completo de esta Entrevista está disponible aquí.

La entrega “COMENTARIOS INTRODUCTORIOS” salió como Primera parte de esta serie.
La entrega “CAMBIO CLIMÁTICO — JUSTICIA CLIMÁTICA” salió como Segunda parte.
La entrega “MIGRACIÓN Y REFUGIADOS” salió como Tercera parte.
La entrega “DERECHOS HUMANOS EN LA CADENA DE TRABAJO” salió como Cuarta parte.
La entrega “CLASES” salió como Quinta parte.

COMENTARIOS INTRODUCTORIOS

Entrevistador: Después de leer El Nuevo Comunismo (2016 en inglés; 2018 en español), y de pensar en temas que en tan sólo cinco años se han manifestado con mayor severidad, como lo ha puesto de relieve la pandemia de la Covid-19, que llaman con aún más urgencia a cambios en el “sistema que es la fuente fundamental de tanta miseria y tormento en el mundo” (8), hay varios temas —clima, migración, libertad de prensa, cadena de trabajo-suministro, clase y derechos humanos— sobre los que me pregunto si estarías dispuesto a hablar. Voy a exponerlos en adelante.

BA: Antes de pasar a las preguntas específicas que hiciste, que son serias y sustantivas, y se refieren a acontecimientos importantes y urgentes en el mundo, quisiera hacer algunas breves observaciones generales, a partir de mi lectura de estas preguntas. Las respuestas a estas preguntas son, por un lado, sencillas y básicas y, por otro lado, son complejas: sencillas y básicas en el sentido de que es posible solucionar los problemas en cuestión —y es posible solucionarlos únicamente— con una revolución y un sistema radicalmente diferente, un sistema socialista que se propone alcanzar el objetivo final de un mundo comunista; y complejas en el sentido de que hacer esta revolución y luego realizar las transformaciones que este sistema radicalmente nuevo hará posible, requerirá trabajar y luchar por resolver algunas contradicciones difíciles y, a veces, intensas. En mis respuestas haré lo mejor que pueda para brindar respuestas que examinen los asuntos esenciales en juego, a la vez que me refiero a obras que brindan una discusión más extensa de lo que se presenta en estas preguntas. En particular, remito al lectorado a la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, de mi autoría. Esta Constitución fue escrita con el futuro en mente — como un conjunto que guía los objetivos, principios y disposiciones concretas para una sociedad socialista que se cree por medio del derrocamiento del sistema capitalista-imperialista que ahora gobierna en Estados Unidos y domina al mundo como un todo. En mis respuestas a las preguntas formuladas para esta entrevista, he incluido citas relativamente extensas de esta Constitución, ya que ofrece respuestas importantes, de manera concentrada, a una importante parte de lo que se formula en estas preguntas.

También es muy relevante, particularmente en lo que respecta a la economía socialista y su interacción con el medio ambiente más amplio, el artículo “Algunos principios claves del desarrollo socialista sustentable”. Además, en adición al libro El Nuevo Comunismo, otra obra mía, Breakthroughs (Abriendo Brechas), El avance histórico hecho por Marx, y el nuevo avance histórico del Nuevo Comunismo, Un resumen básico, es relevante como antecedente y en términos de elaboración adicional sobre las respuestas a las preguntas importantes formuladas en esta entrevista. Y una importante obra mía reciente analiza a fondo por qué una revolución real podría volverse posible en el propio Estados Unidos, en medio de las contradicciones agudas e intensificadas que caracterizan esta sociedad, y el mundo en su conjunto, y la manera en que se podría llevar a cabo esta revolución — una revolución que haría posible el tipo de cambios profundos que aborda esta entrevista. (Esta obra —Algo terrible, O algo verdaderamente emancipador: crisis profunda, divisiones crecientes profundas, la inminente posibilidad de una guerra civil — y la revolución que se necesita con urgencia, Una base necesaria, una hoja de ruta básica para esta revoluciónfue escrita antes de la invasión rusa a Ucrania y la posterior intensificación de las contradicciones entre el imperialismo ruso y el imperialismo estadounidense-la OTAN, que ha acompañado a esta guerra, con el realzado peligro de un conflicto militar directo entre ellos; pero esta obra ofrece un análisis esencial de las fuerzas subyacentes y motrices de los conflictos importantes en Estados Unidos y en el mundo más amplio, y su posible resolución positiva por medio de una revolución.) Estas obras, así como la Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte —y el continuo análisis de la guerra en Ucrania y otros acontecimientos mundiales importantes— están disponibles en revcom.us.

El Nuevo Comunismo —tanto el libro como el método y enfoque general— se menciona varias veces en el curso de esta entrevista, tanto en las preguntas como en mis respuestas, y aunque este no es el lugar para discutir extensamente los principios y métodos del nuevo comunismo, sí parece que es relevante y apropiado indicar lo que está en su núcleo: el nuevo comunismo representa y encarna una resolución cualitativa de una contradicción crítica que ha existido al interior del comunismo en su desarrollo hasta este momento, entre su método y enfoque fundamentalmente científico, y aspectos del comunismo que han ido en contra de éste; y lo que es lo más fundamental y esencial en el nuevo comunismo es el nuevo desarrollo y síntesis del comunismo como método y enfoque científico, y la aplicación más consecuente de este método y enfoque científico a la realidad en general y en particular a la lucha revolucionaria para derrocar y arrancar de raíz todos los sistemas y relaciones de explotación y opresión y avanzar hacia un mundo comunista. Este método y enfoque informa y subyace a todos los elementos centrales y componentes esenciales de este nuevo comunismo.

Una expresión concentrada de esto es la orientación y enfoque básico de buscar la verdad de manera científica y buscar la verdad dondequiera que conduzca, inclusive con respecto a la historia del movimiento comunista, en términos no solo de su aspecto principal —sus hazañas auténticamente históricas, y muy reales—, pero también, de manera secundaria pero importante, la verdad sobre sus errores reales y a veces incluso dolorosos (a lo que me he referido como “las verdades vergonzosas”).

Una extensión crucial de esto es el principio, que abordan varias obras mías, incluida Breakthroughs (Abriendo Brechas), de que

el nuevo comunismo repudia cabalmente, y está decidido a arrancar de raíz en el movimiento comunista, la venenosa noción, y la práctica, de que “el fin justifica los medios”. Es un principio central del nuevo comunismo que los “medios” de este movimiento tienen que provenir de (y corresponder con) los “fines” fundamentales de abolir toda explotación y opresión mediante una revolución que se dirija sobre una base científica.

Son esta orientación, método y enfoque básicos los que he aplicado a la discusión de las cuestiones importantes formuladas en esta entrevista.

Finalmente, a modo de introducción, deseo agradecerles a otras personas que leyeron las preguntas formuladas para esta entrevista y ofrecieron observaciones útiles al respecto, y en particular Raymond Lotta, quien brindó comentarios valiosos y considerables.

 

PERIODISMO Y LIBERTAD DE PRENSA

Entrevistador: Los medios de comunicación corporativos no son libres mientras estén “obligados y controlados por intereses poderosos. De hecho son la maquinaria de propaganda de la clase dominante capitalista imperialista” (14).

La corporativización de los medios de comunicación indica que se necesita un periodismo más independiente. Innumerables periodistas éticos dedican su vida a reportearse con investigaciones a fondo y acertadas a pesar de los riesgos asociados y los salarios notoriamente bajos. Los periodistas están en su gran mayoría desprotegidos, y los gobiernos a menudo no dudan en mandarlos a los leones.

En este momento, ¿cómo podrías imaginar desligar los medios de comunicación tradicionales de ser propiedad corporativa?

BA: Para comenzar con tu última pregunta, la pura verdad es que no existe forma, bajo este sistema, de desligar los medios de comunicación tradicionales de ser propiedad corporativa.

La “corporativización” de los medios es ciertamente una realidad. Puedes consultar cualquier cantidad de estudios sobre la creciente concentración de la propiedad de periódicos, emisoras radiofónicas y televisoras, grabaciones/derechos de autor en la industria de la música... y la lista continúa. Pero el hecho más fundamental es que los medios bajo este sistema están obligados a ser, y no pueden ser más que, el instrumento de la clase dominante capitalista-imperialista, a la vez que diferentes medios representen a diferentes sectores de esa clase dominante — por ejemplo, medios como la CNN, la MSNBC, el New York Times y el Washington Post, los que representan el sector “tradicional” de esta clase dominante, y por otro lado Fox “News”, que es representativo del sector fascista.

No obstante las diferencias muy reales y agudas entre esos medios, los medios dominantes (y dominadores) en Estados Unidos (entre ellos los grandes “medios noticiosos” digitales basados en el Internet), tanto “tradicionales” como fascistas, de hecho son instrumentos de propaganda de la clase dominante capitalista-imperialista.

Quizás nada lo haya ilustrado más claramente que la forma en que estos medios han tratado la invasión rusa a Ucrania. A pesar de ciertas declaraciones de varios fascistas, en particular Donald Trump, con loas a Vladimir Putin, la “cobertura” de esta invasión y guerra (y acontecimientos relacionados), por parte de los medios dominantes, ha contenido en su inmensa mayoría, si no en su totalidad, propaganda escueta que promueve los intereses de los imperialistas estadounidenses y sus “aliados”, en oposición a los intereses del imperialismo ruso. Esto ha sido cierto desde el principio con los medios que representan el sector “tradicional” de la clase dominante, pero incluso el Partido Republicano fascista y aquellos que hablan en su nombre en una medida importante se han alineado con esto — a la vez que, en muchos frentes, siguen atacando a Biden y a los demócratas (y las profundas divisiones al interior de la clase dominante y en la sociedad en su conjunto, siguen y seguirán reafirmándose e intensificándose).

Como siempre es así en tales situaciones, los medios de comunicación se han caracterizado por la aparición omnipresente de “analistas” que constan de ex oficiales militares, agentes de la CIA y otros agentes y funcionarios variados del poder imperialista estadounidense, y crímenes contra la humanidad. Esta “cobertura” de la guerra en Ucrania, y acontecimientos relacionados, ha faltado notablemente en la participación de personas que sostengan cualquier perspectiva distinta a esta.

Como he escrito sobre la invasión rusa a Ucrania y su relación con la situación más amplia de la rivalidad entre las potencias imperialistas:

Ciertamente, la intimidación y agresión de gran potencia por parte de Rusia, con su invasión a Ucrania como claro ejemplo, es algo a lo que todas las personas decentes deberían oponerse. Pero ninguna persona decente debería unirse a los imperialistas estadounidenses en su rivalidad con el imperialismo ruso. Por las razones que voy a exponer aquí, es hipocresía absoluta y repugnante que los imperialistas estadounidenses, y sus portavoces en los medios de comunicación y otros representantes, condenen de manera mojigata a esta invasión rusa, cuando Estados Unidos es el país el que, con mucho, ha llevado a cabo más invasiones y otros actos de injerencia violenta en otros países.

De alguna manera, esta “gente erudita” se ha “olvidado” de la invasión y ocupación estadounidense a otro “país soberano”, Irak, en 2003 — sobre la base de flagrantes mentiras acerca de que Irak supuestamente poseía “armas de destrucción masiva” y estaba estrechamente vinculado con terroristas fundamentalistas islámicos como Al Qaeda. Esa invasión estadounidense fue un flagrante crimen de guerra internacional, que puso en marcha acontecimientos que han costado la vida a cientos de miles de personas, han creado millones de refugiados y han desatado una vorágine de muerte y destrucción en esa parte del mundo. (Uno de los espectáculos más repugnantes de los medios de comunicación “convencionales” de estos días, como la CNN, es la presencia de funcionarios del gobierno que son “veteranos” de este crimen de guerra de Estados Unidos en Irak, y que denuncian con arrogancia la invasión rusa a Ucrania como ¡el acto ilegal de un país poderoso que agrede a un país más débil! De alguna manera, esos medios de comunicación “se pierden” la escandalosa ironía de estos criminales de guerra estadounidenses que denuncian los crímenes de guerra de otros, o la ignoran deliberadamente.)

(Esta cita es del artículo “El descarado chovinismo pro estadounidense: ‘Antiautoritarismo’ como ‘tapadera’ para apoyar al imperialismo estadounidense, que se puede encontrar en revcom.us, junto con un artículo “complementario”: “Parasitismo imperialista y ‘democracia’: Por qué tantos liberales y progresistas son sin vergüenzas partidarios de ‘su’ imperialismo”.)

En todo esto, la realidad no es simplemente que estos medios son propiedad de poderosas corporaciones e instituciones financieras, que controlan miles de millones de dólares; el problema más profundo estriba en el hecho de que la superestructura de este sistema —las instituciones políticas y legales, así como la esfera de la cultura y la ideología, incluidos los medios de comunicación— corresponderá y debe corresponder, a la naturaleza fundamental del sistema, y en particular al sistema económico subyacente, o modo de producción. En varias obras, incluida Breakthroughs (Abriendo Brechas), analizo con cierta profundidad por qué es así. En esta respuesta, el aspecto esencial se puede resumir sucintamente en el entendimiento de que si la superestructura, en cualquier sentido importante y durante cualquier período de tiempo importante, estuviera fuera de sincronización con las relaciones y dinámicas básicas del modo de producción subyacente, la sociedad sería lanzada en un caos serio, y a la larga las cosas no serían capaces de funcionar. (Una expresión llamativa de esto, que se cita en Breakthroughs [Abriendo Brechas], es el hecho de que, bajo este sistema, no puede existir ningún “derecho a comer” —o, más ampliamente, no puede haber ningún derecho a las necesidades básicas de la vida— con el ejemplo del caos y el colapso que se daría si la ley declarara que las personas tienen el “derecho a comer”, dentro de los límites de este sistema donde las necesidades básicas de la vida se producen como mercancías, las que hay que comprar mediante el intercambio de otra mercancía, el dinero, y ello implicara que, si las personas no tuvieran con qué comprar sus necesidades básicas, ¡simplemente podrían llevárselas sin pagar por ellas!)

Volviendo al papel de los medios de comunicación, esta relación entre la superestructura y el modo de producción subyacente implica que (inclusive con las diferencias muy reales entre los diferentes sectores de esta clase dominante) los medios de comunicación dominantes en Estados Unidos corresponderán, y deben corresponder, a los intereses básicos del sistema capitalista-imperialista y su clase dominante, y ser una expresión de dichos intereses — un hecho que se ilustra gráficamente cuando quiera que estén en juego los intereses vitales del imperialismo capitalista estadounidense, y especialmente cuando, en el escenario internacional, obren de manera importante los intereses “nacionales” (es decir, imperialistas) de esta clase dominante.

Esta realidad explica la dificultad de cualquier esfuerzo concreto de practicar un periodismo independiente que realmente busque la verdad. Y subraya la importancia de apoyar a aquellos que realmente buscan ejercer ese periodismo.

Pero, una vez más y en lo más fundamental, esto indica que es necesario que los medios tengan un carácter y papel radicalmente diferente — y del hecho de que para ello, se requiere una sociedad radicalmente diferente. Como se mencionó en el pasaje que cité anteriormente de mi Declaración de Año Nuevo de 2021 (en respuesta a la tercera pregunta), la orientación y el objetivo de la nueva sociedad socialista, prevista en la Constitución para esa sociedad, es “capacitar a las personas en buscar la verdad dondequiera que ésta conduzca, con un espíritu de pensamiento crítico y curiosidad científica y de esta manera aprender continuamente acerca del mundo y estar mejor capacitadas para contribuir a cambiarlo en conformidad con los intereses fundamentales de la humanidad”. Esto se aplica no solo al sistema educativo, sino también a los medios de comunicación — a las instituciones de la sociedad en general. Como señala la Constitución para la Nueva República Socialista, habrá medios estatales en la sociedad que ésta prevé, pero con un papel muy distinto al de los medios de comunicación dominantes del sistema actual (y, de hecho, un papel significativamente diferente al de los medios de comunicación en sociedades socialistas anteriores). Este papel fundamental será de

proporcionarles, a las personas en la sociedad, información y análisis verídicos y de importancia concernientes a los asuntos del estado, el funcionamiento del gobierno y otros importantes sucesos en la sociedad y en el mundo.... Y al servicio de ese mismo objetivo, además de financiar y facilitar los medios alternativos que son independientes del gobierno, se harán previsiones importantes y se dispondrán de tiempo y oportunidades para la presentación, a través de los mismos medios del gobierno, de una diversidad de puntos de vista y análisis, incluyendo aquellos que difieren y están en oposición a los que presentan el gobierno y sus representantes.

Además, no sólo hace falta hacer previsiones y asignar fondos y otros recursos para los medios de comunicación independientes, sino que esto debe

facilitar la promoción y la diseminación de una diversidad de puntos de vista y opiniones con una importante representación de puntos de vista y opiniones que podrían estar en oposición a aquellos del gobierno en cualquier momento dado, entre ellos, algunos que hasta podrían oponerse no solamente a las políticas y acciones específicas del gobierno sino a los principios y objetivos básicos de la Nueva República Socialista en América del Norte.

Estos principios concernientes a los medios de comunicación (que están contenidos en el Artículo I, Sección 2,I de esta Constitución) se basan en la comprensión con fundamentación científica, y surgen de dicha comprensión, de que el proceso previsto aquí, por complejo e incluso tumultuoso que pudiera ser en ocasiones, contribuirá de manera crucial a que las masas de personas lleguen a comprender la realidad de manera cada vez más profunda, y que de esta manera se fortalezcan en su capacidad de transformar la realidad al servicio de los intereses fundamentales de la humanidad, en avanzar hacia abolir y arrancar de raíz todas las relaciones de explotación y opresión.

Bob Avakian

 

BOB AVAKIAN:
UN LÍDER RADICALMENTE DIFERENTE — UN MARCO COMPLETAMENTE NUEVO PARA LA EMANCIPACIÓN HUMANA

Conozca más sobre Bob Avakian y el nuevo comunismo
 
The New Communism cover

 

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La ciencia, la estrategia, la dirección para una revolución real, y una sociedad radicalmente nueva en el camino a la verdadera emancipación
Lea pasajes del libro

 

 

Constitution for the New Socialist Republic in North America cover

 

 
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De la autoría de Bob Avakian
Un plano concreto y visionario para una sociedad radicalmente diferente.

 

 

Breakthroughs-cover-1200 Spanish

 

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El avance histórico hecho por Marx,
y el nuevo avance histórico del nuevo comunismo
Un resumen básico